Capitulo 3(Nervios )

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No podía creer lo que estaba sucediendo. Llevaba más de media hora esperando en aquella sala de emergencia que me dieran alguna información sobre el estado de salud de Dalila, no estaba de más decir que estaba nerviosa y muy preocupada por la vida de ella y del bebé, porque era consciente de la gravedad del asunto o mejor dicho la discusión que provocó tal eventualidad.

— Familiares de Dalila Petrova.— un hombre aparece en mi campo de visión dejandome totalmente atónita.

Su cabello se encontraba peinado hacia atrás dándole un toque especial o mejor dicho sensual, mirada oscura como la noche y unos hermosos labios de color rosa.

Vamos Keityn, deja de fijarte en los doctores. Estamos en un momento crítico.

— Aquí..— me levanto de aquella silla para acercarme a él. No deseaba que lo dijera en voz alta. —. Soy una íntima amiga..— miento.—. ¿Cómo se encuentra ella y el bebé?.

— Están estables. No hay nada de que preocuparse. Ya puedes ir a verla.— me sonríe.— . Sígueme.

Aún deleitada por su belleza decido seguirlo e intentar instalar una mínima conversación, pero todo intento fue fallido ya que la habitación estaba a tan solo unos diez pasos.

— Keityn..— La voz de Dalila llega a mis oídos sacándome de aquel trance en el que había entrado.

— ¿Estás bien?.¿Deseas algo?.

— Estoy bien, muchas gracias por quedarte..— suelta, con una sonrisa genuina. — Mi bebé,¿se encuentra bien?.

— De maravilla..— Está vez es el doctor el que se une a nuestra pequeña conversación —. Por cierto, tienes quince semanas de embarazo, lo cual es importante que sepas para que puedas llevar un buen cuidado.

—Me alegro que esté bien.— suspira. Era evidente que le había regresado el alma al cuerpo — Dios santo, que irresponsable he sido..— coloca ambas manos en su cara en señal de vergüenza. — ¿Puedes hacerme un favor, Keityn?.

— Claro. ¿Para que soy buena?.

— Puedes llamar a mi familia..— toma  su móvil para entregármelo. — . Dile que encuentro aquí, no estoy de animo para informarles.

No muy convencida tomo el celular para comenzar a llamar a su madre. Aquella conversación se sale de control ante mis manos, -- razón y motivo -- nadie sabía que estaba embarazada. Tuve que soportar algunas preguntas muy personales al punto que tuve que escuchar como su madre lloraba mientras pedía que trajeran el coche.

Dalila tenía la misma edad que yo y estaba asustada por lo que pasaría de ahora en adelante, ya que creía que iba a estar sola porque el padre de la criatura decidió no hacerse cargo y darle una patada en el culo. Otro punto a tocar es el trato que recibió hoy por parte de su hermano mayor, el cual solo se encargó de restregarle en la cara lo inmadura que era y lo sola que iba a estar.

En fin, de malas maneras se encargó de decirle cosas que realmente la lastimaron.

" Me encargaré de que no tengas ni un solo peso por irresponsable"

Muy inmaduro y poco inteligente viniendo de uno de los empresarios más codiciados de todo el mundo entero.

— Muchas gracias por estar aquí conmigo hoy.— me hala hacia a ella para abrazarme.

— No tienes nada que agradecer. Lo he hecho de corazón.

— Hija..— me alejo de ella al escuchar la voz de su madre. Todos estaban asustados, eso era evidente.

— Keityn..— me vuelve a llamar.— . Te presento a mí familia.

— Dania Petrova..— se presenta, la madre. — ..., no sabes cuánto..— corta.— un gusto conocerla. Muchas gracias por cuidar a mi princesa mientras no estábamos.

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