Mi pueblo caótico con personajes caóticos trae de nuevo una historia conmovedora y asombrosa para su deleite. Esta vez, una historia que nos enseña que los actos que se hacen en nombre del amor son los más puros y nobles. Que enriquecen el alma y el...
Si Lisa para en su casa, Jennie no se da cuenta de ello. Luego de su incidente en el hospital, tomó un taxi rumbo a su casa y se deshizo en lágrimas; más cuando Jisoo la llamó a contarle el infortunado deceso de Giselle.
Una inmensa tristeza y rabia se combinan dentro de su ser al pensar en Lisa, y en cómo se estará sintiendo después de enterarse de la muerte de su mamá. Jisoo le cuenta que se puso fatal, y que ha tenido que ser ella quien arregle todos los preparativos del funeral porque Lisa no puede ni con ella misma.
Por los próximos días se está quedando con ella para no dejarla sola en casa, lo que explica el silencio en la habitación de al lado.
El señor y la señora Kim, e incluso Taehyung, acompañan a Jennie todo el tiempo en su dolor. La pérdida no es solo de Lisa, o por ella, también la ha afectado bastante, puesto que le tomó un inmenso cariño mientras cuidó de ella; le duele por su vecina, quien tan ilusionada estaba de sacar a su mamá del hospital y vivir juntas. ¿Qué será ahora de ella sin la persona más importante en su vida?; ¿qué sería incluso de nosotros sin la persona que más amamos en el mundo, si alguna vez la perdemos de manera inesperada?
Cuando Jennie perdió a su abuela hacía unos años fue difícil para ella, pero no tanto como lo fue para su padre. Alejandro se la pasó meses alejado de su empresa, comía muy poco, no hablaba mucho y se la pasaba llorando; hasta tuvo que ir a terapia psicológica. Jennie imagina que así está Lisa, o peor. Tener en tus manos la ilusión de que tu mamá, después de estar años en coma, despertó y se estaba poniendo bien para luego morir; que ese sueño se te vaya de las manos cuando estabas a punto de sostenerlo, debía ser lo más difícil y doloroso del mundo. Algo que no le desea a nadie.
¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.
¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.
ⰧⰧⰧⰧⰧⰧⰧⰧⰧⰧⰧⰧⰧⰧⰧⰧⰧ
La mañana está demasiado iluminada y bonita ese día como para ser uno de los más tristes que Jennie ha presenciado. La iglesia y el prado donde yacería el cuerpo de Giselle Manobal, es tan sublime y pacífico que da miedo.
Las únicas palabras que pronuncia la pianista hacia las chicas ese día, son: "No las quiero cerca". Obvio no la obedecen, se mantienen a una distancia prudente por si Lisa se pone muy mal.
Sin separarse un solo segundo del ataúd de su mamá, Lisa se pregunta por qué la vida es tan injusta con ella, ¿por qué tuvo que arrebatarle a Irene?; ¿por qué tuvo que arrebatarle a su mamá?; ¿por qué le tocó un hombre maltratador y borracho como papá?; ¿por qué le arrebató a Jennie...? ¿A quién engaña? Ella fue la que se encargó de echarla a un lado, y a pesar de eso allí está acompañándola junto con Jisoo, y hasta Nayeon, a quienes también hizo daño alguna vez.
No las merece a ninguna de las tres, tal vez es por eso que el universo la está castigando, por todas las personas a las que alguna vez lastimó y se burló de su dolor; todo ese sufrimiento lo tiene bien merecido, ¿pero por qué su mamá y no ella misma?
Lisa ni siquiera presta atención a las palabras del sacerdote en honor a su mamá; ni alientos tiene para ir a reprocharle a Abraham Manobal su presencia en el templo, pero ganas le sobran para echar a patadas a los que intentan apartarla del cuerpo de Giselle. ¿Quiénes son esas personas, de todas formas? Un montón de extraños, porque su mamá no tenía amigos.
Algunos de los vecinos, y hasta Chaewon están acompañándola, pero muy pocos que a ella le importen, seguro están ahí solo por chisme, para reírse de su dolor... ¿Dónde estuvieron esas personas cuando su mamá se puso mal?; ¿dónde estuvieron en estos cinco años?
Lisa viste de blanco ese día porque su mamá es luz, no oscuridad; no representa luto, solo un hasta pronto muy doloroso. Siempre se vio diciéndole que si es que un día decidía irse, tendría su permiso, que si es que estaba sufriendo se marchara, pero que no olvidara decirle adiós, y así fue como ocurrieron las cosas... pero eran solo palabras; palabras que no sabía que llegarían a doler tanto.
Rosas blancas adornan a Giselle dentro de su lecho a juego con su vestido. Luce preciosa, agradece en silencio a su mejor amiga por conocer los gustos de su mamá, y de ella misma. No puede verse más perfecta.
—Espérame en el paraíso donde las rosas blancas crecen en abundancia —toma su mano—. Espérame que yo iré a buscarte y tocaré el piano para ti todas las mañanas... Seremos una familia.
—Lisa... la ceremonia ha terminado.
Jisoo ve en los ojos de su hermana la muerte en vida. Ahora entiende por fin lo que Nayeon tanto dice de los cuerpos vacíos de alma, Lisa es la viva representación de ello en ese momento, siente miedo.
La pianista sigue sin apartarse del lado de su mamá, al punto en que es difícil, casi imposible separarla del ataúd cuando se va escondiendo bajo tierra. La pelinegra grita, llora, está fuera de sí, pero ahí está Jisoo soportando los golpes, los empujones, los insultos; ahí están Jennie y Nayeon conteniéndola en un abrazo grupal que por un momento tranquiliza a la chica.
Llora de pie observando el montón de tierra que ahora cubre el cuerpo de su madre, como inerte, ida. Las chicas vuelven a apartarse con prudencia dándole su espacio, pero igual alerta a lo que ella pueda necesitar incluso si son rechazadas a punta de insultos y empujones; están pendientes de cualquier incidente con el padre de Lisa, y no se equivocan, Nayeon les hace señas a las otras dos para que observen lo que está por venir.
