Las lunas de Nunca Mas

Capítulo 51 ¿quien diablos planificó esta boda?

Al fin el sábado había llegado y las chicas habían sobrevivido al mar de tareas que se les juntaron, por tradición o por gusto cada una de ellas fueron cumplidas, enid por supuesto había elegido para sus damas un vestido azul claro mientras que para los chicos un traje negro de moño azul también se había surtido, la abuela trabajó día y noche preparando las comidas morticia, enid y merlina habían elegido codorniz sangrienta en salsa de cereza la cual se complementaría con una ensalada de betabel para añadir mas rojo al plato, largo y algunas tías locas ayudaron con el preparativo mientras homero y morticia supervisaban la construcción del monumental jardín, las rosas negras fueron sacadas del invernadero y puestas en hermosos ramos que adornaban todos los lugares correctos, merlina también hizo los suyos colocando los ramilletes y arreglos florales de colores por casi todo el pasillo, largo había limpiado hasta el ultimo recoveco mientras algunos de los tíos ayudaban a poner los manteles, sillas y lonas. los chicos mientras tanto colocaron la iluminación correcta para la noche y el sonido llenó las áreas aún sin los parientes presentes

la noche anterior habían separado a la pareja haciéndolas dormir en su habitación lo cual ya era incorrecto pensaba merlina ya que no se imaginaba volver a dormir sin enid por lo que le restaba de vida así que a pesar de la guardia plantada en ambas puertas la azabache aprovechó los pequeños pasadizos de su casa para llegar hasta la chimenea de su amada y reclamar la alfombra de pelo marrón y por supuestos a su lobita agradeciendo el gesto romántico y decidido de su azabache, al dia siguiente merlina dejó a enid con un beso en la frente y salió por el pasadizo hasta su recámara antes de que la abuela llegara a preparar a la novia.

así las primeras horas del día se fueron entre arreglos de vestuario y colocación de los últimos arreglos, todos sabían que hacer y qué tarea debía de terminar, nadie vio el reloj hasta que el gran timbre de la sala de recepción comenzó a sonar –dooong –

largo que pasaba por ahí con la charola del almuerzo fue a abrir – buenas tardes disculpe, esta es la mansión addams – pregunto una morenita que llevaba unas maletas de color café, el auto taxi que la había llevado se fue como alma que lleva el diablo viendo sospechosamente al enorme personaje que había abierto la puerta

–graaaaaaa– dijo largo

– teresa – preguntó la lobita llamó su atención saliendo de la sala de maquillaje

–¿enid? oh diablos mirate estas preciosa –

–solo llevo maquillaje y una bata puesta.... pasa, pasa debes de colocarte el vestido, largo te conducirá a tu habitación, debo de ir con tisha – dijo muy apresurada buscando a su suegra que aun tenia el vestido de novia en reparación

–bueno, espero poder darte la cosa azul antes de que se den las campanadas, podrías decirle a merlina que he llegado –

–claro, primero debo de encontrarla al parecer mis suegros y ella se han ausentado, o al menos nadie el la casa los ha encontrado –

mientras tanto en el cementerio buscando en la tumba de los padres de homero se encontraba la familia addams sacando la cosa prestada de los cadáveres de los abuelos – hay miles de joyas dentro de la casa – dijo pericles pujando entre cada paleo – no se porque no eligieron alguna de ellas –

–sigue cavando pericles, el ejercicio es beneficioso a tu edad – homero se había quitado el saco y se había remangado la camisa solo para encontrar los féretros que iban a asaltar – aquí están –

–abrelos mon cher, no tenemos mucho tiempo – morticia miraba desde arriba sin intenciones de ensuciarse las manos de tierra

–estoy con pericles, ¿porque sacar los prendedores de los abuelos solo para un evento, debimos de haber elegido entre las joyas de la familia? – pregunto merlina con los brazos bien cruzados, ella tenía que estarse preparando no perdiendo el tiempo con los juegos de su familia