EN NOMBRE DEL AMOR // JENLISA // (JENNIE+LISA BLACKPINK)

CAPÍTULO 19: ¿ALGUNA VEZ TE HAS ENAMORADO?

Con una camiseta que toma prestada, el cabello recogido en un moño muy pequeño, chocolate caliente y la pelinegra recostada en sus piernas, Jennie pasa sus dedos por el cuero cabelludo de Lisa haciendo un ligero masaje que la adormece de a poco.

—Siempre te oí tocar desde el último piso de Creación —recuerda—, aunque no supe que eras tú hasta este día.

—¿Y quién pensaste que era?

—Kai.

Lisa ríe.

—No te culpo, yo le ayudo con las clases a Kai, y digamos que algo de mi metodología se le ha pegado. Tenemos un estilo parecido, aunque hay una chica, se llama Dahyun y toca increíble.

—No creo que tan increíble como tú —sonríe embobada—. La manera en que tú tocas, es... no lo sé, siempre pensé que era Kai, pero algo me faltaba; cada que iba a Armonía daba con el salón equivocado, nunca me imaginé que siempre fue el de al lado.

—Eres un poco desorientada.

—Siempre estaba cerrado —le da un zape—. Ahora entiendo por qué te veía bajar del edificio siempre que yo subía.

—Las cosas de la vida.

—¿Por qué no dejas que nadie te oiga tocar?

—Todo Armonía me ha escuchado tocar, eres tú la que no.

—Vale, ¿y por qué yo no sabía que eres tú esa "prodigio"?

—Basta de eso —regaña—. No lo sabías porque no le permito a nadie dirigirse a mí de esa manera... de ninguna.

—¿Eres tan intimidante que la gente simplemente hace caso a lo que les dices? —ríe—, ¿o es por ser la hija del director?

—Ambas. Cambiemos de tema.

—Vale, ¿puedo usar mi segunda pregunta?

—Al día de hoy, si nos ponemos a contar, ya me has hecho más de solo las dos que te permití.

—Por favor —ruega con un puchero—. En mi defensa, has sido tú quien me ha contado todas esas cosas a voluntad.

—Sí, gracias a tus manipulaciones involuntarias.

—Acabas de darme la razón, han sido involuntarias, así que técnicamente aún me sigue quedando una pregunta.

—Hazla antes de que me arrepienta.

Jennie observa con anhelo su rostro, es tan guapa, todavía no decide cuál de sus facciones le encanta más: si sus ojos, su cabello o sus labios tan finos.

Lisa espera con los ojos cerrados disfrutando de las caricias de la artista en un suspiro y un silencio cómodo hasta que...

—¿Alguna vez te has enamorado?

—Esa pregunta no está permitida.

Intenta levantarse, pero su vecina se lo impide colocándose sobre ella.

—Bájate, estás ejerciendo presión sobre mí que tampoco está permitida.

—Nada para ti está permitido, exijo consideración para conmigo.

—Me saliste abogada.

—Respóndeme que quiero saber.

—Quieres que te dé una respuesta que muy en el fondo ya conoces.