Recuerdo muy bien aquella noche, aquella en la que besaste mi frente desprevenidamente.
Nos despedimos, y antes de poder entrar a mi casa, de repente preguntaste si olías a marihuana. Simplemente me acerqué a olfatear tu ropa de forma inconciente y en segundos me volví tímidamente alegre.
Me arrepiento mucho de no haberte podido decir, lo mucho que eso me hizo feliz.
Si pudiera ese día repetir, no te dejaría ir.(Ignorando todo, y el hecho de que para intentar conseguir algo de mí, tuviste que todo el tiempo, mentir.)
Cafeína para el papel. 🥀
Isa.