Lights, camera and secret love! (Yoonmin)

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"Cuídame mi amor, aunque yo no te lo pida, mi alma lo suplica en demasía; dame de tu amor mi dulce hombre, llename de ti, fruto prohibido. Mi mundo ante ti está rendido, aunque no te lo diga, lo desea. ¡Lo desea con las fuerzas de su alma! ¡Te desea mi amado corazón!"

—Jungkook, ¡Estoy muy feliz por ti! Seokjin se quedará sin palabras mañana, ojalá pudiera ver el rostro que pondrá...

Jimin dijo aquello sonriendo mientras alborotaban los cabellos de Jk.
—¿Y si te quedas? suplicó con sus ojos brillantes y enormes que solían cautivar a cualquiera que los viera con atención.
—Quédate, ¿Puedes? Así mañana puedes peinarme y arreglarme...

—¡Oh! Me encantaría, pero hoy falté y mañana yo...

Los ojos de Jungkook lo vieron suplicantes, haciendo crecer los nervios de quedarse, un deseo que quemaba entre su pecho, ansioso por decir que sí.

—Jiminie, puedes llamar a Seokjin ¿Verdad? Dijo Yoongi, intentando sonar despreocupado, aunque estuviese muriendo por dentro.

Jimin sonrió con el rostro rojo, "Pasar una noche junto a él" aquello lo hizo temblar de pies a cabeza.
— Le diré que estoy resfriado, para que avise al director...

La algarabía de aquella sala explotó, los tres chicos se sentaron a cenar y ver televisión; la noche empezó a llegar entre juegos de mesa, algunas cervezas y risas que llenaron sus almas de calidez, dejando en el olvido todo miedo como si fuesen nubes alejándose ante la bella luna que brillante, surgió de sus sonrisas.

Algunas latas de cerveza se juntaron vacías en la mesa, —Me voy a dormir, anunció el pequeño de los Min, creo que el exceso de alegría me ha mareado un poco...

Jimin se levantó del sofá para llevarlo a dormir, —No debiste tomar más que nosotros, al menos dormirás como un bebé.

Jungkook agradeció por todo lo de aquel día, después de eso se quedó dormido.

—Espero que no lo hayas olvidado... Murmuró Yoongi abrazando a Jimin por la espalda, minutos después cuando salió de la habitación.

—¡Me asustaste! Susurró sonriendo con coquetería, haciendo su cabeza hacia atrás, besando la comisura de su boca. —¿De verdad no me dejarás dormir toda la noche? Preguntó.

—No puedo descuidarte mi príncipe, murmuró caminando lentamente, —Tú no debes desvelarte ni perder tus energías, eres Park Jimin, una celebridad muy protegida, aquí sólo importas tú.

Jimin lo observó con sus ojos brillantes, aquella faceta de Yoongi siempre la había adorado desde que eran niños.
—Me gusta más ser Jiminie, murmuró jugando con las manos de su chico, pensando con nostalgia que Yoongi no había tenido una figura que le protegiera,
"Siempre me ha puesto primero, si tan sólo yo pudiese tener el derecho de hacerlo, le diría a cada segundo que lo amo y mis brazos serían su refugio..."

 —Sé que te importo mucho, pero tú también eres igual de valioso aquí, cielo, no lo olvides.

Yoongi lo abrazó con ternura, lo giró para quedar de frente,
—Dime otra vez así, pidió con ansias, perdido en sus ojos.

—¿Cielo? Preguntó Jimin sonrojado, sintiéndose tímido ante su mirada.

—Es la tercera vez que me dices así. Susurró, "Si supieras que nadie más me ha llamado de forma tan dulce"

—¡Cielo, cielo, cielo, mi cielo! Susurró nervioso el chico de cabellos rubios, besando tiernamente su rostro con besitos cortos.

Yoongi lo guió a la habitación,
—Te tendré una noche completa conmigo, es nuevo para mí dormir acompañado, tú has sido en muchas cosas, mi primera vez, Jiminie.