21. Rompecabezas.

76 5 13
                                    

21

9 años atrás.

Alice.

¿Te gusta?

Demasiado aire frío entra en mis pulmones. Está sonriendo para mi...Odiaba que Gaston sonriera. Eso solo significaba problemas para mi.

Gaston...¿Qué es lo que hiciste?

Es un lindo auto, ¿no te gusta?

Claro que es un buen auto, es un gran auto. Es justamente el nuevo modelo. Pero él no me lo estaría mostrando si no quisiera probar algo.

Siento el vómito venir, por favor, por favor que no sea lo que pienso. El universo no puede ser así de cruel conmigo.

Tenía que tranquilizarme, pero no podía. Pronto las lágrimas eternas de mi corazón y alma también salían de mis ojos. Me doy cuenta de una vez por todas que por mucho que lo intente, por mucho que mis piernas duelan por correr Gaston siempre correrá más rápido.

Sé que Hunter aún tiene catorce, pero no está mal que tenga un auto para cuando cumpla los dieciséis.

Y ahí está. Aquella mirada que no deja de que hablar. Aquella mirada que no importa cuántas veces la reciba, siempre me hace temblar tanto como aquella primera vez en que me di cuenta en lo que me metía. Ojalá hubiera visto las señales, ojalá hubiera sido una mejor madre. Ojalá no hubiera cometido tantos errores. Ojalá no me haya dejado llevar por el miedo. Ojalá buscara mejores escondites, pero comienzo a pensar que tal cosa no existe.

Me empuja el hombro y camina hacia la casa, el golpe me desestabiliza y no me importan los vecinos, no me importa que alguien me vea. Mis rodillas tocan el piso raspandose y lloro.

Lloro por horas. Días. Incluso años. Lloro hasta que siento que me voy a morir y lo deseo tanto. Quiero irme. Quiero irme. Quiero irme con mi mamá desconocida, quiero irme a cualquier lugar donde los ojos de Gaston no lleguen.

Porque él tenía el poder. Nunca podría llevarme a mis hijos y protegerlos porque soy débil. No importaba cuánto dinero juntara y qué tan bueno sea el escondite, él siempre encontraría una forma. Usaría el dinero para algo enorme como si fuera algo bueno, burlándose en mi cara.

Es un monstruo.

Mi esposo es un monstruo.

PAIGE, ACTUALIDAD.

El pasto de las colinas sabe espantoso. Terriblemente espantoso.

Mis brazos están a nada de ganarme y ahorcar a mi única hermana por burlarse de mi condición, yo les dije que esto no era buena idea.

Rienda Suelta #1 [Solo Saturno]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora