Ilian y los amuletos de luna

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—¿Cómo que lobos mágicos? Eso no es posible. —Todos los hombres lobo estaban de acuerdo con este comentario y esa duda.

—Se han dado muy pocos casos, los más recientes fueron los sangre negra. —El cuadrado no solo era el líder sino también el más sabio de todos ellos. —Yo solo les dije que un hombre lobo con magia pero puede ser cualquier criatura sobrehumana que dentro de su cuerpo corra la magia, de hecho es más difícil de lo que creen.

—¿Los sangres negra?, ¿Qué carajo es eso?

—Son los hijos de un hombre lobo y una bruja. —Afortunadamente Krow estaba preparado gracias a las enseñanzas de Ilian. —Aparentemente nacieron con las habilidades de ambas especies pero tuvieron el maleficio de la deformidad. Nadie los quiso e incluso intentaron deshacerse de ellos. Su padre les dió cacería después que el último matara a si madre al nacer. Su sangre fue donada a un grupo de hechiceros de donde han nacido en algunas generaciones uno que otro con ambas virtudes.

—Que forma tan maravillosa de hacer un resumen de la situación. —Le felicitó Morgana. —Me imagino que se lo contó Ilian, esa jovencita se ha unido más a usted de lo que esperaba.

Krow la miró un poco molesto por el comentario en sí, no le hizo gracia que insinuara cosas así de su amada, de quién tenía rato sin saber pero de la que estaba enamorado.

—Hay muchas cosas que desconocemos por estar bebiendo y jugando casi todo el día. —Ruf le dió un codazo a Tru para bromear con el al decirle eso.

—Pero no debemos desviarnos del tema. —Pedía el lobo líder del noveno clan. —Si existen seres con tal poder, no dudo que estén buscando los amuletos. Por cierto, ¿Cómo es que ustedes tienen uno de esos?

—Porque nuestra familia lo ha tenido siempre. —Morgana era una mujer muy expresiva, siempre gesticulaba de más para hacer notar aún más sus encantos. Ahora que todos la podían ver de frente a diferencia de cuando lo hicieron en el portal, notaban su hermosura. —Ese amuleto nunca se movió, solo fue pasando de generación en generación y hemos tenido una portadora por cada una de estas generaciones. La de este tiempo es Ilian.

Aunque Morgana había reconocido que Ilian fue más allá en contarle eso a Krow, el estaba molesto pues no le contó todo y comenzaba a preguntarse el por qué.

—Yo me mantengo firme en qué debíamos buscar esos amuletos. —El líder del cuarto clan seguí su análisis. —Aunque no los usemos, podemos evitar que el enemigo los tenga o simplemente destruirlos.

—Destruirlos no es así de fácil como suena. —El brujo triángulo respondió ante su petición. —Son objetos muy poderosos que no vienen de este planeta. Su fuerza es superior a la de cualquier objeto mágico, no se pueden destruir así como así.

—Antes de pensar qué hacer con ellos, tenemos que encontrarlos. —Blueno dió una de sus pocas participaciones en el día. —¿Hay alguna forma de saberlo? 

—Si la hay. —Repondió el brujo muy certero. —La forma que se me ocurre, es vincular el collar de Ilian para así encontrar a los demás. ¿Dónde está ella?

—No lo se, no la hemos visto por aquí. —Todos se miraron unos a otros como esperando que alguien tuviera la respuesta. —Pero no debemos preocuparnos por ella, recuerden que su amuleto lo tenemos nosotros, después del juicio ya no se lo entregamos.

—Es verdad, ¡Traiganlo inmediatamente!

Los lobos que estaban de guardias corrieron por el a la oficina principal donde lo tenían resguardado. Mientras tanto, el brujo cuadrado se preparó para conectarse. Lo haría con una profunda meditación tomando el amuleto en sus manos, así podría viajar a través del espíritu para encontrar los demás amuletos.

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