¿Dónde estoy?.
Abro los ojos lentamente presenciando la luz proveniente de la ventana.
¿Cómo llegue a este lugar?.
Me levanto de cama intentando de alguna manera calmar las náuseas matutinas que llevaba encima. Odio despertar así.
Mierda.
Levanto la mirada del suelo buscando la puerta que me llevaría al baño, al localizarla decido entrar en ella para hacer mis necesidades y cepillar mis dientes con el cepillo de repuesto que había ahí.
Sabía dónde estaba a pesar de no recordar como había llegado.
Tanta elegancia y comodidad solo se debe a una sola persona. Decidida a buscarlo salgo de la habitación encontrandome con una larga escalera.
-- Al fin despiertas...-- su voz resuena al pisar el último escalón.
-- ¿Que sucedió?¿Cómo llegue a aquí?.-- me giro hacia el para poder mirarlo.
Llevaba apenas una toalla en su cintura.
-- Eso no importa ahora.
-- Tienes razón..-- Le sonrío al verlo cruzar sus brazos.
Ahora que lo pienso con exactitud no recuerdo la última vez que lo había visto mojado.
-- ¿Seguirás mirándome así o me preguntarás algo?.
-- Por ahora solo quiero comer algo..-- este comienza a sonreír con malicia mientras intenta quitar el paño que lo cubría.-- ...., y eso no te incluye..-- lo corto para girarme.
Sí quería tener sexo, pero no en estos momentos. Apenas acaba de despertar y aún las náuseas estaban presentes.
-- la cocina está a la derecha, cualquier cosa que necesites no dudes en llamarme, estaré en mi habitación cambiándome.
-- está bien, no te preocupes. No me pasará nada allá dentro.
Lo veo alejarse, mientras intento no seguir centrada en su hermoso y tonificado cuerpo.
¡Cómo me puede gustar tanto un cuerpo!.
No comprendo.
Sigo mi camino hacia dicho lugar para comenzar a hacer el desayuno. Necesitaba proteínas en mi cuerpo y una buena taza de café, mi cabeza estaba hecha un lío y se que aquello lo calmaría.
Pasan tan solo unos minutos cuando lo veo entrar en la cocina, llevaba un traje completamente negro que lo hacía lucir muy intimidante y a la misma vez fresco y tranquilo.
-- Iré a una reunión, puedes quedarte aquí.
-- Está bien.
-- ¿Necesitas algo?.
-- No por ahora. ¿Pero, deseas desayunar?.
-- Lo hice antes que despertarás. Por ahora solo come tú.
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Me encontraba más feliz de lo habitual y el motivo realmente era la revelación de sexo de Dalila. El día que todo el mundo esperaba con ansias había llegado.
-- Todo ha quedado divino...-- Dania entra a la cocina haciendo que me sobresaltara ante su presencia.
-- muchas gracias.
-- ¡¡Keityn!!¡¡Tía Dania!!.-- uno de los sobrinos de dicha mujer llega a nosotros agitado cortando nuestra conversación.-- ¡¡Dalila ha pedido que las busque urgente!!
Nerviosas ante repentina situación decidimos correr hacia donde se encuentraba. Estaba totalmente roja y no dejaba de tronarse los dedos de la mano.
Estaba nerviosa.
-- Lo va a matar mamá..-- Dalila suelta al vernos llegar hacia ella.--.. el imbécil que me ha dejado embarazada está aquí y..-- no termine de escuchar la oración, así que decidida a que no arruinara la fiesta decido buscarlo.
Lo menos que necesitaba en estos momentos sería otro muerto, suficiente teníamos.
-- Alejate..-- se gira al sentir mi presencia.--..., no le haré nada, no sería capaz de hacer pasar un mal momento a mi hermana, así que por favor déjame conversar con él.
-- ¿Estás seguro?.
--¿ Dudas de mi palabra?.-- contrataca.
-- No.
-- Entonces vete y sigue con la fiesta. No hay nada de que preocuparse.
-- Te esperaré detrás de las paredes rosas de la entrada.
-- Si así te sientes cómoda, espérame.
Si el me confirmaba que no haría nada debía creerle, pero aún así necesitaba estar precavida. Lo más probable es que aquel hombre intente tocarle los huevos a Demian provocando de alguna manera que el arruinara lo sucedido.
Anteriormente Dalila pudo contarme lo mal que era ese hombre y todo lo que logro manipularla.
" Nunca te ame Dalila, solo quería estar vinculada a tú familia".
No me imagino lo mal que se sintió darse cuenta que alguien solo estaba contigo por la fama de tú familia y todo aquello que podías ofrecerle.
-- Vamos..-- Demián llega a mi lado.--.. él solo vino a entregarle algo a mi hermana, pero ví necesario que no la viera. Por lo menos no hoy.
-- ¿Debo preocuparme por algo?.
-- No, ya he solucionado todo.
Ambos llegamos a la reunión sorprendiendo a los invitados, no nos habíamos dado cuenta que estábamos tomados de la mano.
-- ¡¡ES HORA!!-- Intento de alguna manera que olviden la escena halando a Demián del brazo.
Debía ingeniarmela.
La familia Petrov se coloca detrás del pastel y a los pocos segundos los invitados a su alrededor.
-- Todos saben que es hombre..-- David el íntimo amigo de Dalila y también de Demian me entrega una copa de champagne.
-- Al parecer todos están seguros de que la industria Petrov crecerá el triple con este nuevo integrante.
-- Sea niño o nena lo hará. Es el primer nieto de la famila.
Dalila toma entre sus manos el niño que se encontraba de decoración en el pastel. Su mirada conecta con la mía en unos micro segundos para luego sonreírme.
De el comienza a salir un papel de color azul haciendo que todos rieran y aplaudieran..., cuando creí que todos estaban seguros de aquello, el papel se invierte, mostrando un color rosa.
-- Espero no haberme equivocado..-- David me muestra su corbata rosa.--..ayer soñé con Dalila y una pequeña.
Dalila toma en sus manos la última pieza para comenzar a buscar lo que le había escrito. Al encontar la caja decide abrirla.
-- ¡¡Nooo!! -- está grita -- ¡¡Porque le haces esto!!.-- saca otro papel para caminar hacia donde me encuentro, instantáneamente la paro de golpe, provocando que deje de caminar.
-- ¡¡FELICIDADES!!..-- Suelto al ver cómo el cielo comienza a llenarse de color rosa.
-- No puede ser..-- está comienza a llorar mientras sus hermanos llegan a ella a felicitarla. Se lo mucho que deseaban una niña y lo feliz que se encontrarían al saber que su deseo se había hecho realidad.
Decido alejarme para pedir a los fotógrafos que capturaran todo lo que pudieran. Este momento debía ser recordado de por vida, al fin después de años había nacido una nena en la familia más poderosa de toda Rusia.
-- Gracias por tan maravillosa fiesta..-- Dalila me abraza al verme.-- no me equivoqué al elegirte como la tía y madrina de mi bebé. Eres una super mujer, gracias por estar en esta etapa tan bella y difícil para mí.
-- No hay nada que agradecer. Lo hago de corazón.
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Quédate.
Novela JuvenilAcostarme con mi jefe fue la peor decisión que pude haber tomado,pero también muy buena, el sexo con el se sentia bien,incluso podría decir que perfecto.... Solo una persona fue capaz de hacerme sentir diferente y crei que había sido mi unico ex nov...