Capítulo 5

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- A-Yuan - repite Lan Zhan, y por fin sus ojos miran al alfa frente a el - ¿Puedo?

Hay un brillo en los ojos de Lan Zhan y en su voz se escucha una pizca de desesperación.

- Por supuesto, A-Yuan mira, te presento a Lan Zhan, no es un hermosura - Sonríe.

Wen Yuan levanta su carita del pecho de Wei Ying, observa unos segundos al hombre vestido de blanco, olfatea un poco y siente de nuevo el aroma delicioso, ahora no parece aterrador.

- Hola, A- Yuan - la voz de Lan Zhan es tan dulce al saludar al pequeño.

A- Yuan lo saluda con su mano diminuta.

- Bien, ve un momento con el - Wei Ying lo alienta.

El pequeño duda un momento, pero extiende sus brazos, Lan Zha prácticamente lo arranca de los brazos del Alfa y lo acurruca contra su pecho, dejando suaves caricias en su espalda, su Omega está casi complacido pero aún quiere bañar al niño en sus feromonas. Wei Ying es rápido para descubrir que algo molesta aún al Omega.

- ¿Sucede algo?

- Bueno, yo...

- ¿Tu?

- Yo - Suspira- ¿puedo perfumar a Yuan?

Wei Ying esperaba cualquier cosa menos eso, el perfumar a alguien era un acto muy privado, que sólo se hacía entre familiares y vínculos muy fuertes, es más es una regla establecida en Gusu Lan, pero Wei Ying no puede negarle nada a Lan Zhan.

- Por supuesto, pero no acá, hay mucha gente alrededor, sígueme.

Lan Zhan lo mira confundido, pero lo sigue con A-Yuan en brazos, caminan hasta alejarse lo suficiente del bullicio de la gente, el lugar donde se detienen esta completamente solo, hay una enorme piedra y Wei Ying le indica que tome asiento, el Omega obedece, y mira al niño entre sus brazos que lo mira con ojos muy abiertos.

Para Wei Ying, el poder admirar esta imagen de Lan Zhan con un niño en brazos es el mejor regalo que ha tenido en mucho tiempo, decide sentarse a la par del Omega y admirar más de cerca ese momento tan íntimo, el Omega empieza a dejar salir las feromonas, sus labios tarareando una canción que Wei Ying conoce muy bien, mientras una de sus manos acaricia al pequeño Yuan, es tanta la concentración que no se da cuenta que también baña al alfa en sus feromonas.

Luego de un rato, A-Yuan está a punto de quedarse dormido, pero su estómago gruñe, ocasionando que se rompa las atmósfera tranquila.

- ¿Tienes hambre A-Yuan? - Wei Ying pregunta, pero no hay espacio para que el pequeño responda- Hace no mucho tomamos el desayuno, bueno, no importa... Ven Lan Zhan te invito a comer.

Lan Zhan deja a Wen Yuan en el piso, se tambale unos segundos, pero luego sus pasos son firmes, van caminando por las calles llenas de vendedores ambulantes, uno en especial parece llamar la atención de A-Yuan, tanto alfa como Omega lo notan, Wei Ying lleva al niño hasta el vendedor y se agacha para estar a la altura del pequeño.

- ¿No son bonitas?

- Sí- contesta A-Yuan

- ¿No huelen bien? - El pequeño asiente.

- Por supuesto que se ve bonito y huele bien, debería comprar uno, joven maestro- el vendedor interrumpe.

- ¿Quieres uno?

Ante la pregunta de Wei Ying, los ojitos del pequeño se iluminan como dos enormes soles.

- Si - contesta con ilusión.

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