MC | Sr. Stone, Recuperado por ti. (18+) María Del Mar, [EN PROCESO, PARTE II.]

Capitulo 30.

Capitulo 30

Abrí los ojos y me encontré en un amargo despertar. James estaba de pie, poniéndose los pantalones rápidamente. Mi corazón se hundió al darme cuenta de lo que eso significaba. Me levanté de la cama, quedándome sentada, incapaz de apartar la mirada de su figura.

-James.- susurré con la voz entrecortada por la emoción.

Él se giró hacia mí, su rostro reflejando una frialdad que me atravesó el alma.

-Debes irte, Tamara. Cassian te llevará a casa.- dijo con una voz dura y distante.

Me quedé en silencio, sintiendo un nudo en la garganta mientras luchaba por contener las lágrimas. Su respuesta me destrozó por completo.

-¿Quieres que me vaya?- pregunté, apenas logrando pronunciar las palabras.

-Sí, se acabó, Tamara. Esto será la última vez que interactuemos de esta manera. A partir de ahora, solo seremos colegas, nada más.- afirmó con frialdad, sin mostrar ni una pizca de remordimiento.

Mis manos temblaban mientras intentaba cubrir mi cuerpo desnudo con las sábanas. Sentí cómo mi mundo se desmoronaba a mi alrededor. Todas las promesas, las risas compartidas, los momentos íntimos, se desvanecieron en un instante. No podía creer que esto estuviera sucediendo.

-Pero pensé...- balbuceé, luchando por encontrar las palabras adecuadas.

-Pensaste mal.- me interrumpió con aspereza. -Se acabó, Tamara. Deja de buscarme, deja de ir a lugares por mi culpa. Intenta ser feliz con Jack, o con cualquier otra persona. Comprende que estoy casado con Catherine, y así será. No la amo, pero tendré que aprender a hacerlo.

Sus palabras resonaron en mi cabeza como un martillo golpeando mi corazón. Cada una de ellas era una cuchilla afilada cortando mis ilusiones. Observé impotente mientras tomaba su celular y llamaba a Cassian, confirmando mi partida. Mi mundo se desmoronaba ante mis ojos, sin posibilidad de retorno.

Me levanté de la cama, las sábanas envolviendo mi cuerpo vulnerable. Sin pensarlo, me acerqué a él con paso decidido y le di una bofetada tan fuerte como mi dolor.

-¡Que te jodan!-grité con furia desgarrada. -No vales la puta pena. No vale la pena que sienta lástima por ti, te mereces toda la mierda que te pasa.

Las lágrimas fluían incontrolablemente por mis mejillas mientras me alejaba de él hacia la sala. Tomé mi ropa del suelo, sintiendo un agudo dolor en el pecho. Me vestí con manos temblorosas, sin importarme si mi apariencia era impecable. Agarré mi celular y mi bolso, los únicos compañeros leales que me quedaban, y salí de esa habitación, de ese lugar que había sido testigo de nuestro amor destrozado.

Silenciosamente, subo a la camioneta sin pronunciar una palabra. Cassian me observa a través del espejo retrovisor y opta por guardar silencio. Con un gesto, enciende el motor y nos ponemos en marcha hacia mi apartamento. Aunque Jack sigue llamándome sin cesar, no tengo deseos de hablar con nadie en este momento. Me siento completamente destrozada y solo anhelo recostarme en mi cama, sumergirme en un sueño reparador que me devuelva la tranquilidad que tanto anhelo. Me he dado cuenta que James cada vez me rompe más en vez de reconstruir lo que destruyo alguna vez y no creo poder resistir esto más tiempo...

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