Lights, camera and secret love! (Yoonmin)

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"Solo quiero que mis estrellas colisionen con la luna en cuarto creciente que formas cuando sonríes, después de abrazarme tanto tiempo; y así provocar el desastre más bonito..."

Yoongi se recostó en su motocicleta, cruzó las piernas un poco para estar cómodo; su cabello aún húmedo se movía con el viento que soplaba en su dirección, dejándolo alborotado. Sus manos sostenían una caja de algún restaurante de comida rápida.

El auto de Jimin apareció en la lejanía, el chico rubio lo observó, deleitando su mirada en su cuerpo, su rostro y sus cabellos negros, largos qué tanto le encantaban; Yoongi le esperaba con una sudadera beige y detalles en tonos verde oscuro; un pantalón de mezclilla negro, qué le hacía ver sensual y naturalmente fresco.

Seokjin no dejó pasar desapercibida su mirada y se convenció aún más de su propia teoría; sin embargo se sorprendió cuando vio a Min Yoongi sonreír nervioso, viendo el auto acercándose.

Seokjin bajó del auto para abrir la puerta a su jefe, sin embargo Yoongi se adelantó, saludando y abriendo. Kim sonrió cómplice con la nada, se despidió y condujo de nuevo, yéndose de ahí.

-¿Cómo ha ido todo en las primeras escenas? Preguntó Yoongi, sosteniendo el bolso de su amigo, lleno de ropa, y accesorios hasta el tope.

Jimin le agradeció aquel gesto, sonrió con pesar, -Odio el romance, ¡De verdad! No miento...

Su voz sonó decepcionada, -Tengo que practicar algo para mañana, no logré terminar los últimos segundos de la última escena de hoy.

-¿Qué sucedió Jiminie? ¿Te pasó algo a ti? Preguntó Yoongi con notoria preocupación.

-Debía seducir a mi compañera, sólo tenía que caminar hacia ella y coquetear; fui un asco en eso... ¡Ayúdame Yoon! Tú tienes experiencia con eso, suplicó, desesperado. -¡Enseñame por favor!

Yoongi sonrió entrando a la casa, se dirigió a la sala y dejó ahí el enorme bolso de Jimin, luego fue a la cocina a dejar la caja que llevaba, viendo a su amigo dejarse caer sin energías en el sofá.

-Es sencillo hacerlo, intenta pensar en algo o alguien que te guste e imagina que está frente a ti, eso te hará la tarea más fácil, — dijo ante la frustración de su amigo, por algo tan sencillo.

Jimin tomó nota mental de sus palabras.

"Por ejemplo ¿Tú?" Pensó, sonriendo de forma coqueta sin darse cuenta, tal como siempre lo hacía cuando pensaba en Yoongi.

-Ahora que tengo algo en mente ¿Qué hago? Preguntó, esperando escuchar más.

-Toma toda la seguridad que tengas, relájate, dijo Min. — Tu compañera de rodaje no va a negarse; el guión es el que tiene el poder.

Yoongi señaló el sillón al lado derecho de Jimin, -Voy a pensar que ahí hay alguien, y caminaré, observa mi postura.

El cuerpo de Yoongi se relajó y caminó unos cuantos pasos, sin embargo Jimin no pudo poner atención, pues se distrajo en las manos de su amigo; viendo sus dedos largos y sensuales enredarse en su cabello largo; las venas remarcadas y las pulseras de cintas negras que usaba llamaron su atención cuando se dirigió a su boca, tocando su labio inferior de forma lenta.

-¿Ves que fácil es? Inténtalo ahora, dijo divertido, animandole a hacerlo.

Jimin se puso de pie, dio algunos pasos y se sintió rígido; avergonzado por la mirada de Yoongi sobre él.
-¡Estoy perdiendo el tiempo! Dijo frustrado, -No voy a poder.

-¿Quieres comer primero? Preguntó Yoongi sonriendo con ternura, -Olvida todo ahora, comamos y después lo intentaremos de nuevo, ¿De acuerdo?

Jimin asintió, caminando con prisa a su habitación, para cambiarse de ropa y ocultar su vergüenza. — ¡Park Jimin, eres un actor! ¿Cómo te llenas de pena por algo simple frente a Yoongi?