TERAPIA- SunKi♡

XLI

SIIII, COMENTEN Y YO ACTUALIZO SIIIIIIII.

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El chico pelirosa estaba sentado en el comedor, esperando su plato de comida puesto a que Jungwon cocinó sopa de pollo ese día, Jake estaba algo resfriado.

Esa tarde era la audiencia con Sakura, ¿como podría verla? Apenas y cuando recordaba lo que pasó todo su cuerpo temblaba.

"Labial rojo, te queda horrible" eso le decía aquella chica mientras se maquillada enfrente de él.

"Con tus piernas tan asquerosas no sé como Ni-ki no vomita, a mi me quedan perfectos los vestidos" recordó que le dijo eso mientras ahorcaba su cuello con una cadena.

Sunoo...

Parecía sonar una voz muy lejana, le recordaba a cuando Riouta susurraba su nombre para darle comida.

Sunoo...

Otra vez esa voz... parecía que estaba unida a sus recuerdos, cuando sus piernas tenían tantos moretones que le dolía tratar de pararse.

Hey, Sunoo.

¿Porqué la voz se sentía tan cerca y... familiar?

-Amor.

Pestañeó varias veces antes de darse cuenta que su plato de comida ya estaba frente a él al igual que todos sus compañeros y su prometido estaban a su lado.

-Ah... ¿Si?- djo forzando una sonrisa.

-Vas como tres minutos sin escucharnos... te llamamos muchas veces- Ni-ki se sentó a su lado -¿Es.. por lo de ella?

-En verdad no quiero verla...- dijo aguantando sus lágrimas.

-Vas a estar bien- Jay coloco su mano sobre su hombro -Ni-ki estará a tu lado y nosotros estaremos en el estrado, no vamos a dejarte solo.

-E-es que.. me da miedo- sus manos empezaron a temblar pero en verdad no quería que sus amigos se preocupasen por él.

Así que, evadiendo sus miradas trató de comer de la sopa que le habían dado, pero sus manos temblaban al alzar la cuchara sin poder siquiera hacerlo bien.

-Está bien tener miedo- Jungwon se acercó por su detrás abrazándolo suavemente, sintiendo todo el miedo que salía de su cuerpo en forma de tiriteos, tratando de ocultar que en verdad estaba temblando.

-No volveremos a perderte- Sunghoon se acercó a él de igual manera, abrazándolo a un lado de Jungwon.

Entonces Sunoo dejó salir todas las lágrimas que había contenido desde que despertó esa mañana.

Dejando salir todos sus hipidos, todos sus sollozos, lamentos y dejando de reprimir su pequeño ataque de ansiedad.

Entonces... esto es familia...

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.

-Es momento de entrar- estaban en la van, esperando a la hora correcta para entrar al edificio donde sería el juicio.

Ese era el peor momento para que los paparazzi estuvieran de sobra en ese lugar, parecía que no había lugar ni para pasar o siquiera pararse, así que los guardias les formaron un camino un tanto estrecho, pero un camino.

Empezaron a caminar, primero fue Jungwon, luego Ni-ki quien caminaba de la mano con Sunoo atrás de él.

-Permiso por favor- aunque el líder tenia unas ganas enormes de gritarles "¡Quítese alaverga!" No lo hizo.

-Permiso- Sunoo decía suavito, bajando su rostro para que no le den los flashes, agarrándose con fuerza a Ni-ki.

Pero uno de los paparazzi pudo escapar de los guardias, empujando a Sunoo, separandolo de su prometido.

-¿Se comprometió?- dijo aquel paparazzi tomando fotos de Sunoo asustado por lo que acababa de hacer.

-Y-yo... ahm..- y como ese paparazzi lo hizo, otro quiso acompañarlo, pero al tratar de entrar, lo empujó haciéndolo caer al suelo.

-¿¡Pero que mierda les pasa!?- Ni-ki en verdad quiso controlarse, pero al ver a su prometido en el piso, asustado y con tantos flashes sobre él, no pudo, empujó de manera violenta al paparazzi que había entrado en el camino y jalando la mano de Sunoo lo atrajo a su lado.

-¡Quédense en su maldito lugar, no siempre pueden venir a hacer su show!- Ni-ki no fue el único molesto, Heeseung lo acompañó.

-Si vuelvo a ver tu cara por aquí, voy a demadarte y hacer tu vida totalmente miserable- Jay pasó por encima de ese paparazzi, sin desaprovechar la oportunidad de decirlo bajo para que solo él escuche pero quede lo suficientemente claro.

-Vamos, yo te protejo- Ni-ki sonrió a Sunoo cubriéndolo con su chaqueta caminando justo detrás de él, mirando mal a todos los paparazzi que estaban queriendo sobrepasar aquel estrecho y corto camino.

Mientras Sunoo estaba caminando, sin ver flashes, sin ser empujado, confiando plenamente en Ni-ki, sintiéndose seguro en ese momento, sabiendo que en verdad, no podían hacerle daño.

Jake, quien estaba de último, aprovechó que los paparazzi cuchicheaban y que aquel hombre seguía en el piso para pisar y destruir su cámara.

-Ay, perdón- y siguió caminando como si eso no fuera absolutamente intencional.

Llegaron hasta dentro del juzgado, arreglaron sus ropas y Ni-ki destapó a Sunoo, viéndolo con una sonrisa cuando lo hizo.

-Gracias por defenderme- Sunoo dijo tomando delicadamente su mano -gracias a todos por defenderme- les sonrió a loas otros 5 chicos que estaban ahí.

-Para eso estamos, no vamos a dejar que nadie vuelva a dañarte- y dos minutos antes de entrar al juicio, los siete se abrazaron con amor y amistad.

Sunoo acababa de conocer qué era lo que realmente era una familia.

-Entonces ¿Estas listo?- Ni-ki dijo porque ya debían entrar.

-Yo... sí, mientras estés conmigo- y caminaron para entrar.

Sunoo suspiró antes de ver a todas las personas que estaban ahí dentro ¿porqué no estaba ella? Se preguntó cuando se escuchó un fuerte ruido en la segunda puerta.

Sakura entraba sostenida por dos oficiales, estaba en silla de ruedas y se veía tan mal.

Su cabello estaba totalmente desordenado, nada arreglado y su rostro estaba con una expresión enojada, claramente la obligaron a ir.

Sus piernas estaban quemadas, porque ahí estaban las quemaduras al igual que parte de su torso y hombro izquierdo.

Pero aquella chica, al ver quienes habían entrado, agarró su cabello como pudo en un moño.

->Hola Riki<- saludó desde su lugar.

Y el nombrado solo sintió asco, mirando de esa manera a la chica.

Sunoo se tomó dos segundos antes de apretar la mano de Ni-ki asegurándose que no estaba solo y caminar hasta su lugar en el estrado.

-¿Está todo bien?- dijo el japonés preocupado viendo que Sunoo tenía su respiración un poco pesada.

-Si estás conmigo, sí.

Cami~