El día siguió avanzando mientras la tranquilidad se hacía dueña del escenario. Fue decretado un descanso obligatorio para todos. Esto fue aprovechado por los heridos que buscaban refugiarse para sanar así como por todos los que solo buscaba reducir la tensión de lo vivido.
Muchos aún estaban espantados, habían aparecido tantos enemigos para matarlos que esa paz se veía pasajera.
Las brujas no estaban planeando en regresar aún, fueron invitadas también al descanso y fueron bien recibidas por los lobos en su territorio para sentirse como en casa.
Los líderes de los nueve clanes descansaban todos juntos, con los brujos del consejo y con la recién recuperada Morgana.
Ilian y Krow se sentían más libres pues pudieron expresar y contar su amor a todos los presentes. Esto les hizo tener una unión aún mayor y así disfrutar de su momento juntos.
—¿Qué opinas de la aprobación que tenemos para nuestra relación? —Le preguntó Krow mientras sostenía sus manos y la miraba de frente. El sol les daba en el rostro pero ni con esa luz se podía ocultar el brillo propio tras mirarse.
—No me lo esperaba la verdad, creí que tus lobos se pondrían más difíciles conmigo. —Ella estaba apretando muy fuerte su mano, no deseaba soltar a Krow. —Pero me siento mucho mejor y aún más sorprendida de que tú hayas dicho todo eso, jamás esperé que me dieras un lugar así de importante en tu vida. Estoy feliz por eso.
—Tienes un lugar muy especial en mi. —Sonrió nuevamente, una sonrisa que encantaba a Ilian, muy expontanea y que en gran parte hacia referencia a lo que sentían. —Además pude ver cómo regresaste por mi no en una si no es varias ocasiones para ayudarme, eso dice mucho más de ti
—Regresé porque te amo y necesitaba limpiar mi culpa de todo esto. —Luchaba contra la luz, no quería cerrar sus ojos para no perderse ni un momento el rostro de su amado. —No soy una mala persona, me gustaría ser feliz contigo.
—Y seremos los más felices pero me gustaría saber primero. ¿Cómo te relacionaste con ese brujo?
—Es una muy larga historia, me gustaría no contarla.
—Por favor, yo quiero saber todo de ti. No te culparé para nada. —Su labor de convencimiento solo bastó con seguir sonriendo y pedirle las cosas con ese tono de amor que a Ilian le gustaba tanto. —Te repito que buscaremos soluciones y no conflictos.
—Esta bien, te lo diré. —Cayó directamente en sus encantos, no se pudo resistir. —Mi familia es del clan directo de aquel brujo. Yo no lo sabía, cuando hablaban de él me parecía como una historia de leyenda o fantasía que se le cuenta a los niños. Pero en una ocasión cuando era más joven, mi familia recibió su visita con una invocación, el brujo había estado dormido varios años. Eso lo hace para poder vivir más tiempo.
Cuando despertó pidió a mi familia que se le entregara alguien para que siguiera su legado. Le presentaron varias opciones pero ninguna pareció agradarle. Yo era muy pequeña y vió en mi la cualidad mágica para controlar un amuleto por la sangre de hombre lobo que corre por mis venas.
Hizo una ligera pausa para mirar la reacción de Krow antes de continuar el relato. El estaba muy interesado en su historia, le apasionaba conocer el pasado de su amada pero también datos sobre el enemigo.
Ilian se ponía tensa al contar todo eso pues le traía malos recuerdos.
—Yo no quería irme con el, como toda niña deseaba estar con su familia y tener lo que nosotros llamamos una vida normal. No me fue posible elegir y ese nuevo tipo de vida al que me vi expuesta me dolió mucho. Fueron 5 años en los que viví con él, aprendí mucho sobre la magia y pude pulir mis habilidades.
ESTÁS LEYENDO
Luna del destino
FantastiqueUn imperio de hombres lobo manejado por un multimillonario llamado Krow New, el máximo representante de la hermandad. Se enfrentará a muchas situaciones para salvar a su especie... el principal problema; enamorarse de una joven bruja