La noche de fiesta parte 02

439 26 1
                                    


Por otro lado, Anya estaba sumamente mareada, pero la muy tonta seguía bebiendo y bailando como si nada, por algún motivo la voz del chico del gimnasio seguía grabada en su mente, ella estaba perdida en sus pensamientos mientras bailaba hasta que alguien la tomo por la cintura aprisionándola – Lindel – exclamo algo aterrada, si en condiciones normales no podía hacer nada contra él, en esta situación menos.

¿Qué haces aquí? – Exclamo Anya estando presa entre los brazos del joven - Me enteré de que Becky tenía una fiesta y pensé que seria un buen momento para nosotros – Respondió mientras acercaba su boca al cuello de Anya – Lindo escote – Le susurro en el oído, sus brazos estaban rodeando toda la cintura y espalda de Anya, la estaba levantando ligeramente para tener acceso a un poco mas que su cuello, Anya intentaba resistirse pero todo le daba vueltas – Mierda, no debí beber tanto – se recriminaba porque tenia menos fuerza que lo normal, Lindel por otro lado le estaba besando el cuello, la sensación era extraña, no sabía si era por el alcohol pero podía jurar que le gustaba y calentaba pero al mismo tiempo le generaba asco.

Imágenes del pasado de ella con Damián venían a su cabeza no quería que Lindel continuara, para ella solo Damián podía tocarla – Duele suéltame – reclamo Anya mientras que Lindel le estaba mordiendo poco más abajo del cuello, como estaba oscuro nadie veía claramente lo que pasaba - SUELTAME MALDITA SEA - gritó fuerte cerrando los ojos y empuñando las manos mientras lo golpeaba tanto como podía, aunque fuera en vano.

Sin saber cómo exactamente Anya percibió que ya estaba siendo alejada de Lindel el cual había recibido un fuerte empujón de alguien que se encontraba atrás de ella, era un hombre, lo supo por las manos y por la voz – ¿Quién mierda te crees para empujarme maldito? – reclamo Lindel – ¿Quién mierda te crees tu para forzar a Anya a algo así? ¿acaso estas demente? – Se escucho en respuesta.

Anya estaba demasiado mareada por el alcohol y confundida por la velocidad en la que las cosas estaban pasando, solo entendía que había un chico que la estaba sujetando por la espalda defendiéndola de Lindel y que este chico se escuchaba muy pero muy molesto, finalmente Anya decidió girar la cabeza para ver de quien se trataba, su expresión se convirtió en una de incredulidad, su cuerpo se torno frio de inicio a fin, sus ojos se abrieron como era posible, pensó que de seguro estaba alucinando por culpa de tanto alcohol

No puede ser, no puede ser, es mentira – fue lo que alcanzo a decir, era Damián, quien seguía solo sujetándola suavemente mientras maldecía al chico que estaba frente a ellos, con un brazo  la aguantaba mientras que con el otro amenazaba a Lindel, para Anya todo el sonido se había ido pues su mente estaba enfocada solamente en el rostro del joven, contemplaba sus labios y sus ojos, se perdió demasiado en sus pensamientos mientras mantenía la mirada clavada en él, sintió como su pecho se aceleró y su respiración se entrecortaba, estaba demasiado emocionada, no pensó las cosas en absoluto solo actuó por el impulso del calor que estaba comenzando a recorrer todo su cuerpo.

Damián agacho la mirada para preguntarle a Anya si estaba bien, por lo poco que vio se dio cuenta que ese tipo la había mordido -oye lo siento estas bi. . .- No pudo terminar la frase, Anya lo había sujetado por la cara com ambas manos y le planto un beso en los labios, fue un beso suave y lleno de melancolía, cuando se separó, Damián solo puedo escuchar un – Te extrañe mucho Damian

Estaba incrédulo de lo que había ocurrido, seguía sujetándo a Anya, ella ya estaba de frente hacia él, no podía creer que ella lo había besado, estaba divagando cuando ella lo beso de nuevo, él pensó en resistirse pero esa resistencia le duro una fracción de segundo, al cabo de un momento ya la estaba besando de regreso, esta vez con mucha más pasión, la abrazo tan fuerte como era posible y para acrecentar la profundidad del beso la estaba sujetando suavemente por el cabello, para ellos el mundo se paró en ese mismo instante, no había ruido ni personas solo ellos besándose intentando saciar una sed que se guardaban desde hace años.

Estaba incrédulo de lo que había ocurrido, seguía sujetándo a Anya, ella ya estaba de frente hacia él, no podía creer que ella lo había besado, estaba divagando cuando ella lo beso de nuevo, él pensó en resistirse pero esa resistencia le duro una ...

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.


Cuando se separaron se pudo escuchar a Lindel muy impactado decir – Así que tú eres el famoso Damián Desmond, ahora entiendo porque Anya no quería nada conmigo, eres lindo también me agradas, si quieres podemos compartir jeje – eso lo dijo acercándose a Damián quien se erizo con ese comentario tan fuera de lugar, iba responderle pero escucho a Anya quejarse – Todo me está dando vueltas – tenía una mano en la cabeza mientras estaba recostada del pecho de Damián – no tengo tiempo para seguir hablando contigo, cretino – fue lo único que atino a decir para después proceder a cargar a Anya, él solo pensaba que tenía que sacarla de allí.



https://www.pinterest.es/pin/653725702180000259/visual-search/?x=10&y=10&w=544&h=716&cropSource=6&imageSignature=f1c6de33ded05db2493f9b715a9a96b0

UNA HERMOSA CASUALIDAD - ARCO 2Donde viven las historias. Descúbrelo ahora