Reasong

SEIS

Jisung acababa de llegar a la escuela acompañado de Bogum.

Muchos estudiantes estaban curiosos, pues se habían enterado del incidente de ayer.

Mientras, Minho se encontraba en la cafetería con sus amigos, Changbin, Jeongin, y Hyunjin, quienes le estaban ayudando a planear cómo hablaría con el omega sin asustarlo o parecer desesperado, pues aún no olvidaba que sus partes humanas no se llevaban para nada bien.

—Tuviste suerte, yo también quisiera encontrar a mi destinado tan rápido— Comentó Hyunjin, un alfa.

—Yo ni que decir, soy beta, puedo elegir a quien sea.— Añadió Jeongin.

—Yo estoy bien así.— Murmuró Changbin, quien también es un alfa.

—Pero, ¿no podía ser alguien más?— Dijo Minho como si fuera un reclamo.

—¡Hey! No vas a negar que Jisung está muy bonito, tiene muy buen cuerpo-

Minho gruñó involuntariamente ante el comentario de su amigo Hyunjin.

—¿Me gruñiste?— Preguntó incrédulo.

—Lo siento, aún trato de controlarme.

—Cualquier alfa te hubiera dado un buen golpe si te escucha elogiar a su omega.— Comentó Changbin, riendo por la escena.

En medio de la plática, Minho reconoció el aroma que lo volvía loco, Jisung seguramente debía haber entrado a la cafetería.

Lo buscó con la mirada y lo que vio no le gustó para nada.

Jisung reía con sus amigos, mientras cierto alfa rodeaba discretamente su cintura.

—Contrólate, Minho.— Dijo Jeongin al ver la situación.

El pelinegro se recordó a si mismo que no quería armar un escándalo, pero su lobo sentía la necesidad de aventar de un golpe al alfa lejos de su omega.

—Creo que es buen momento para hablar con Jisung.— Se puso de pie, ignorando a sus amigos que le decían que no hiciera nada estúpido.

Jisung obviamente sabía de la presencia de Minho, pues desde que entró a la cafetería sintió su olor, queriendo inhalar profundamente de donde este viniera, pero lo ignoró, no quería verse desesperado.

Sintió el aroma a chocolate amargo cada vez más cerca y al levantar la mirada vio que el pelinegro venía hacia él.

Jisung estaba sentado en una mesa al lado de Bogum y frente a ellos sus dos amigos.

Fue algo sorpresivo para todos en la mesa y quienes estaban de chismosos el hecho de que Minho puso un brazo entre el rubio y el alfa a su lado, y empujó a Bogum para sentarse entre ellos, dedicándole una mirada de advertencia al mismo.

—¿Se te ofrece algo?— Jisung quiso sonar indiferente, pero sentía la calidez de sentir el aroma tan cerca.

—Sí. Hablar contigo.— El peli negro quiso sonar de la misma manera, pero definitivamente el aroma dulce lo estaba tentando a volver a poner su nariz sobre el cuello del omega e inhalar hasta quedar satisfecho.

—Habla, aunque no es manera venirte a sentar y empujar a Bogum.— Reclamó Jisung, viendo como su amigo estaba del otro lado de Minho.

—¿Podemos ir a otro lado?— El alfa pelinegro quiso arriesgarse, con suerte le decía que sí y podían terminar olfateando sus aromas de cerca en algún baño o salón que estuviera solo, o podía decirle que no y sentirse rechazado.

—¿A-ahora?— Jisung se puso nervioso ante la sugerencia, quería aceptar pero no quería hacerlo inmediatamente.

El timbre de entrada sonó, para su mala suerte.