Luna del destino

Unión inesperada

El espíritu del brujo se disolvió, todos los que lo vieron solo pudieron deducir eso como una victoria. Se sentía la paz y la tranquilidad que traía consigo.

Krow y los líderes de los nueve clanes estaban muy sorprendidos, pudieron ver a su nuevo enemigo caer pero aquella presencia que les llevó esa paz parecía muy intimidante.

¿Será un nuevo enemigo?, ¿Otro hombre lobo de rival? Eran algunas de las preguntas que sonaban en los que veían. 

El sol comenzó a ocultarse en un evento muy extraño, una enorme nube de lluvia lo había tapado. Sus gotas mojaban el suelo, a los espectadores y también al recién llegado que había vencido al espíritu.

Los nueve clanes y las brujas trataron de no meterse en su camino, veían un derrame de violencia muy excesivo, pues aunque el espíritu ya había desaparecido, el hombre lobo negro atacaba como si aún estuviera ahí.

—¿Qué hacemos? —Preguntó Ruf desconcertado por lo que veía.

—Trata de no bajar la guardia. —Le respondió Wil. —Ese hombre lobo se ve muy imponente, nunca había visto algo igual.

—Su amuleto me parece familiar. —Dijo Ilian quien apenas podía creer que el espíritu de su maestro hubiera sido derrotado. —Es un amuleto de luna pero ¿Cómo pudo vencer al maestro?

Su voz tubo un amplio volumen, tanto que lo habían escuchado todos los cercanos e incluso el ser que estaba desequilibrando a todos.

—Porque mi amuleto me permitió materializar su espíritu. —Respondió el lobo limpiándose su pata. —Usar el poder real de estos amuletos requiere muchos años de preparación. Hoy elegiste el bando acertado, si no estuvieras como tu maestro en este momento.

—Te falta mucho por hacer si crees que mi maestro ya está derrotado. —Ilian respondió un poco confusa por el bando en el que estaba. 

—Ya se que este era solo un espíritu enviado por él. —La voz de aquel lobo era gruesa pero por más que se escuchaba podía oirse el tono femenino. —Vine a detener su espíritu pero también iré por su cuerpo físico. No temas tendrá una muerte rápida.

—Hablas con mucho egocentrismo pero aunque poseas un amuleto y lo sepas usar no será suficiente, se necesita mucho más poder, algo que solo los amuletos de luna juntos podrían lograr.

—Entonces los tomaré todos y luego mataré a tu maestro. —Ese ser se veía desubicado pero sabía perfectamente de lo que hablaba, parecía que conocía toda la información que necesitaba.

—¿Quién crees que eres? —preguntó Ilian un poco molesta, al hacerlo pudo reflexionar un poco sobre su pregunta en si. ¿Quién podría tener ese poder, conocimiento y sobre todo un amuleto de luna? 

—Soy una loba hechicera mucho más antigua que tú. —Respondió muy áspera y muy tajante. —Mi nombre no lo vas a conocer pero tal vez mi apodo si.

—¿Eres parte de los sangre negra? —Preguntó maravillada.

—Asi nos llamaron a mis hermanos y a mi pero no me complace decir que lo somos. —Respondió la licántropo un poco alterada, luchaba por mantener la calma.

—¿Cómo es que siguen vivos? Ha pasado mucho tiempo desde su creación.

—No vengo aquí a hablar de mi vida, vine por venganza. —Respondió muy tajante mientras sacaba su larga lengua. —Tenemos un enemigo en común, podemos pelear juntos.

—¿Por qué estás buscando venganza? —Preguntó Krow interrumpiendo a Ilian y mostrándose un poco menos emocionado que ella. —¿Qué te ha hecho ese brujo a ti?