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Se sentía completamente mierda al estar lejos de su mate,Enid sentía como lentamente sufria en una agonía que se encargaba perfectamente de hacerla sufrir de la firma mas silenciosa y dolorosa posible al igual que ella podia sentir el como sufria su amada,debido a la marca fresca la conexión era demasiada,podia jurar que escuchaba el lamento a solas que su dama tenia y eso la hacia sentir inquieta,buscaba la forma de salir del lugar pero sabia que su madre la encontraría volviendole nuevamente a la tortura,en la ojiazul se podia notar el dolor como si poco a poco se marchitara,su cabello estaba completamente desarreglado y su mirada se tornaba agotada.

—¿Comiste el pan que te di cachorra?–Pregunto su padre mirándola con tristeza.

Era el cuarto día desde que la habían alejado de su novia y su padre era el único que aun tenia tacto con ella,por las noches cuando Esther dejaba la casa para vigilar al resto de la manada Murray lo aprovechaba para darle comida a escondidas pero la rubia jamas daba bocado alguno y eso lo destrozaba por completo,el podia notar como su hija lloraba de vez en cuando luciendo como un cachorro sin dueño,los ojos azules de su pequeña ya no resplandecian como el día en que anunico a la pelinegra como su mate en aquella pelea desafortunada que dio paso a todo lo sucedido,en estos días podia ver mas como su cachorra se volvia assutadisa poniéndose alerta de cualquier amenaza posible,cada que la puerta se abria ella soltaba un gruñido a modo de defensa,se notaba tan alterada que a Murray lo hacia sentir tan culpable.

Miro en silencio a su hija analizandola de a poco,¿Cuando su cachorra perdió ese brillo?,el cabello que siempre peinaba con tanta dedicación y cuidado ahora estaba desordenado,su piel se notaba áspera y fria perdiendo la calidez junto con su suavidad,sus labios estaban partidos,sus ojos los cuales brillaban antes ahora estaban tan opacos que parecía haber muerto en vida que si bien lo pensamos estaba muriendo de forma lenta,tenia ojeras ya que sabia que no dormia puesto que se dedicaba a llorar en las noches por aquella que es su novia,su ropa ers un desastre y se podia notar algo delgada,su pequeña cachorra estaba tan mal.

—No quiero comer padre.–Murmuro después de unos minutos la ojiazul con voz apagada.

—Pero...cachorra...–Farfullo el hombre notando los ojos cristalinos de su hija asi comprendiendo.–Lo entiendo...volvere mañana.

Murray se levanto dando un suspiro de tristeza,miro a su pequeña y le dio un beso en la frente para asi retirarse el hombre,cuando los ojos azules notaron que estaba sola se tiro a llorar,se podia escuchar el llanto lastimero desde el otro lado,Enid sollozaba mientras muy apenas se abrazaba a si misma debido al mínimo moviento que permitían las cadenas,quería tenerla de nuevo,quería volver a mirar ese semblante oscuro qué si bien se notaba inexpresivo sus ojos oscuros le decían mas de lo que las palabras de la más baja llegaban a decir,eso era todas las noches desde que llego aquí.

¿Como su madre podia ser tan mierda?,era lo mismo todos estos días llegaba exgiendo que marcara a alguien de la manada a algun hombre sumiso,su loba aun gruñia en desaprobación cuando su madre entro con un hombre sumiso que no tenia mate aun y se ofrecía a ser marcado,en cuanto entraron Enid le gruño mostrándose amenazante ante el hombre quien huyo del lugar,aun recordaba como quien se hacia llamar su madre se dedico toda esa tarde a golpearla haciéndole que le doliera el cuerpo de forma agonizante donde podia asegurar que en esos momentos llegaría a morir.

Mientras las lagrimas caían de sus ojos azules unos sollozos y lamentos escapaban desde su garganta donde en un punto fijo se dedicaba a mirar sumergida en su llanto con su mente vengado por tiernos recuerdo que le hacían romperse mas ante el dolor de estar lejos de ella,porque realmente quería volver a su lado,besarla y amarla,pero ahora solo se podia sumergir en aquellos recuerdos que le recordaban a su bella dama.

