Llego a su departamento y cargaba a un Bakugou medio atontado por su celo, el cual le iba besando el cuello de vez en cuando y pidiéndole con una voz lastimera que calmara su dolor.
-Ya... aguanta un poco precioso..-dijo un Kirishima muy caliente conteniendose de hacerle cosas indebidas ahí mismo como un salvaje, pero no señores y señoras, el aun tenia algo de desencia.
Al menos algo.
El rubio iba a volverlo loco si es que ya no lo hizo.
Su lobo se volvía loco por el pelicenizo.
Llego y cerro la puerta dirigiéndose a su habitación, dejando suavemente al rubio en su cama.
Este lo miraba deseoso y embobado, estaba totalmente perdido en su celo, necesitaba del pelirrojo, el lobo de Katsuki solo quería ese hombre que estaba frente a él, el cual solo sabía su nombre.
Kirishima no tardo mucho en quitarle más ganas, se desvistio dejando su trabajado cuerpo a la vista del más pequeño el cual se levanto un poco para tocar ese abdomen marcado dejando unos besos, los cuales a Kirishima le parecían una ternura.
Pensaba seriamente si el rubio alguna vez tuvo sexo con alguien.
El de ojos de rubi le bajo los boxers desesperado para acariciar su miembro algo duro dando un beso en la punta de este, su cabeza no pensaba del todo bien, estaba haciendo cosas que para el eran muy vergonzosas, luego lo recordaría más tarde.
-Mgh. Bakugou... mierda..-hablo como pudo al sentir las pequeñas y suaves manos del omega que intentaba meterse todo su miembro a la boca.- oh pequeño, si que nos vamos a divertir...
[...]
-K-Kirishima!-Grito Bakugou embobado al sentir como lo preparaban de una manera tan experta que lo hacía alucinar.-A-ahi! S-se siente tan bien!-dijo con un tono de voz más agudo y lastimero.-Duele... p-porfavor ya mételo Kirishima..,-hablo el adolescente con un puchero sonrojado y sudado.
-Ya ya... solo no quiero hacerte daño-dijo con una sonrisa dulce para besar luego una mejilla ajena. Alineó su miembro con la entrada rosada y dilatada del omega luego de ponerse el condon para penetrarlo con cuidado, sin querer hacerle daño al rubio que apenas conocía pero su lobo adoraba.
-K-Kiri!-grito su apellido junto con un suave y bello gemido con puso peor a Kirishima el cual apenas el rubio le dio visto bueno, comenzó a embestir con delicadeza pero profundo haciendo al rubio retorcerse de placer.
Era su primera vez y la estaba gozando como ninguno.
-estas tan apretado.... mierda...-
[....]
luego de unas cuantas rondas el omega ya estaba algo agotado así que debía detenerse para dejarlo descansar.
Vistió al chico con una de sus camisas que le quedaba como un vestido dejando en claro que casi se le paro otra vez al ver a Bakugou con su camisa mostrando todo lo bonito que es. Lo acostó en su cama arropandolo para el darse una ducha.
Volvió de su ducha al roto encontrándose con el chico saliendo casi recién de su trance ya eran las cuatro de la mañana, no dejaría que se fuera así.
-estas despierto bakugou? Creí que dormirás-Hablo Kirishima algo sonrojado al hablar con el cual hace minutos atrás tenía sexo.
-um, iba a dormir... pero te fuiste y me dio frío-dijo un somnoliento Bakugou con un leve puchero, el rubio sabía que no eran anda para que este se quedara a abrazarlo y dormir en la misma cama, digo. Apenas se conocen.
Aun asi el pelirrojo iba a cumplir su capricho.
-oh lo siento, ya voy, deja que me ponga almenos mi ropa interior-dijo y hizo lo que dijo para acostarse al lado del rubio observando las pestañas rubias del chico el cual lo miraba.
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Muy pequeño
FanfictionBakugou un adolescente que llevaba una relación tóxica conoce a Kirishima, un hombre algo mayor para el, pero para su buena suerte es su destinado, descubriendo lo el día después de tener sexo y pasar su celo con ese maravilloso alfa.