Diamond Kingdom

Capitulo XXV

Vencer a los patéticos escoceses era una tarea sencilla, las Diamond habían iniciado guerras mucho más sangrientas que estas y por supuesto que habían ganado. Pero eso no impedía ser sanguinario, ni tener ningún tipo de compasión con traidores tan debiles.

Derrumbaron sencillamente los fuertes de piedra que protegían la más grande construcción de la villa, las catapultas hacían añicos y polvo al castillo, fue una enorme satisfacción para ambas reinas observar cada pared derribada por su arma. Por supuesto que hubo intentos de respuesta militar de los escoceses, pero no lograron ni llegar a más de una hectárea del campo de batalla. Los soldados de Yellow fueron más fuertes y despiadados, implacables hasta acabar con la vida de estos intentos de saldados. Fue tan sencillo vencerlos que no tuvieron que usar ni la mitad de su ejército compartido.

Yellow y Blue se mantuvieron  a salvó en su área de campamento militar. Blue había insistido en que Yellow se quedará con ella, una excusa para protegerla, no quería perder a su amada, su corazón no podría soportar otra perdida, así que Yellow se quedó, solo porque quería complacer a su querida Blue. Esperaron hasta el final de la guerra, de escuchar gritos de la inevitable victoria por parte de sus soldados.

—— Sus majestades.—— La voz áspera y cansada de Jasper interrumpe el silencio en la carpa. Las Diamond que se habían mantenido juntas desde el inicio de todo, pusieron su atención en ella, observando lo agotada que se veía empuñando su espada y salpicada de sangre por toda su armadura brillante. ——Hemos tomado Escocia, se han rendido.

Blue saco un pequeño suspiro por la nariz y descansa su frente cerca de la barbilla de Yellow en señal de alivio. La rubia por su parte deja a su contraparte hundirse en sus brazos, sabía que este pequeño acto era una forma de demostrar cuan tranquila se siente ahora y el gran peso que se quita de encima, por fin después de tantos meses de sufrir maltratos, golpes, amenazas e intento de homicidio, Blue podía suspirar de alivio. Ya no más Heter, ya no más alianzas forjadas en matrimonio y por supuesto, no más usurpadores alrededor de ellos.

—— Excelente trabajo Jasper. Reune a los soldados prisioneros en los campos.—— Elogio Yellow aún sin atreverse apartarse de Blue. Jasper asintió a la orden. —— Y lleva a los asquerosos de los Heter a la sala de audiencia, yo me encargaré de ellos.

——Como ordene mi diamante.

Ambas Diamond llegaron al gran castillo escoltadas por el resto de su ejército, sus hombres habían tomado toda la villa y sin esperar a órdenes habían puesto los dos grandes estandartes del diamante azul y del diamante amarillo. Los pocos prisioneros que quedan con vida estaban de rodillas, sus caras asemejaban vergüenza e impotencia, que incluso no podían levantar la mirada de lo tan patéticos que se sentían. Pasaron entre cadáveres de hombres y mujeres que se defendieron del gran ejército inglés, fueron muertes innecesarias, pensó Blue, todo esto se hubiera evitado si tan solo su Lord se rindiera cuando se lo dijieron, era una lastima.

Lo que quedaba de la sala del trono escocés era iluminado con antorchas crepitantes en las paredes de piedra pulida, una docena de soldados resguardaban las esquinas del gran salón y justo en miedo, de rodillas al suelo, estaban la familia Heter, Lords de Escocia. Blue fue la primera en poner un pie al lugar seguidamente Yellow estaba tras ella, para luego detenerse y observar a su alrededor ignorando a la familia retenida.

——El diseño es anticuado para mí gusto.—— la voz de Yellow la saco de su escrutinio a Blue, aún así ella asintió dándole la razón a su compañera. —— No te preocupes querida, construiremos un mejor castillo para ti.

——Realmente es necesario.—— termino por aceptar Blue mirando con una sonrisa a su amada rubia. —— Este lugar es deplorable.

Un quejido de rabia se escucha en medio del lugar logrando tomar su atención de ambas sobre el chico que gruñia contra su mordaza y retorcía de sus ataduras de manos. Blue y Yellow se dieron una última mirada de complicidad y por fin se tomaron la necesidad de hablar con ellos. Con una mirada de la general a su soldado tras de los custodios, desató la mordaza del Lord anciano. No fue sorpresa que no tenía nada por decir más solo mirar con odio e impotencia a sus antiguos aliados. Yellow por su parte solo se limito a sonreír y esperar unos segundos con la esperanza de que dijera algo, lo que sea, pero no huba nada.