XVIII: First month

326 17 93
                                    

«El amor es algo eterno, el aspecto puede cambiar, pero no la esencia»

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.

«El amor es algo eterno, el aspecto puede cambiar, pero no la esencia»

-Jeff Zinnert.

─《♡》─

La rubia se levantó gracias a los rayos de sol que entraban por la ventana, frotó sus ojos y los abrió con lentitud, intentando acostumbrarse a la luz. Se sentó en la cama y frunció el ceño al no ver al pelinegro por ningún lado.

Notó que seguía en ropa interior y, con un suspiro, se levantó para ir hacia su mochila para buscar su pijama y ponérselo. Luego, tomó su celular de la mesita de luz y se sentó en la orilla de la cama, debatiendo entre ir a buscar al pelinegro o acostarse a esperarlo (seguir durmiendo).

Iba pararse, cuando por la puerta entró el pelinegro con una bandeja con el desayuno y un ramo de flores. Se miraron con una sonrisa, él dejó la bandeja sobre la cama y se acercó a besar sus labios.

─Feliz primer mes, mi amor. ─le besó la frente.

Ella sonrió con sus ojos brillantes.

─Feliz primer mes, Juggy. ─dejó un besito sobre sus labios. Giró su cabeza para ver la bandeja─ ¿Desayuno en la cama?

─Sip. ─fue hasta la bandeja y la acercó a ella.

Ambos se sentaron en la cama, acomodándose para desayunar. Sobre esta habían hotcakes de chocolate, fruta picada, jugo de naranja y un pote de Nutella. El pelinegro tomó el ramo de flores que estaba sobre la bandeja y se lo tendió a la rubia.

Ella lo tomó y las abrazó, oliendo los tulipanes y las margaritas.

─Son hermosas, Juggy, gracias. ─murmuró.

Él dejó un beso sobre su frente.

─Debo confesar que entré en pánico porque no sabía si las florerías hacían envíos hasta aquí, pero resulta que sí. ─ambos soltaron una risita.

Comieron su desayuno entre sonrisas, risas y besos robados llenos de chocolate.

─No puedo creer que hayas untado los hotcakes de chocolate con Nutella. ─rió el pelinegro, viendo la boca de su novia totalmente manchada de chocolate.

─Soy adicta al chocolate, sorry. Fue tú idea poner un pote de Nutella en la bandeja, me tentaste y yo tengo poco autocontrol. ─se encogió de hombros, soltando una risa suave.

─Ahora estás toda manchada. ─murmuró él.

─Mhm... ¿Cómo me limpiaré? ─sus miradas se conectaron.

little innocent | bughead #1Donde viven las historias. Descúbrelo ahora