LO SIENTO

LO SIENTO, PERO TE AMO

SEULGI

- ¿Cuándo? - pregunta curiosa.

Además de ello, veo aquella expresión de felicidad, ella podría recordar y tener memoria de mi rostro, pero no soy uno de sus recuerdos felices.

- Basta de jugar a ello. Espera aquí.

Me dirijo a la habitación en donde se encuentra su maleta y decido tomar una de mis grabadoras pequeñas, no podía dejarle una carta por su condición y yo realmente debía de dar mis sentimientos porque no me dejará explicarme.

- Es hora de llevarte de regreso.

Tomo su mano y emprendemos caminata hasta el paradero y luego en bus sin soltarnos, no queríamos aquello, Irene porque soy su novia y prefiere estar a mi lado, pero yo no quiero soltarla porque es liberar a un pequeño pájaro que nunca volverá a su hogar.

IRENE

No sabía que era lo que estaba pasando, Kang estaba en silencio, lo cual no es nada común en ella, eso me preocupa mucho.

Quiero preguntar, pero prefiero que me lo diga porque la confianza es primordial en nuestra relación.

Por cierto! Me dijo que sí he visto su rostro y eso me pone muy feliz porque quiero recordarla en mi mente y saber con quien estoy.

- Estamos en la esquina de siempre. - avisa.

Era el punto de encuentro y despedida aquella esquina porque no quería ver a mi madre y yo tampoco quería que esté haciendo preguntas estúpidas.

Me abraza con fuerza y escucho su llanto, eso me pone tensa, no sé qué es lo que está pasando.

- Kang... ¿Qué pasa?

- Lo siento...

- ¿Qué está sucediendo? - me desespero, no sé qué se muestra a muestro alrededor.

- Ya no puedo seguir mintiéndote, no lo soporto. - se aleja del abrazo.

¿De qué mentira habla? Esa es mi pregunta, nunca he sentido ni oído su voz temblar.

- Sé que lo que te voy a decir me va a traer consecuencias, pero voy a respetar tu decisión, sea cual sea.

¿De qué consecuencias habla? ¿Qué mentira tan grande ha sido para que llore?

- Te amo y te amaré por siempre, eso nunca lo dudes.

Yo también te amo, pero no me salen las palabras, estoy en shock ahora por la preocupación.

- Desde que llegaste a mi vida mis días han tenido color, me haz hecho sonreír de manera honesta, me diste un motivo por el cual vivir.

Cuando llegó a mi vida sabía que no podía alejarla de mí a pesar de que lo hacía por su bien, pero me ha prometido hacerme feliz y lo hace, no sé cuáles es el problema.

- No me gustaría alejarme de ti ni perderte, pero el peso que traigo encima es mucho y si deseo hacerte feliz debo ser una mejor persona, lo cual implica tener como virtud el ser honesta.