Muy pequeño

♡Cap 27♡

Estaba nervioso no iba a negarlo, a pesar de que su mañana fue fantástica,ya que Kirishima se encargo de eso, lo despertó con besos y un desayuno en la cama.

Volvía a enrojecer cuando lo recordaba.

Pero ahora sus amigos estaban preocupados por el omega que mordía su uña.

-Katsuki, tranquilo hermano, vas a agradarle a tu suegra. Te lo aseguro, ¿Por que no le agradarías? Eres tan mono-Sero pillizco su mejilla regordeta dando a entender que era adorable.

-¿De verdad preguntas eso? Sueltame mierda.-le dio un manotazo para que lo dejara y suspiro, por razones como esas tenía miedo de ir. Pero a la vez se sentía ansioso por conocer a la madre de su novio.-El carácter de mierda-suspiro por milésima vez en el día y sus amigos intentaron consolarlo.

-Amigo tu belleza lo opaca-Menciono Kaminari dándole en el blanco.

-Dijo algo inteligente-Le dio la razón.

Katsuki no quiso seguir escuchando y se fue mientras sus amigos armaban una especie de pros y contra de él, no tenía ganas de escucharlos debía arreglarse para la cena.

Tan pronto como llego. Ala salida de su universidad su novio lo esperaba afuera usando su teléfono con un rostro serio.

¿Había ocurrido algo?

Se apresuró y entro al auto.

-hola cariño, ¿Sucedió algo? Te ves como si pasara algo.-Solto de una llendo directo al punto.

-Hola bebe, no, no pasa nada. Solo es un problema del trabajo. Como dicen cielo, si quieres bien hecho el trabajo hazlo tu mismo.-Katsuki se río, Kirishima se estrenaba a diario con la gente que no sabía hacer su trabajo pero, su corazón no le daba para despedirlos así que los mandaba a recapacitacion.

-me lo imagino pero, no trabajes de más cariño-beso sus labios como siempre al saludarse.

Kirishima volvió a dar otro queriendo más de sus dulces besos.

-Y si... llegamos un poco más tarde?-propuso el mayor y Katsuki rodó los ojos cuando su novio ya se había desabrochar el cinturón para intentar seguir el asunto pero, Katsuki le dio un empujoncito.

-Vuelve a sentarte bestia, vamos a arreglarnos para la cena, luego de la cena hacemos lo que quieras.-Decreto y su novio hizo un puchero, el quería más besos y tal vez una que otra corrida de manos.

-bien, bien-

Se arreglaron y se fueron a la dichosa comida con la madre de Kirishima.

Estaban ambos igual de nerviosos, no sabía cómo reaccionaria su madre a la marca que le hizo a su destinado y de la parecida forma que su padre se la hizo a ella.

Ni siquiera se dio cuenta cuando habían llegado...

-¿m-me veo bien para tu madre?-murmuro un muy nervioso y avergonzado Katsuki. Carajo no se había dado cuenta de que su pareja había estado todavía más nervioso, dio un suave beso en su frente y lo abrazo.

-Estas perfecto, no te preocupes bebe-toco la puerta mientras daba caricias en su cintura para entregarle un poco de calma.

Abrieron la puerta y una mujer un poco más alta que Katsuki le abrió viéndolos a ambos con una sonrisa.

-Oh dios, tu debes ser Katsuki-La señora Kirishima era parecida a su hijo, aún que había rasgos que se notaba que no eran de ella, si no de su padre.

Su madre que tenia su cabello originalmente rojo, motivo por el cual el se teñía siempre.

Tenía los ojos iguales a los de su madre

La señora Kirishima tomo las manos de Katsuki y lo inspeccionó.

-Eres hermoso, dios mio de donde mi hijo logro encontrar una belleza así.-Kirishima sonrió.

-larga historia mamá pero, mejor déjanos pasar para saludarte y te contamos.-Katsuki estaba sonrojado hasta las orejas por el comentario.

No se acosotumbraria nunca a recibir cumplidos.

Pasaron la tarde hablando hasta la hora de la cena, se encontraban comiendo muy tranquilos hasta que la madre de Kirishima vio algo que el mismo no quería que viera, no quería explicarle a sus madre.

-Katsuki-Shi... ¿E-Estas marcado?-pregunto algo alterada su madre.

-emm si pero, no se preocupe yo ya era mayor de edad así que su hijo no tiene la culpa de nada.-Katsuki sonrió abrazando a si novio con una sonrisa mientras la señora Akiko veía a Kirishima sería.

-¿como que mayor de edad? Cielo, ¿Cuantos años tienes? Se conocen hace poco por lo que mi hijo me contó.-Kirshima iba a responder pero, el más bajo se adelanto.

-Tengo diecinueve, he insisto, todo fue consensuado.-Akiko quedó casi sin aire cuando se lo dijo, recuerdos que intentaba olvidar habían vuelto.

-¿Eijirou? ¿Q-Que significa esto? ¿Que fue lo que siempre te he enseñado y repetido hasta el cansancio?-Katsuki no comprendía y los ojos de su novio parecían los de un niño triste el cual su madre le regaño. Aún así sentía distinto a su novio, le había dolido más que seguro.

-m-mama puedo explicarlo f-fue un a-accidente-Vio a Katsuki sin poder leer su expresión, y cambio nervioso sus palabras-D-digo no, n-no es que no quisiera marcarte cielo... o-osea... carajo, mamá solo ocurrió, no fue como lo de el y ya sabes-Hablo con rencor.

Se escucharon unos pasos que se dirigían al comedor mostrando a un hombre pelinegro muy parecido a Kirishima.

-Akiko, cielo lle-Vio al rubio junto a su hijo de la mano y lado la cabeza confundió, padre e hijo se veían casi iguales, si no fuera por el cabello rojo, no sabría distinguir, aunque él padre llevaba más arrugas, demostrando su vejez.

-estas aquí... Chicos disculpen mi descortesía pero, no me siento bien... Katsuki-Shi, fue agradable conocerte, espero seas feliz vuelvan el próximo miércoles hijo, yo estoy esos días aquí sola. Será un placer volver a recibirlos otro día-Katsuki no entendía, cuando apareció el padre de Kirishima todo se tenso.

-Akiko, porfavor ¿Es la pareja de mi campeón?-Hablo con orgullo su padre.

-Si. Es mi pareja pero, no quiero ni que le dirijas la palabra. Katsuki toma tus cosas, vamos a casa.-El menor no entendía nada de lo que pasaba.

Kirishima no dejo ni que su padre saludarla.

Se despidió de su madre diciéndole que le explicaría la situación apenas volviera.

Y a su Katsuki debía contarle que estaba pasando, estaba confundidó, lo sentía.

Sería una difícil conversación.