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Esta parte contendrá escenas de sexo, así que si no te sientes cómodo leyendo este tipo de cosas, te sugiero que lo omitas.

Si un año atrás me hubieran preguntado como me imaginaba celebrando San Valentín, de seguro que mi respuesta ni siquiera se acercaría este granero como escenario y mucho menos al más perfecto protagonista que tengo aquí a mi lado, saboreando mis l...

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Si un año atrás me hubieran preguntado como me imaginaba celebrando San Valentín, de seguro que mi respuesta ni siquiera se acercaría este granero como escenario y mucho menos al más perfecto protagonista que tengo aquí a mi lado, saboreando mis labios como si fuera el mejor dulce que haya probado.

Cuando me doy cuenta, estoy tumbado sobre el, devorando su boca con ansias. Después de todo, ahora estamos solos. Por primera vez, estamos solos de verdad. Sin sus padres en otra habitación de la casa. Sin mi madre durmiendo en el salón o mi hermana en su habitación.

Estamos somos en medio del campo, libres para hacer lo que queremos. Como queramos. Libres para ser tan ruidoso como queramos. La idea resulta demasiado excitante como para no aprovecharla, así que devoró su boca y después su cuello, haciéndole gemir contra mi pelo mientras se estremece debajo de mí.

⎯No tenemos que hacer nada que no quieras⎯ me recuerda con voz entrecortada.

⎯Lo sé.

⎯¿Estás seguro? Cómo la última vez no quisiste hacer nada aquí...

Me señaro un poco de él.

⎯La última vez no habíamos hecho nada todavía y quería que fuera un momento especial.

⎯Esta vez también puede ser especial.

Entonces, se aparta de mí y vuelve hacia su mochila. Saca de ahí unas vuelas y un mechero, comenzando s dejarlas por el tejado del granero. Sin embargo, cuando trata de entenderlas, la brisa las apaga y SungHoon se queda mirándome con cara de idiota.

⎯Bueno, yo lo he intentado, ¿bien? No contaba con el favor viento.

Rompo a reír, mirándolo con el mechero en la mano.

⎯Deja eso, anda. A ver si luego no terminas incendiando algo.

Me recuesto sobre las mantas y esta vez es el quien se tumba sobre mí y comienza a besarme con ganas.

⎯¿Seguro que quieres seguir?⎯ pregunta una vez más.

⎯Qué si, pesado.

⎯¿Quieres que entremos?

⎯Da igual. Tampoco hace frío.

⎯Pero estamos al aire libre ⎯señala ⎯No hay techo, ni paredes ni nada.

⎯¿Y qué? Tampoco es que vaya a venir nadie. Además...tienes que reconocer que esto tiene su morbo⎯añado, metiendo la mano al interior de sus pantalones y arrancándole un prolongado gemido.

Se lanza hacia mi boca otra vez, y yo distruto moviendo la mano debajo de su ropa y haciéndole jadear. Se quita el cinturón, se desarrolla los vaqueros y se los baja por completo. Después me mira durante un instante, pidiéndome permiso con los ojos, y yo asiento con la cabeza y abro la boca, dispuesto a recibirlo. El entra con lentitud, con cuidado de no atragantarme,  y yo me dejo llevar y lo saboreo con toda la lengua, disfrutando de la sensación y de los gemidos que no deja de soltar.

𝑺𝑯𝑨𝑫𝑶𝑾⁰¹ 𝑱𝑨𝑲𝑬𝑯𝑶𝑶𝑵Donde viven las historias. Descúbrelo ahora