10. Feliz Navidad y feliz cumpleaños

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Mia estaba deambulando por el pasillo, pero esta vez no era en medio de la noche ni en dirección al comedor

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Mia estaba deambulando por el pasillo, pero esta vez no era en medio de la noche ni en dirección al comedor. De hecho, acababa de salir de esa área hace un momento para entregar los regalos de sus amigos en secreto, sabiendo que estarían demasiado ocupados con la cena. Acababa de colocar los regalos envueltos en papel marrón y cinta en las camas de John y Karl, al igual que los de los escuadrones de Levi y Hange. Actualmente se estaba dirigiendo a la habitación del capitán.

Empujó la puerta con lentitud para abrirla y vio su escritorio al final de la habitación enfrente de una gran ventana con arco. Caminó rápidamente a través de la oficina sin hacer ruido, manteniendo su mirada en el piso para preservar algo de privacidad. Primero colocó el pequeño paquete de calcetas en el escritorio, pero pausó mientras sostenía sobre la mesa la caja pequeña que contenía hojas de té. Estaba cuestionando esta elección, ¿Levi de verdad era consciente de que sabía sobre su cumpleaños? ¿Sería esto extraño?

Frunció el ceño, recordando los eventos de cuando estuvo en la ciudad hace unos días.

Hange y Mia entraron a la tienda de té y fueron alcanzadas por el rico aroma a dulce, hierbas y tés especiados. El dueño de la tienda, un caballero mayor que estaba sentado y leía su periódico en el frente, las saludó con una sonrisa.

―Háganme saber si necesitan ayuda con algo ―dijo él.

Hange dio un vistazo rápido y vio unas latas ya preparadas y sacó una de la estantería, leyendo la etiqueta de "Earl Grey".

―¡Me llevaré este! ―dijo ella y luego miró a Mia―. No sé mucho sobre té, pero el Earl grey parece una elección segura, ¿no?

―Si, lo es ―Mia dijo con una sonrisita, pensando en esa noche en la que tropezó con Levi por primera vez en el comedor. El dueño de la tienda lo empaquetó y le agradeció a Hange por la compra.

―¿Ves algo que te guste, Mia? ―ella preguntó.

―Hange, ¿crees... crees que sería apropiado conseguirle un regalo de cumpleaños? Justo estaba pensando en la vez salimos por el cumpleaños del comandante, pero no he escuchado nada sobre el del capitán. ¿Acaso no celebra su cumpleaños? —Hange le sonrió con suavidad.

—El enano no le dice a nadie sobre su cumpleaños, pero creo que de verdad apreciará el regalo.

—Hmm —dijo Mia, asintiendo pensativamente—. Puede que me quede aquí por un rato. Puedes irte primero si gustas, gracias por llevarme contigo hoy.

—¡No hay problema! ¡Nos vemos más tarde! —Hange abandonó la tienda y hubo silencio en la tienda otra vez, excepto por el rumor ocasional de papel del periódico.

Mia caminó lentamente por alrededor de la tienda, mirando todos los tipos de hojas de té, las diferentes mezclas y se tomó su tiempo para leer las descripciones de cada una. Recordó cuando su madre llegaba a casa y le entregaba una caja para que la abriera, revelando una lata de metal brillante. Entonces, ella abriría la tapa e inhalaría, tratando de adivinar qué mezcla de té era (o al menos los componentes principales). Se encontró con una sección de la tienda en donde vio varios contenedores de hojas de té y especies con un montón de envases vacíos a un lado.

Grey [Levi Ackerman] TraducciónDonde viven las historias. Descúbrelo ahora