Las lunas de Nunca Mas

Capítulo 1 ¿Qué le pasa a Enid?

Hellowwwwws, bueno después de que mi hija y yo termináramos la serie, y que nos fusilaran con una avalancha de Merlina  empacada por todos lados donde viéramos, le causo comezón la idea de las parejas de la pequeña Adams  y me comenzó a invadir con un sin fin de cosas y preguntas, así que si, esta historia es por mi hija Sara

Tenia varias ideas ya manejadas en mi cabeza y saben como funciona este cacharro en cuanto una idea me llega me vienen miles mas saboteando mis días hasta que plasme la misma en un trinche papel y lo publique

ahora a lo que nos concierne

fantasías animadas de ayer y hoy presentan:

Con una producción  de Sharon flowers  animated y Me estoy volviendo loca Adams 

A Merlina Adams y Enid Sinclair en:

Las lunas de nunca mas

ya habían pasado dos años desde que merlina con ayuda de enid había vencido al hyde en las afueras del bosque de nunca mas, después de varias aventuras añadidas a su lista de cosas inverosímiles pero extrañamente satisfactorias y de su afirmada invencible amistad con la licántropo arcoíris, ahora deberían de enfrentarse a la mas terrible de sus aventuras una que la madre naturaleza tendría ventaja sobre el cuerpo de su amiga.

enid solo se había enlobado dos veces en su joven vida: una para defender a su amiga y otra en su cumpleaños número 17, hace unos meses la pequeña lobo comenzó a comportarse extraño, tan extraño que hasta merlina se le hacía raro, su primer síntoma fue cambiar de ropa los días que descansaban, su habitual mezcla de colores fue cambiada una menos colorida y por decirlo menos.... más merlina, unos días después dejó de tejer y mirar la luna, de comer hasta incluso de usar su celular, a veces después de clases se encerraba en su habitación y se tapaba con varias cobijas que hacían un gran bulto similar a una madeja de hilo de miles de colores, merlina podía hacer todas sus actividades y no vería salir a su amiga del fuerte de cobijas.

merlina estuvo tentada a sacarla ella misma de su miseria maligna pero se le hizo una total falta de respeto evadir su espacio, merlina se preguntó si alguna vez saldría de su guarida al menos para bañarse, a veces en lugar de escribir se quedaba sobre su cama mirando hasta el más leve de los movimiento tratando de descifrar qué era lo que le ocurría a su compañera allí dentro, dedos también estuvo pendiente de eso llevando infinidad de dulces con sabor a carne muy seguramente robados por la mano mascota.

a las semanas todo parecía pasar alrededor de Enid y su depresión, las comidas que merlina conseguía eran engullidas en su ausencia y la ropa desgarrada se acumulaba en una esquina de su habitación, la adolescente licántropo jamás fue desordenada y mucho menos callada y merlina estaba segura de que en cualquier parte donde se parará siempre era un dolor a las pupilas de los extraños lo que ahora también maravillosamente le hacía falta.

Al cabo de los días no pudo más y fue con la persona que ella creía era el causante de su dolencia

– fuuuum – una flecha pasó a centímetros de la muñeca de ajax quien trataba de tomar las flechas erradas y entrenaba en el bosque junto con xavier, en unos días más estarian acudiendo a las olimpiadas anuales en la escuela de Nostra Démence en el país vecino de Canadá representando la escuadra de tiro con arco de Nunca más, ambos chicos voltearon a ver quien era el dueño de aquel artilugio macabro hecho de un hueso de algún animal – buenos días a ti tambien Adams –

–¿que le hiciste?– merlina sabía que la gorgona y su amiga enid habian tenido sus queveres lo que le parecía despreciable y asqueroso, la relación de ambos se había acabado hacía unos meses según lo que se había enterado por la misma enid quien lloraba y aullaba algunas noches siendo acompañada por el violonchelo de su amiga, fue un momento muy íntimo y bien apreciado por Adams, los aullidos lastimeros de enid sirvieron para que merlina terminara una de sus obras maestras del dolor – no voy a repetirlo–