Capítulo 16

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Jon y Javier habían sido los únicos en poder donar sangre, los demás por desgracia no eran compatibles, todos se quedaron esperando a que Luz saliera de la intervención. Javier había intentado que a Luz le hicieran una compatibilidad genética, pero sin el consentimiento de la joven y sin una orden judicial aquello no era posible.

En el pasillo estaban divididos en dos grupos, por un lado Silvia, Javier y Clara discutían sobre la improbable posibilidad de que Luz fuera realmente Ana, pensando que la joven había mentido a todos, aunque aún no sabían el motivo, ¿quizás por el dinero de los Lasierra?

Por otro lado, los cuatro más jóvenes, Ainhoa, Jon, Sara y Leire esperaban nerviosos noticias, Jon a veces hacía algún comentario, lo que generaba alguna charla con Sara, Leire intervenía a veces, sobre todo cuando los más jóvenes querían saber más cosas de Luz, la única que se mantenía al margen de ambos grupos era Ainhoa, que se abrazaba a sí misma esperando noticias.

Una hora más tarde, Luz era pasada a planta, estaba dormida por culpa de la sedación, les habían prohibido entrar todos en la habitación, pero aún así todos terminaron dentro. Leire quería entrar, pero Javier y Silvia deseaban entrar para averiguar la verdad, al no ponerse de acuerdo entraron los tres, Jon y Sara entraron también, quedando únicamente Clara y Ainhoa fuera, pero a los cinco minutos Clara decidió que si estaban todos dentro ella también iría pues quería saber si era su sobrina, la novia de su hija o quién era aquella joven. Ainhoa fue la única en quedarse fuera, hasta que escuchó que comenzaba a despertarse que no lo pensó y entró también

-¿Mamá? -Luz estaba aturdida aún por la medicación-. ¿Qué ha pasado? Me duele la cabeza...

-¿Ana? -preguntó Silvia con apenas un hilo de voz, no queriéndose hacer ilusiones

-¿Ana? Sí que he tenido que liarla para que no me llames terremotillo -Luz hizo una mueca de dolor cuando intentó reír

Silvia miró a Javier que había comenzado a llorar al escuchar aquellas palabras, "terremotillo" así la llamaba Silvia siempre por ser tan inquieta, Ana siempre se quejaba de que solo la llamaba por su nombre cuando estaba enfadada con ella.

-¿Quienes son? -preguntó Luz mirando al grupo reunido

-Soy yo... Jon... -dijo su hermano acercándose

-¿Jon? No es posible... él tiene cinco años... -Luz miró a todos los presentes, reconocía a Clara y sus padres, aunque estaban cambiados, ¿pero quienes eran los demás?-. ¿Qué está pasando?

Las pulsaciones de Luz comenzaron a subir al ponerse nerviosa, una enfermera llegó y los sacó a todos del lugar. A Luz le habían dado un calmante y se había vuelto a quedar dormida

-¿Qué hace aquí Martínez? -preguntó Clara

-¿Lo traes? -preguntó Javier

-Sí, mi sargento. Todo lo que me pidió -Martínez le entregó una bolsa

-¿Qué es eso? -preguntó Silvia

-Voy a coger su ADN y lo analizarán en el cuartelillo, no pienso esperar más para saber si es mi hija o una impostora -dijo Javier entrando en la habitación

-¿Lo vas a permitir? -preguntó Ainhoa a Leire-. Me parece una invasión a sus derechos

-Luz no recuerda nada, los recuerda a ellos, ya se sabe todo... Luz no soportaría que sus padres la rechazaran de nuevo...

***

Había pasado una semana desde que Luz había salido del hospital, según los médicos tenía el cerebro inflamado y de ahí las lagunas que tenía. Silvia y Javier se habían llevado a Luz a casa, habían recuperado a su hija.

Huida hacia delanteDonde viven las historias. Descúbrelo ahora