Mystery

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Una vez Kit desapareció por esa puerta, me giré buscando a los dos chicos, aunque solo logré encontrar a Michael sentado en el mismo sillón, esta vez solo. Confundida sin saber donde estaba Luke, me acerqué a mi amigo y éste me miro sabiendo mi pregunta.

- Luke ha sido obligado a irse a recoger este vestuario de mierda- explicó y señaló la ropa que llevaba él, fijándome que era tan solo una camiseta corta gris con unos pantalones negros. Todo sucio o con algún trozo roto. Hice una mueca y volví a mirar sus ojos-. Tu también debes cambiarte. Debes irte por esa puerta, sigue el pasillo y cuando llegues donde hay puertas, la tuya será alguna de esas.

Asentí con la cabeza y le agradecí a la vez que me despedí de él. Cuando traspasé la puerta que me señaló y empecé a seguir ese pasillo tenebroso, intenté no pensar en que se tenían entre manos este sitio, por no coger miedo. Tomé varias bocanadas de aire mientras cruzaba ese lugar, ya que no paraba de escuchar sonidos o gritos extraños , que me erizaban la piel. Aumenté el paso y volví a traspasar otra puerta, para entrar a otro pasillo, esta vez con ventanas añadidas en la pared de mi izquierda. Quedé un momento observando el jardín que se observaba a través de ellas y pude descubrir que nos era de noche y estaba lloviendo. 

Eso tan solo hizo aumentar mi temor a esa situación. Respiré profundamente y seguí caminando, intentando no mirar esas ventanas rectangulares acabadas en punta. Aunque cuando caía un relámpago y el cielo se iluminaba, no podía evitar dejar ir pequeños gritos asustada. 

Y cuando me di cuenta que había llegado, el cielo volvió a iluminarse, pero esa vez sí miré a fuera, para poder divisar una figura sentada en ese jardín. Las puertas fueron eliminadas de mi pensamiento y me quedé observando curiosa y con el corazón latiendo con fuerza. Me acerqué con miedo a la ventana e intenté poder ver con claridad el panorama de afuera. Las gotas caían contra le vidrio sonoramente y éste lo limpié un poco con la manga de la sudadera de Luke. Después de unos segundos mirando, pude volver a ver esa persona. Entrecerré los ojos para concentrarme más, se encontraba sentado en un banco y no se movía. No podía distinguir su rostro, pero era consciente de que esa figura miraba al suelo y estaba llorando por la manera que movía su espalda de arriba abajo.  

Cuando menos me lo esperé, esa persona se alzó y giró su cabeza, para que yo sintiera como sus ojos visualizaron mi presencia. Otro relámpago inundo el ambiente y entre ese periodo de tiempo que duró, sentí un escalofrío por todo mi cuerpo. Cuando la oscuridad regresó, el cuerpo que antes se hallaba afuera, había desaparecido.

Quedé sobrecogida y examiné a fondo el jardín, buscando la figura otra vez con el corazón conmovido. Súbitamente, el vidrio se empañó y me distancié de él desconcertada, mientras contemplaba como se formaban letras dejando un rastro limpió. Empecé a alejarme más temblando y cuando terminó de escribir, anteabrí mis labios paralizada.

Las lágrimas se posicionaron en mis ojos y negué con la cabeza a la vez que empecé a retirarme hacia atrás, sin poder afrontar todas las teorías o explicaciones a eso en mi mente. Pegué un grito cuando un cuerpo se posicionó detrás mio.

- Hey, soy yo ángel- susurró la voz calmada de Luke y me giré al segundo tomando una respiración más aliviada. Me quedé un momento observando su atuendo, haciéndome un poco de gracia como le quedaba la misma ropa que llevaba Michael. Pero no podía negar que le sentaba de maravilla- ¿Estás bien?

Alcé mi cabeza para mirarlo y negué con la cabeza mordiendo mi labio inferior, aguantando las lágrimas. Luke iba a preguntar el porqué, pero al final no hizo falta, ya que divisó el mensaje en la ventana y frunció el ceño acercándose a éste.

-¿Socorro- A?- leyó la ventana y me miro preocupado- ¿Por eso gritaste, no?

Asentí con la cabeza sin poder evitar soltar una o dos lágrimas las cuales recorrieron mi mejilla abajo. Luke no tardo en rodear mi cuerpo con sus brazos provocando que mi rostro chocara contra su pecho. La sensación de seguridad se expandió por mi cuerpo y suspiré más relajada cuando su mano acarició mi espalda.

Asylum #Wattys2018Donde viven las historias. Descúbrelo ahora