Era el primer día después de la marca y después de despertar acurrucada con su linda novia,tomaron una ducha donde volvieron a sucumbir a sus mas bajos deseos mientras se bañaban,cuando terminaron se arreglaron un poco con ropa cómoda,era fin de semana después de todo,Enid se sento en la cama de la morena palmeando su regazo para que la mas baja se sentara en el cosa que hizo,la abrazo por la cintura dándole un tierno beso en el cuello palido en donde por primera vez en el día miro notando el como tenia marcas y chapetones haciendo que su rostro se ruborizara hasta las orejas.

—¿Yo hice eso?–Pregunto acariciando una de las marcas.

—Al igual que el resto que adornan por toda mi anatomía.–Comento la pelinegra indiferente mientras se acurrucaba en el cuello de su novia.

Sinclair agacho la mirada algo avergonzada notando la marca que ahora adornaba en el cuello palido,la marca donde la reclamaba como su mate ,su loba aullo con felicidad absoluta moviendo su cola mientras se sentía tan plena por ello,dejo salir una sonrisa de satisfacción y paso su lengua por la marca creandole un escalofrío terriblemente satisfactorio en la pelinegra quien suspiro con tranquilidad,acurrucandose aun mas en el cuerpo de la más alta sintiendo la paz absoluta calmarle todo en su miserable ser y cuando sintio los dulces besos en la marca podia jurar que sintió a su dama formar una sonrisa en su cuello.

—Te amo Ma chéri.–Murmuro con una voz suave dejando un último beso en la marca.–Te amo con devoción completa y con toda plenitud Merli.

—Tambien te amo Cara mia.–Respondio besando el cuello de su amada.–Te amo con cada parte de mi miserable alma,hasta mi último suspiro Niddie.

Se acurrucaron perdiendo la noción del tiempo,simplemente se dedicaban a perder el tiempo con besos y cariñitos,era todo lo que estaba bien,estaban juntas y querían estar así para siempre,lastima que no fue así,pero ese momento,ese lindo momento era algo que le hacia sentir de maravilla a Enid pues recordar como su amada se desembolvia tan cariñosa era simplemente lo único que la hacia sentir tan bien.

Enid dejo salir otro sollozo mientras las lagrimas rodaban por sus mejillas sin control alguno,se sentía tan sola,sentia como poco a poco la vida se le iba puesto que estaba lejos de quien amaba,sentia una gran presión en su pecho,un dolor indescriptible, la quería de vuelta,quería ver esos ojos oscuros que tenían ese brillo tan peculiar hacia ella,moria por ver las mejillas pálidas tornarse un poco carmesí,sentir como su tacto frio se desvanecia poco a poco debido a la calidez que ella tenia,extrañaba acurrucarse en las noches abrazando la cintura de su novia con un agarre algo posesivo pero tierno mientras perdia la noción del tiempo.

Dejo escapar un lamento,incluso su loba se sentía tan abatida que nisiquiera tenia la dicha de moverse,solo se quedaba hecha bola en sus adentros y es que era más que claro puesto que estaba lejos de quien era su felicidad,estaba lejos de aquella chica que hizo olvidarle todas las cosas que su madre le hizo en su infancia,pero ahora que estaba lejos de ella se sentía como si habia estado las nubes y tenido una caida de un punto tan alto que le destrozo cada parte de su ser,porque nisiquiera conseguía encontrarle alguna lógica a esto,ella solo quería volver a ver a la más baja llenandola de besos y caricias hasta mas no poder,en lo que resto de la noche solo se dedico a lamentarse murmurando entre llanto el nombre de su amada sufriendo esta agonía como todas las noches anteriores.

Deseo Silencioso ▪︎Wenclair ▪︎Donde viven las historias. Descúbrelo ahora