CARPE DÍEM ✔️

Capítulo 10

—Darya, ya es tarde.

—Cinco minutitos más...

—Darya; debes estudiar para el examen de admisión.

—Diez minutitos más...

—Darya, tu amiga está aquí. Despierta.

—Quince minutitos más.

—¿Por qué le vas aumentando?

—Veinte minutit...

Yyy, listo. Jora me quitó las sábanas de encima. Me siento en la cama y lo miro con clara molestia. ¿No podía dejarme dormir treinta minutitos más?

—Haré pasar a tu amiga.

Me levanto con pereza y voy al baño a lavarme la cara, cuando regreso Corina me está esperando en la cama.

—¿Por qué no has ido al colegio?

—Estoy enferma— respondo sin dar detalles.

—Si te mueres me dejas tu herencia.

Traté con todas mis fuerzas de ignorar el comentario, y cuándo porfin lo logré. Pregunta algo de lo cual temo como vaya a reaccionar cuándo responda.

—¿Cuándo vas al colegio?

—No iré.

—¿Por?

—Estudiaré virtual.

—Por supuesto, sí es que la niña rica siempre debe estar presumiéndole sus privilegios a todo el mundo ¿no?

—Me cambié a un colegio público por tí; esto lo estoy haciendo por mí Nina. Lo único que espero es que me apoyes.

—Siempre, Darya. Siempre tienes que ser la mejor en todo fuera de la escuela; porque que no se te olvide que eres una puta burra para los estudios. Te fuiste a París sin mí; ni siquiera me preguntaste si quería ir por lo menos por decencia.

Siento cómo van cayendo los pedacitos de mi corazón uno a uno, no pensé que fuera a decir esas cosas. Mucho menos por decirle que iba a cambiar de colegio.

—Solo son dos años hasta la universidad Corina; y no puedes permitirte un viaje a París.

—¡PERO SOY TU MEJOR AMIGA! ¿Ahora me vas a decir que por estar enferma te cumplieron otro capricho?

—Estás siendo egoísta.

—Y tú estás siendo una mala amiga ¿y sabes que más eres? Una inservible buena para nada, que solo vive del dinero que puede darle su papi el mafioso porque nunca podrías ganar algo por tu propia cuenta. Eso es lo que eres; una asquerosa que no valora a las personas que la soportan. O dime, Darya ¿qué es tan importante para que dejes la escuela?

—Tengo cáncer — las palabras salen de mi garganta y son como cuchillos que en vez de salir para herir a alguien más; se quedan atorados cortándome a mí misma.

—Pues ojalá y te mueras; en este mundo no hace falta gente como tú y como la escoria de tu familia. ¿Te crees que eres la única que tiene problemas? ¿Te crees que eso es grave? No lo es, es algo que le puede pasar a cualquiera y el que te pase a ti debería servirte para que entiendas que no tienes la vida resuelta por tener dinero.

—Nina yo...

—Nina nada, no me vas a dar lástima con eso. Me fallaste Darya. Así que esto es lo menos que te mereces. Además ¿Por qué hay un puto león en tu casa?

—Señorita, le pido por favor que se retire — Jora aparece en el umbral de la puerta con los puños cerrados.

—¿Vas a dejar que me corran?— me pregunta llorando.