Capítulo 15

7 2 0
                                    

{Quédate un momento así
No mires hacia mí
Que no podría aguantar
Si clavas tu mirada
Que me hiela el cuerpo
Me ha pasado antes
Que no puedo hablar
Tal vez pienses que estoy loco, y es verdad: un poco
Tengo que aceptar, pero si no te explico
Lo que siento dentro
No vas a entender cuando me veas llorar
Nunca me sentí tan solo
Como cuando ayer
De pronto lo entendí mientras callaba
La vida me dijo a gritos
Que nunca te tuve y nunca te perdí
Y me explicaba
Que el amor es una cosa
Que se da de pronto en forma natural, lleno de fuego
Si lo forzás se marchita
Sin tener principio, llega a su final
Ahora, tal vez, lo puedas entender
Que si me tocas se quema mi piel
Ahora, tal vez, lo puedas entender
Y no te vuelvas si no quieres ver
Que lloro por ti
Que lloro sin ti
Que ya lo entendí
Que no eres para mí.}

Ahora comprendo que todos podemos tener más de un amor.

Cada uno de ellos es único y diferente, no puedes sentir dos veces lo mismo, todas las relaciones interpersonales necesitan bases sólidas para mantenerse, al menos de que ambos decidan que esa relación sea algo espontáneo y pasajero.

Y esa fue mi relación con aquel chico que me hizo quererlo y entenderlo, juramos que lo nuestro no sería algo que acabaría en un par de días, creíamos que podríamos mantenernos juntos toda nuestra vida, pero toda historia tiene su final.

Hay que aceptar la realidad, todas las cosas se terminan desgastando, por esa razón tenemos que alejarnos y buscar a alguien que esté en nuestra misma sintonia, que tengamos cosas en común, que nos sintamos cómodos con su compañía, etc.

*****
—Alguien no ha parado de observarte durante toda la semana, parece que el amor a resurgido de nuevo.

Mis ojos se fijan en la personita que esta enfrente de mí.

—No deberías estar suponiendo cosas solo por lo que tus ojos metiches observen.

Su cara se vuelve roja de vergüenza o de sorpresa, no lo sé con certeza, ella es difícil de descifrar en algunas ocasiones.

—Me siento ofendida, Camila.

Me ve y se le dibuja una sonrisa en sus labios, me guiña un ojo y gesticula la palabra "MALA" lentamente, apuntando a mi dirección.

—Deja de ser tan exagerada y dramática, Celeste.

—Como si tú no fueras así.

Se queda sin hablar por unos largos segundos, baja la mirada y vuelve a mirarme, intenta hablar pero no lo hace, hasta que decide hacerme una pregunta.

—¿Sigues sintiendo algo por Emiliano?

Me quedo en blanco, mi cerebro deja de funcionar y mi corazón deja de latir por una fracción de segundos (claro que soy una exagerada y dramática, eso es parte de mi ser), mi cuerpo se tensa y de pronto me siento incomoda, después de ese suceso mi sistema vuelve a la normalidad junto con mi calma.

—No, ya no siento lo que un día aprendí a sentir por él.

—¿Eso significa que ya no lo quieres?

Su voz se escucha como un fino susurro.

—Pensé que su relación duraría para toda la vida, por ustedes creía en el amor, lo digo de verdad, Cam.

Sus ojos se vuelven llorosos, parece una niña de 5 años, haciendo pucheros.

—Ya no lo quiero, él ya no me aguarda en su corazón, lo nuestro ya acabó.

—Pero... su historia aún no acaba, yo lo sé, esto es solo una pausa, es el giro de la trama, en algún momento ustedes volverán a estar juntos.

—Creo que ver tantas películas y leer tantos libros de romance juvenil te han ido afectando con el paso del tiempo. Una cosa es que hayamos coincidido en el mismo lugar y en el mismo tiempo, otra cosa es que ambos deseemos estar juntos nuevamente en una relación.

—Una historia como la de ustedes dos no se vive todos los días, solo recuerdalo.

***
3 años antes


Me estoy acostumbrando a hablar todos los días con el chico que vive en la Luna.

Llevamos un mes hablando, platicando de cosas triviales y cosas importantes para cada uno, nos tenemos confianza y tenemos cosas en común.

Emiliano Pereyra: Tengo algo que contarte.

Camila Soto: Dime, tengo
curiosidad.

Me da un poco de pena.

Pero tengo que decirte que...

¿Qué cosa?

Me gustas.

A Través De Tu Mirada Donde viven las historias. Descúbrelo ahora