MC | Sr. Stone, Recuperado por ti. (18+) María Del Mar, [EN PROCESO, PARTE II.]

Capitulo 04.

Capítulo 04:

Jack descorcha el vino con una sonrisa en su rostro. Camino hacia la cocina con una sonrisa y encuentro dos platos para la pizza, regresando a la sala para colocarlos en la mesa.

-Listo. -dice Jack, sonriendo, sirviendo el vino en las copas-. Es una elección increíble, no sabía que sabías tanto de vinos. -comenta con admiración.

-En realidad, no sé tanto, fue una vieja amiga que encontré y me lo recomendó -respondo, haciendo referencia a Verónica.

Jack sonríe, coloca la botella en la mesa y se acerca a mí. Me toma de la cintura, atrayéndome hacia su cuerpo.

-¿Puedes dejar de ser tan hermosa? -murmura mientras acaricia mis mechones rebeldes de cabello con una sonrisa.

-No dejaré de serlo. -respondo con una sonrisa sarcástica.

Jack niega con la cabeza, se acerca a mis labios y me besa con ternura. Cierro los ojos y me dejo llevar, mis manos encuentran su lugar en su cuello y lo acaricio con ternura. Mis labios se mueven al compás de los suyos, es nuestro segundo beso. Pero inmediatamente me separo de sus labios con una sonrisa.

-¿Cenamos? -pregunto con una sonrisa evitándolo.

-Por supuesto. -dice Jack, sentándose en el sofá.

A pesar de que Jack me atrae, siento que no estoy completamente preparada para tener intimidad con él, si es guapísimo, si me atrae pero lo veo más como un amigo, y fingir algo más no solo me estaría haciendo daño a mi si no a él. Quizás es porque los recuerdos de James todavía persisten en mi mente y corazón. Sé que James, a pesar de su matrimonio, sigue ocupando un espacio en mi interior que me impide avanzar del todo.

-Es la mejor pizza que he probado, por Dios. -exclamo mientras continúo mordiendo un pedazo, cerrando los ojos para saborear cada bocado.

-Es la mejor de la ciudad, con tres deliciosos quesos y una salsa específicamente hecha en Italia. -agrega Jack.

-¡Demonios, es impresionante! -añado emocionada. Cada bocado es una experiencia única y deliciosa.

Mientras cenamos, Jack y yo charlamos sobre diversos temas. Su compañía es agradable y divertida. A pesar de sentir una conexión especial con él, no puedo evitar que los recuerdos de James sigan afectándome. Intento concentrarme en el presente, en esta velada con Jack, pero una parte de mí todavía se siente vulnerable y cautelosa. Después de cenar, nos recostamos en el sofá, compartiendo risas y anécdotas. Jack me abraza suavemente y acaricia mi cabello mientras hablamos. Es reconfortante, pero también despierta una mezcla de emociones en mi interior haciéndome recordar a James, cuando solía ser el con quien hacía todo esto.

-Eres increíble, ¿lo sabías? -dice Jack con ternura.

Sonrío, agradeciendo sus palabras, pero también sintiéndome un poco abrumada. No quiero que esta relación con Jack se convierta en un escape para olvidar a James. Necesito tiempo para sanar y aprender a confiar plenamente de nuevo.

-Gracias, Jack. Tú también eres increíble. Pero hay cosas en mi pasado que todavía debo enfrentar y superar -le digo con sinceridad.

Él asiente comprensivo y me besa suavemente en la frente.

-Lo entiendo, no quiero apresurarte ni presionarte en nada. Solo quiero que sepas que estoy aquí para ti, cuando estés lista y no me pienso ir a ninguna parte. -me dice con cariño.

Sus palabras me reconfortan, y aunque sé que hay una conexión especial entre nosotros, aprecio su paciencia y respeto por mi proceso.

La noche avanza, y finalmente, Jack se despide y se dirige hacia su casa. Lo acompaño hasta la puerta y me recuesto sobre el marco con una sonrisa. Jack sale y me mira mientras mete las manos en los bolsillos de sus vaqueros.

-Gracias por esta noche, Jack. Realmente disfruté estar contigo -le digo sinceramente.

-Yo también lo disfruté, eres una persona especial para mí, Tamara. -responde él, y sus ojos reflejan un brillo de sinceridad.

Nos despedimos con una sonrisa y un afectuoso abrazo mientras Jack finalmente sale y yo cierro la puerta. Una sensación de paz invade mi ser mientras me recuesto en el sofá, enciendo un cigarro y dejo que el humo se disperse en el aire. Contemplo el techo, y mi mente se llena de pensamientos sobre James. ¿Por qué no puedo dejar de pensar en él? ¿Por qué no puedo simplemente olvidarlo?

La presencia de Jack es una distracción, una forma de llenar el vacío que dejó James. Me aferro a él, buscando refugio y evitando enfrentar los sentimientos no resueltos que aún me atan a James. Quiero creer que quizás puedo construir algo sólido y duradero en el futuro con Jack, que puedo encontrar la felicidad en sus brazos. Pero la verdad es que, hasta que no confronte mis sentimientos y resuelva el pasado con James, siempre habrá una sombra que nublará mi conexión con Jack. Es una batalla interna que debo librar, enfrentar mis miedos y tomar decisiones difíciles. No puedo negar que James me llevó a lugares que nunca antes había explorado, despertando emociones que nunca creí posibles. Su presencia me hizo sentir especial y única.

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