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A la mañana del día siguiente, jueves, tuve clase de educación fisica. En la piscina hice varios largos de cincuenta metros. Gracias al duro ejercicio, me quedé como nuevo y se me despertó el apetito. Devoré un copioso almuerzo en un establecimiento donde servían menús. Después, cuando me encaminaba a la biblioteca de la facultad de literatura para hacer unas consultas, me encontré a Kim Seokjin. Iba acompañado de una chica bajita y con gafas. En cuanto me vio, fue a mi encuentro.

-¿Adónde vas? -me preguntó.

-A la biblioteca -dije.

-¿Por qué no te vienes a almorzar conmigo?

-Ya he comido hace un rato.

-¿Y por qué no comes otra vez?

Al final, Seokjin y yo entramos en una cafetería del barrio; Jin se comió un arroz con curry, y yo me tomé una taza de café. Llevaba una camisa blanca de manga larga y un chaleco amarillo de lana con peces bordados, un fino collar de oro y un reloj de Walt Disney. Comió con apetito el arroz con curry y bebió tres vasos de agua.

-Estos días no has estado por aquí, ¿verdad? Te he llamado un montón de veces -comentó Jin.

-¿Querías algo en especial?

-No, nada. Hablar contigo.

-¡Ah! -musité.

-¿Qué coño significa ese iAh!»?

-Nada. Es una expresión -respondi-. Dime, habido algún incendio últimamente?

-No. Y mira que aquél fue divertido. Apenas hubo daños y el humo fue muy impactante. Un incendio así está bien.- Dichas estas palabras, volvió a beber agua. Luego suspiró y me miró fijamente.

-Jungkook, ¿qué te ocurre? Pareces atontado. Ni siquiera enfocas al mirar.

-Nada grave. Acabo de volver de viaje y estoy cansado

-Parece que hayas visto un fantasma.

-Ah, si?

-Esta tarde tienes clase?

-Si, de alemán y religión.

-¿Y no puedes saltártelas?

-La de alemán, imposible. Hoy tengo examen.

-¿A qué hora terminas?

-A las dos.

-¿Quieres ir a tomar una copa cuando salgas de clase?

-A las dos de la tarde? -pregunté.

-No está mal para variar. Tienes mala cara, Tómate una copa conmigo y verás como te animas. Y yo lo mismo. También quiero tomar una copa contigo para ver si me animo. ¿Qué te parece?

-Vayamos de copas, pues. -Solté un suspiro. - Te espero a las dos en el patio de la facultad de literatura.

Después de la clase de alemán, subimos al autobús, fuimos hasta Incheon y entramos en un bar llamado DUG, situado en uno de los subterráneos de detrás de la librería Hanmi, donde pedimos dos vodkas con tónica.

-Vengo a veces. Aqui no te sientes incómodo bebiendo durante el dia.

-¿Tienes por costumbre beber durante el día?

-No, sólo a veces -Hizo tintincar el hielo del vaso-. A veces, cuando el mundo empieza a angustiarme, me paso por aquí y me tomo un vodka con tónica.

-El mundo te parece angustioso?

-A veces -dijo Jin-. Yo también tengo problemas.

-¿Cuáles son tus problemas?

Triángulo Amoroso- JinKook/KookMin✓Donde viven las historias. Descúbrelo ahora