Me abracé a mi misma sintiendo el frío del ambiente helar mi sangre e intenté que la chaqueta negra de Luke intentara cubrir más piel para mantener el calor corporal. Además, mi barriga empezó a rugir, por la falta de alimento, provocando que formara una mueca con mis labios, colocándome en una posición más cómoda en ese suelo sucio y lleno de polvo.
Apoyé mi cabeza contra la pared y observé el panorama, el cual me llenaba de ansiedad y miedo, ya que parecíamos volver atrás al tiempo por los noventa, a las guerras mundiales. La hermana Mary nos había traído el pasillo de las celdas, donde se encontraban varios pacientes, unos heridos , otros paranoicos y algunos encerrados detrás las puertas, por "protección" ya que eran peligrosos. También estaba la hermana Jude, quien durante esas dos horas que llevábamos allí seguramente, no había hablado ni movido de esa silla de madera gastada.
De repente, sentí unos ojos penetrantes fijos en mi y ya sabiendo quien era, le devolví la mirada, creando que se curvara una diminuta sonrisa en sus labios. Yo imité su gesto y Luke con sus labios vocalizó la pregunta de si estaba bien, yo asentí con la cabeza y cuando le cuestioné lo mismo, mordió su labio inferior para bajar su cabeza y después levantarla y contestarme en silencio con un "mal sin ti."
Negué con la cabeza divertida y bajé la cabeza con un poco de rubor en mis mejillas. Pero sin esperarlo, las puertas más alejadas de nosotros fueron abiertas con mucha violencia y de ellas apareció Kit siendo arrastrado por dos hombres de una manera muy bruta escuchando como el chico más joven se quejaba. Su aspecto era como el de siempre, golpeado y tenia algunas heridas con sangre en varias zonas de su rostro o extremidades. Detrás de los hombres, pude divisar a la hermana Mary, quien, cuando los cuatro estuvieron ya más cerca de nosotros, empujó al rizado con violencia contra el suelo, acabando muy cerca mío. Éste soltó un quejido a la vez que empezó a toser de manera desesperada, e intentó apoyar sus brazos en el suelo, para alzar la cabeza.
- ¿Qué ocurre hermana Mary?- preguntó la hermana Jude, por fin reaccionando a la realidad y se levantó, caminando con lentitud hacia Kit, sin dejar de mirar a su compañera de trabajo.
- ¡Nos ha traicionado!- gritó señalando el cuerpo herido y demacrado del rizado-. Lo he encontrado hablando con uno de ellos y cuando se han dado cuenta, ese demonio ha matado a un hombre que me acompañaba.'
Ante las palabras de la mujer, quedamos todos paralizados, sobre todo yo, sintiendo como mi pecho se encogió, dándome cuenta que me había utilizado. Nos había utilizado a todos. Miré a Luke, y vi como se encontraba demasiado ocupado intentando quitarse las esposa de metal, puestas por su actitud contra las hermanas. Haría unos meses hubiera sido pan comido para él despojarse de eso, no obstante ellos conseguían debilitarlo ya que cada vez eran más fuertes.
- ¿Kit, es eso cierto?- preguntó la hermana Jude, con suavidad, seguramente escondiendo los verdaderos pensamientos violentos que le pasaban por la cabeza.
- No es lo que parece...me han...me han engañado.- tartamudeó en un tono de voz muy bajo, casi inaudible.
De repente, el pie de la hermana Mary se posó encima la espalda de Kit para provocar que su cuerpo dejara de aguantarse y quedara su pecho contra el suelo. El chico soltó un gemido y su muñeca limpió su nariz con brusquedad.
- Deja de esconder tu traición, imbécil.- espetó la mujer, con una asco notario y apretando sus dientes con fuerza. Kit no contestó, y se mantuvo en silencio. La hermana sonrío sintiendo el poder que eso transmitia y de repente, dejó en paz al chico-. La hermana Jude y yo vamos a hablar un rato, si no te comportas, juro que no me controlaré con el látigo.
Después de esa amenaza, la mujer empujó al chico sin ningún tipo de cuidado y con su compañera se alejó unos metros del grupo. A continuación, Kit alzó su cabeza, para repasar a cada persona delante suyo y cuando sus ojos esmeraldas apuntaron directos a los míos, provocandome una ligera presión en el estomago. Le mantuve la mirada intentando que no se notaran mis nervios y de repente, luego de segundos, Kit empezó a reír con lentitud y con carcajadas rotas mientras bajó la cabeza. Acabó suspirando mientras volvía a ejercer fuerza con sus brazos y con una de sus manos, limpió el hilo de sangre proveniente de su labio inferior.
