Cuando se despiden del señor Wilkins, Auna, Kai y Asher vuelven al lugar donde el carro del segundo estaba reposando.
—Auna, fue todo un placer conocerte. Y Kai, cuida bien a la chica.—Se despide Asher, pasando su larga lengua por la mejilla de la morena, logrando que esta haga una leve cara de desagrado, pero es disimulada por una risita.
—Creeme, amigo, Auna está en los mejores brazos.—Responde con diversión el contrario.
—Adiós, Asher.—Se despide con sutileza Auna.
El carro comienza a moverse, y poco a poco, la imagen del chico reptil va desapareciendo en la vista de Auna. Durante todo el camino de regreso Auna no evita pensar en aquellas palabras del cíclope mayor; "aquí era donde entrenábamos".
La chica se estaba percatando de que tal vez no conocía bien a sus padres. "¿Por qué están involucrados en este lugar?", "¿Cuál será el verdadero pasado de mis padres?", "Y, ¿por qué nos ocultó esto?" Esas eran las preguntas que más rondaban por la cabeza de Auna entre muchas. Cuando ya llegan a la mansión Williams, Kai no tarda en ayudar a la chica en bajarse del carro, para después de llevar a los dos pájaros gigantes a su lugar, entrar en la casa.
—Al fin llegan. Me estaba empezando a preocupar.—Habla Andrómeda al ver llegar a los dos chicos.—Venga, sentaos, la comida ya está hecha.
Todos estaban ya comiendo cuando Kai y Auna se unieron. El silencio estaba de parte de los dos chicos, quienes compartían una que otra mirada.
—Magnus Wilkins nos ayudará.—Pronuncia con rapidez Kai, con la mirada perdida en el plato de comida.
Escuchan como unos cubiertos caen de golpe en el plato, haciendo que todos dirijan su mirada a Andrómeda Williams.
—¿Magnus? Kai, ese señor no puede luchar. Ya han pasado años y todavía sigue afectado por lo sucedido con los Miller, sin nombrar, que su esposa e Igor dependen de ella, ¿qué pasaría si en medio de la batalla...– Es interrumpida por su hijo.
—Magnus no luchará, madre, nos ayudará a entrenar.—Responde, intentando tranquilizarla.
—Hijo, de todas formas lo estarás involucrando.—Esta vez habla Sorpurus.—Además, ¿qué pensará Igor?
La conversación es interrumpida por unos golpes en la puerta principal, y Kai, quien presentía lo que iba a suceder, se levanta con tranquilidad, yendo a donde provenían los ruidos bajo la atenta mirada de todos. Cuando abre la puerta, Kai es embestido por una figura, cayendo ambos al piso. La familia y demás se alteran al instante, sobretodo Auna, quien se levanta con rapidez fue la primera en ir a ver lo que sucedía, y al ver la escena frente a ella, aquel cosquilleo volvió a parecer, pero esta vez, de forma protectora.
Kai era golpeado por Igor, quien estaba a horcajadas del rubio dándole una y otra vez puñetazos, lo extraño de todo esto, era que Kai no se defendía. Auna no dudó ni un solo segundo para agarrar uno de los brazos de Igor, quien al sentir aquel ardor que desprendió la morena soltó un gran grito de dolor, apartándose enseguida de encima del rubio.
ESTÁS LEYENDO
Tras el espejo dorado [PROXIMAMENTE EN LIBRERÍAS]
Science FictionDolor. Eso era lo único que sentía Auna tras la pérdida de sus padres. Un doloroso año ha pasado desde que Victoria y Cristian Miller fueron encontrados muertos por un terrible accidente automóvil. Un año desde que Auna y Lydia Miller solo podían s...