Capítulo 73 ( Regla de la mafia).

485 49 0
                                    

Habían pasado dos días desde que los machos alfas de la mafia estaban al rescate de Alicia. Gracias a Dios pudieron encontrarla y sacarla de ahí automáticamente.

Otro punto a tocar era que Stefan estaba retenido por problemas legales. Aquellos que claramente esos hombre habían hecho saber al mundo, lo cuál atraso su regreso hasta aquí. Por lo que me había comentado Serhat el no podía moverse fuera de Bélgica por lo menos en las próximas veinticuatro horas ya que se encontraba bajo investigación.

-- Pásame mi bolso y la pañalera de Eda....--Valeria, me lo entrega para luego acompañarme a la puerta.

--¿Te guardo comida?

--No, hoy pasaré el día trabajando, quizás pida algo por internet. No te preocupes, es más si desea pides algo y me pasas la cuenta.

Damián había hablado con su hermano para meter a Valeria a trabajar en la empresa, el cuál acepto dichoso por la confianza que nos tenía a Emma y a mí.

Esta vez decido tomar un taxi y no utilizar mi coche ya que no tenía nada para sostener al pequeño mientras conducía, la vez pasada utilice las cosas de Byron, pero no quiero abusar de aquello.

Al llegar a trabajar todos ansiosos por verla y cargarla me la quitan, se que se habían obsesionado con la belleza de la pequeña y era de entenderse, así que solo me limito a hacer lo mío, no sin antes verificar que ella estuviera en la misma habitación conmigo, era mucho más fácil para mí verla y saber que se encontraba bien.

Y ahora que lo pienso bien. Yo sería de esas madres sobre protectoras.

Sonrío al ver cómo Santiago toma a la bebé en sus brazos para darle su biberón, me sorprendió mucho verlo, lo hacía ver de lo muy fácil y común. Jamás creí que fuera tan ágil, a los hombres siempre se les hacía difícil hacer cualquier cosa mínima.

-- Tengo dos hermana, por ley tuve que aprender.

--Imaginate nosotras...-- Fernanda se sienta a unos pocos metros de donde nos encontrábamos.--..,que tuvimos que cuidar, hermanos, primos y sobrinos.

--Mas yo....--Me quejo--.Pero no me arrepiento, es muy bonito tener un bebé en casa.

--Hasta que lloran...--Santiago menciona mientras ve a la pequeña que se encontraba en sus brazos..-- odio cuando lloran, en ese momento se les va el encanto.

-- Todos odiamos eso...-- alego feliz.

--Señorita Ross...-- una de las secretarias de Santiago nos interrumpe al entrar en la habitación --...,el mismo hombre de ayer desea hablar con usted.

-- Ya vuelvo..

Salgo de aquella sala directamente hacía donde aquella mujer le había dicho a Serhat que la esperara.

--Señorita...--saluda, al verme.-- He venido a buscarla, el señor Dominick me ha informado que la lleve a usted y a la bebé a un lugar seguro.

--¿Ha sucedido algo que no sepa.?.

-- No puedo decir que está sucediendo, pero me han mandado a mantener a salvo a todas ustedes, si no es molestia puede venir conmigo.

--¿ A donde vamos?

-- Dominick ha comprado algo, en el coche ya se encuentra la señora Okana y en otro auto está la señorita Reachel. De hecho ella ya va en camino a esa casa.

-- Buscaré a la bebé.

Rápidamente subo a buscar a la bebé, mintiéndole que mi amiga había llegado de viaje y quería verla antes de volverse a ir .

--Reachel corre peligro ahora..--Okana habla.-- Dimitri se ha apoderado de cuatro mafias.-- esta alega a través de su teléfono con cierta urgencia..--. Si le llega a suceder algo Francisco mueres y no lo haré yo. Sabes quién lo hará y como sufrirás.

Quédate.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora