MC | Sr. Stone, Recuperado por ti. (18+) María Del Mar, [EN PROCESO, PARTE II.]

Capitulo 41.

Capitulo 41:
Tamara

La euforia de la apertura del restaurante se apoderaba de todos nosotros. James estaba radiante, su sueño había cobrado vida, y el amor y la dedicación que puso en cada detalle del lugar eran evidentes. La gente disfrutaba de la comida, del ambiente y de la compañía, y en medio de la algarabía, James tomó mi mano suavemente, haciéndome girar para mirarlo.

Los murmullos de la multitud se desvanecieron mientras James, con una sonrisa tierna, me miraba a los ojos. La luz tenue del restaurante realzaba sus facciones, y pude sentir el latido acelerado de mi corazón ante la expectación de lo que estaba por suceder.

-Tamara Greyson -anunció, y un susurro de asombro recorrió la sala-. Desde que llegaste a mi vida, todo cambió. Has llenado cada día con amor, esperanza y felicidad. No puedo imaginar mi vida sin ti. Y hoy, en este lugar que representa mis sueños y nuestros momentos, quiero hacerte una pregunta.

Mi respiración se entrecortó, y mis ojos se llenaron de sorpresa y emoción. James se arrodilló frente a mí, sacando una caja pequeña de su bolsillo. La sala quedó en un silencio expectante mientras mantenía su mirada fija en la mía.

-Tamara, ¿quieres casarte conmigo? -preguntó, abriendo la caja para revelar un hermoso anillo que centelleaba bajo las luces.

El latido de mi corazón resonó en mis oídos mientras las lágrimas asomaban en mis ojos. La multitud guardó silencio, esperando mi respuesta. Me sentí abrumada por la sorpresa y el amor que fluía en el aire. James sostenía el anillo con dedicación y un brillo especial en sus ojos.

-Sí, James, sí mil veces -susurré, apenas conteniendo la emoción que amenazaba con desbordarse. La sala estalló en aplausos y alegría, y James se levantó para deslizar el anillo en mi dedo anular.

La multitud vitoreaba mientras nos abrazábamos, y sentí la calidez de su amor envolverme. El restaurante vibraba con el júbilo de nuestra nueva etapa, y en ese momento, supe que estábamos destinados a escribir un futuro lleno de amor y sueños compartidos.

James se levanta, su abrazo es firme y reconfortante, mis manos acarician su espalda mientras las lágrimas resbalan por mis mejillas.

-Soy el hombre más feliz sobre la faz de esta tierras. Gracias por hacer de mis sueños realidad, Tamara. Te amo -susurra contra mi oreja.

-Tu haces realidad los míos mi James, te amo.

La madre de James corre hacia mí y me abraza con fuerza.

-Felicidades, cariño -dice al soltarme.

Veo a Dayker, mis abuelos y otros seres queridos acercándose emocionados. Mi abuela, con lágrimas de felicidad, me abraza tiernamente. Los hermanos de James lo levantan del suelo en un abrazo lleno de júbilo. Todos compartimos la alegría de estas noticias, que alguna vez alguien intentó destruir, pero el amor y la fe demostraron ser más fuertes que cualquier adversidad.

La emoción se desborda en risas, abrazos y lágrimas de alegría. Dayker me abraza con entusiasmo, los abuelos parecen rebosar de felicidad, y los amigos celebran este nuevo capítulo que se abre en nuestras vidas.

James y yo compartimos miradas llenas de amor y gratitud. A pesar de los desafíos y obstáculos del pasado, este momento de dicha nos recuerda que el amor verdadero y la fe inquebrantable pueden vencer cualquier adversidad.

En medio de la celebración, James toma mi mano y, con una sonrisa radiante, me lleva a un rincón más tranquilo.

-Gracias por hacerme el hombre más feliz del mundo -dice James, acariciando con ternura mi vientre, donde crece la promesa de nuestro amor.

-Gracias a ti por ser mi compañero en esta hermosa travesía.

El bullicio de la fiesta continúa como un telón de fondo para nuestras palabras llenas de amor y gratitud. Miramos juntos hacia el futuro, listos para enfrentar cualquier desafío con la fuerza de nuestra unión.

Y así, en medio de risas, afecto y sueños compartidos, marcamos el inicio de una nueva etapa en nuestras vidas.

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