Cap. 25.- Volvamos a casa

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POV KEVIN

Decidimos que sería lo mejor que Sasha se quedara a cuidar a Silvia por si ocurría algo, y yo regresaría al gremio para encontrarme con Jessy y las demás.

Pero de camino al gremio, de repente aparecí en un páramo desértico cubierto por un sol rojizo.

Era como el nivel de rango S de mi mazmorra, solo que las arenas aquí no formaban montañas, no hay ruinas de iglesias ni los monstruos que se veían, en cambio, figuras de diferentes tamaños de rojo y azul se arremolinaban de un lado al otro alrededor de mi área, con formas cornudas y salvajes aludiendo a una imagen muy demoníaca.

Tardé un momento en percatarme, pero por alguna razón había terminado en una puerta natural hacia el inframundo.

Gracias a la convivencia con los otros aventureros se lo que es, las mazmorras se forman cuando varias líneas de magia coinciden formando un enorme cúmulo de magia que modifica el entorno, genera monstruos y da pie a la formación de mazmorras.

En las puertas al inframundo es lo mismo, con la diferencia de que la cantidad de magia requerida es tal que afecta la realidad misma del entorno, obligando a la entropía de los dioses a condensar la magia hasta que se forma un portal que conduce hacia un lugar desconocido lleno de monstruos demoníacos.

De por sí la formación de una mazmorra es raro, la de una puerta es aún más, pero el principal problema es, que no recuerdo haber entrado por una en primer lugar.

Recordando lo que había escuchado, la mayoría de las puertas desaparecen entre una o dos semanas, por lo que su presencia en la ciudad no es un problema a largo plazo, y dado que los monstruos no me están atacando decidí buscar la salida con calma.

Creía que al avanzar me prestarian atención, pero los monstruos solo se la pasan corriendo de una lado al otro sin acercarse, pase un rato buscando la salida, hastas que de la nada en medio del mar de monstruos apareció un hombre, sentado en una mesa con varias tasas y postres como queriendo tener una fiesta de té en ese lugar, a su lado se encontraban 3 figuras encapuchadas, todas con unas alas negras en sus espaldas sobresaliendo de sus vestimentas, y al igual que a mi, los monstruos no se les acercaban.

Decidí acercarme para investigar, y pude apreciar mejor al hombre, era guapo, de una piel clara y una mirada madura, tenía una cicatriz horizontal que le traspasaba toda la frente, pero fuera de eso tenía rasgos muy finos.

Ya reducida nuestra distancia, él me miró directamente a los ojos y me dirigió una cálida sonrisa.

[Dolores] Gusto en conocerte, Kevin Montijo, perdon que sea tan brusco en nuestro primer encuentro pero, ¿de casualidad la palabra nipon significa algo para ti?.

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POV JESSY

Para nuestra desgracia Kevin y Sasha no habían regresado al gremio, los esperamos por un rato pero no aparecían, Amper sugirió salir a buscarlos, a lo que todos incluidos los dos soldados estuvimos de acuerdo.

Fuimos primero a la casa de Sasha pero ahí no se encontraban, gracias a algunos aventureros del gremio supimos que fueron recogidos por Silvia, por lo que no sabíamos dónde estarían con presión, así que nos encaminamos a la zona noble esperando encontrarlos en el camino.

[Amper] ¿Y si ya los atraparon los de la primera sombra?

Preguntó con preocupación mientras avanzábamos, ciertamente yo tenía el mismo miedo pero no me atrevía a decirlo.

[Rulo] No tienen de que preocuparse, por lo menos podemos estar seguros de que la primera sombra aún no ha entrado a la ciudad.

Dijo uno de los soldados, ellos se colocaron para protegernos mientras avanzábamos, Rulo al frente y Amiro detrás.

La felicidad a basé del inventarioDonde viven las historias. Descúbrelo ahora