- ¿Tu también crees que miento, verdad?- preguntó, con ese tono de burla característico en él y aún con la cabeza mirando el suelo, me miró de reojo. Como respuesta, asentí con la cabeza en silencio, siguiendo con el ceño ligeramente fruncido y Kit volvió a reír como si le faltara el aire-. Ahora no sé quien es el traidor de los dos.
- Sabes perfectamente que lo eres tu.
- En una amistad, una persona debe defender a la otra, aunque los otros no confíen en él.
- Tu nos mentiste y nos utilizaste con ese plan tuyo. Seguro que todo era falso, y ya tenías algo hablado con ellos a nuestra espalda.
Ante mis palabras, Kit soltó otra risa, pareciéndome como si hubiera perdido la razón.
- Si es eso lo que quieres creer, adelante, ya nada me importa una mierda. Ni si quiera tu.- espetó, y consiguió alzar su torso para poder apoyarse con la pared.
Sus palabras, por ser honestos, me habían afectado. No obstante no tuve tiempo para pensar, ya que de repente el suelo empezó a temblar de forma violenta y provocó que todos nos levantáramos al segundo. Posé mis dos manos en la pared para intentar mantener mi equilibrio y en la luz se inició un parpadeo tenebroso, consiguiendo que el miedo invadiera mi cuerpo en una oleada. De la nada, un mareo aleaotorio apareció en mi mente y cerré los ojos, confundida y para que se pasara. Los pacientes gritaban sin cesar y los llantos también comenzaban a irritar.
La poca luz que había fue perdiendo su intensidad hasta que finalmente se apagó, y quedamos en completa oscuridad. Los gritos aumentaron y otro mareo inundo mi mente, dejándome un poco desorientada hasta que unas manos se posaron encima mi cintura, sintiéndome segura al momento con su presencia. Su rostro se acercó a mi oreja y respiré profundamente, intentando calmar mis nervios.
- Tranquila, todo saldrá bien, vamos a salir de aquí.- susurró y subió su cabeza para besar mi cabeza con rapidez.
Entre la oscuridad, pude distinguir a los tres chicos restantes, juntos y mirando su alrededor con temor y temblando. La mirada de Ashton se cruzó con la mía y me transmitió la seguridad que terminaba de tranquilizar mi cuerpo.
Desvié la mirada hacia arriba, ya que esas voces aterradoras se empezaron a escuchar y antes de que lo viera a venir, un gritó de mujer rebotó por las paredes provocando que mi mente se nublara por una oleada negra, acabando desmayada en los brazos de Luke.
Me encontraba en un sitio oscuro, y me extrañó sentir ese ambiente de hogar, apacible y cálido. De repente, al final de ese pasillo apareció una luz detrás de una puerta, para dejar salir un pequeño cuerpo el cual corrió hasta entrar en otra habitación. Lo seguí curiosa y cuando entré donde había ido, me hallé en un dormitorio de matrimonio, con dos personas en esa cama durmiendo. La pequeña figura hizo despertar a una de las figuras y yo por inercia di un pasó hacia atrás, sin saber si podían verme o no.
- ¿Qué ocurre princesa?
- Ellos.
La figura suspiró y abrazó a lo que parecía ser una niña pequeña, no más de cuatro años. Observé la escena confusa, sin entender que sentido tenía conmigo o con los chicos. Mi cerebro empezó a programar teorías posibles para entender la situación, sin embargo dejé de pensar cuando la otra figura se alzó de la cama para acariciar a la supuesta niña, y me paralicé. Mi alma se me congeló por completo al ver que esa sombra negra contenía mi rostro, era yo.
No pude analizar bien la imagen ya que todo desapareció de mi alrededor, no obstante quedé completamente anonadada ante lo que había visto hacía segundos.
¿Qué significaba esa visión?
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larga vida a la música.
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Asylum #Wattys2018
FanfictionSegunda Temporada de: Room 307. Pd. Se recomienda leer la primera novela para entender detalles y la historia de los personajes. Aunque sois libres de leer, un saludo.