Paso todo el fin de semana en casa de SungHoon. Sus padres están fuera en un viaje de trabajo y se que los de Sunoo agradecerán que los deje pasar solos el fin de semana de su aniversario, así que todos salimos ganando. Sobre todo yo, necesitaba un descanso, algo de paz y desconexión entre tanta mierda.
Pero el lunes llega increíblemente rápido, y con el, un nuevo día en el instituto. Por suerte, las últimas semanas he aprendido a estar mejor a pesar de todo. Por un lado, estar con SungHoon me ha enseñado a no avergonzarme de lo que soy, y me he dado cuenta de que si ignoro los insultos, haciendo como si no los oyera en lugar de agachar la cabeza como soliabhacer antes, ellos pierden un poco el interés. Además, con todo lo que ha pasado con mis padres, cualquier tontería que puedan decirme piedre una buena parte de su importancia.
Sin embargo, hoy hay algo distinto en el ambiente.
Lo cierto es que las cosas en el instituto han estado algo más calmadas desde mi encontronazo con Jay; y no solo a causa de mi cambio de actitud. Algunos no han dejado de insultarme en los pasillos, eso por descontado, pero la mayoría son alumnos que no conozco, gente que sabe de mi tan solo de oídas y se mete conmigo simplemente por subirse al carro, porque es lo que se supone que tienen que hacer. Insultar al maricón es el deporte oficial de este instituto.
Pero hoy es como si el tiempo hubiera retrocedido dos meses, y los insultos me reciben nada más cruzar la puerta del instituto, como un manguerazo de agua frus que trato de ignorar con todas mis fuerzas. Por suerte voy con Sunoo, así que en cuanto se dan cuenta de que no estoy solo me dejan en paz y puedo volver a respirar tranquilo, al menos durante un trato.
Sin embargo, en la clase de Educación Física estoy solo porque Sunoo se salta la clase para hacer los deberes de la hora siguiente, de modo que cuando apenas faltan diez minutos para que termine alguien me pone la zancadilla mientras corro y caigo al suelo.
Miro s mi alrededor, pero, como siempre, ya no hay nadie cerca a quien pueda culpar. Me levanto trabajosamente, dolorido, y me sacudo el polvo de las rodillas y manos, que han quedado desoladas.
Aunque Jay y su grupo están a unos diez metros riéndose disimuladamente, se que no tengo forma de demostrar que han sido ellos, y también que nadie me apoyaría si lo intentara. Me observan con idénticas expresiones butoonas en la cara, y después alzan unas botellas de agua en mi dirección, como si brindaban por mi salud, y dan un buen trago.
Todas las asignaturas de este instituto suponen para mi un infierno, pero la peor de todas es, sin duda alguna, Educación Física. No por la clase en sí, que no sr me da demasiado mal, sino por lo que ello implica, cincuenta minutos de movimiento continuo y contacto físico, lo cual, en las mentes de mis compañeros, equivale a la hora de torturar a Jake.
Y lo peor es que la tortura no acaba cuando el profesor da por finalizada la clase y nos deja marcharnos, sino que después tengo que enfrentarme a una muy diferente: los vestuarios.
Es curioso, porque antes de que toso pasara la hora de las duchas era en realidad mi momento favorito de la semana. Al fin y al cabo, tenía la excusa perfecta para ver todos mis compañeros de clase desnudos, y la verdad es que hay que reconocer que muchos de ellos estamos bastante bien.
Los miraba de reojo y con disimulo, procurando controlarme para evitar reacciones en mi cuerpo que pudieran delantarme, pero los observaba igualmente. Lo cierto es que me lo pasaba bien, aunque normalmente salía de los vestuarios con las hormonas totalmente revolucionadas y no veía el momento de llegar a casa para ponerlas bajo control en la soledad de mí habitación. A veces ni siquiera era capaz de aguantar, y acababa haciéndolo en los lavabos.
Sin embargo, ahora es con diferencia el peor momento de la semana.
Desde que pasó lo de YeonJun, jamás me ducho en el instituto después de Educación Física, no quiero estar con ellos más tiempo del imprescindible. No obstante, eso no evita que los dos o tres minutos que tardó en cambiarme los dediquen a insultarme con saña. Son los únicos momentos que pasan a solas conmigo sin ningún adulto cerca, pues el profesor jamad entra en los vestuarios.
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𝑺𝑯𝑨𝑫𝑶𝑾⁰¹ 𝑱𝑨𝑲𝑬𝑯𝑶𝑶𝑵
Fanfiction¿Todas esas películas y series que te cuentan lo maravilloso que es ser gay, vivir rodeando de conpañaros heteros modernos en el instituto que te aceptan como eres y padres que te quieren incondicionalmente? Todo mentira. La realidad no es esa. Al m...