∆ Cap X ∆ "Lágrimas de una princesa"

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< Portones del palacio >

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< Portones del palacio >

¡Vaya hasta que por fin te dignas a llegar Ikeni!__ llegó Karoma fulminado de enojo al oficial quien le dio una mirada confundido

__ Estaba haciendo mis deberes y si me permites tengo cosas que hacer__ estaba apunto de marcharse pero fue detenido al instante

__ Meterte y acostarte con la hija del rey__ se cruzó de brazos caminando hasta Ikeni__ vaya vaya que dirá el soberano al saber que su hija tiene encuentros a escondidas con un oficial __ soltó una carcajada maliciosa

__¡Cállate!__ alzo con enojo su voz __ como te atreves hablar así de la princesa!

__¡Los vi! Vi como la tenías entre tus brazos en el Nilo! __ dio un leve golpe en el pecho del soldado a lo que el la detuvo sosteniendo sus manos__ la besabas con tanta pasión pero y yo? yo que tanto te amo y te insisto y para que?!! Para ser despreciada!! __ intento golpearlo pero le fue inútil

__ ¡Baja la voz, te escucharán!__ dijo al sostenerla de las manos__ Ariadna es honrada y nunca nos hemos acostado pero admito que estoy completamente enamorado de ella __ sus palabras lastimaron a la morena aumentando su rabia y con ganas de gritar el crimen del soldado pero este la cayó al cubrir con su mano la boca de Karoma

Logro safarse del joven empujándolo con brusquedad
__ ¡El rey se enterara de esto!__ estaba decidida a contarle todo al rey dirigiéndose rumbo a la sala del trono pero fue alcanzada por el muchacho quien se veía preocupado por los siguientes actos de Karoma, retirándose su casco dio un suspiro

__ Estoy dispuesto hacer lo que sea pero por favor no le digas nada al rey __ insistió ikeni__ no quiero perjudicar a la princesa __ bajo un poco su rostro a lo que Karoma levanto lentamente con su mano sonriendo victoriosa esperando esas palabras del oficial

__ Tu mismo sabes que es lo que quiero Ikeni__ acaricio los brazos del chico con una sonrisa__ te quiero a ti!

La mirada de Ikeni había cambiado por completo a una tonalidad triste, aquel paseo en el Nilo con Ariadna que lo tenía tan feliz había desaparecido por las propuestas de Karoma, esos labios que sentía no eran los de su amada princesa pero tenía que hacer algo para que no fuera perjudicada con el soberano

__ Haré lo que me pides Karoma pero solo si me prometes que dejaras en paz a la princesa y nunca mencionaras lo que viste en el río nilo__ hablo serio el soldado

__ Sabes que soy una mujer de palabra ikeni__ dijo al guiñarle un ojo__ pero antes ya sabes lo que quiero que hagas antes guapo, rompele el corazón a la princesa Ariadna y dejaré todo por la paz __ le dedico una sonrisa colocando un beso en sus labios y prosiguió su camino hacia el harén dejando totalmente desanimado al pobre Ikeni

El noble soldado se dirigió rumbo a la sala de entrenamiento donde lo esperaba desesperadamente el general Bakenmut......

__ Otra vez tarde Ikeni! __ lo reprendió molesto al mirarlo y prosiguió a darle una espada

__ Disculpe general estaba
arreglando unas cosas con Karoma __ hablo no tan contento pero como era de costumbre Bakenmut no lo noto

__ ¡Vaya! hasta que por fin seguiste mis consejos y te lanzaras a los brazos de Karoma, que por cierto no está nada mal he __ dijo con una risa picaron el general a lo que Ikeni rodo los ojos incómodo

A las casi horas de anochecer Amonet había sido enviada para darle un recado al oficial Ikeni de parte de su señora Ariadna, el joven con una sonrisa asintió confirmando que iría de inmediato para encontrarse con la princesa y así fue

El quien ya la esperaba en los jardines del palacio ansioso y con ciertos nervios, noto a una hermosa mujer llegar al jardín dedicándole una tierna sonrisa corriendo hasta el, era Ariadna quien ya lo estaba abrazando colocando un cálido beso en sus labios

En la mirada de su amada pudo notar que tenía muchas cosas que contarle respecto a su abuela Yunet y por otra parte el hermoso día que habían pasado juntos en el río Pero esa sonrisa la acabaría en cuanto Karoma llegará para acabar todo de una vez, sin pensarlo dos veces Ikeni interrumpió a su princesa besándola de sorpresa acercándola a el, con sus fuertes brazos la rodeo por su cintura y al juntar sus labios la beso, la beso con tanto anhelo, ternura, como si fuera la primera ves que la estaba besando aprovechando cada segundo con ella

Al momento en que se separaron las mejillas de Ariadna se pusieron rojas como un tomate, Ikeni no la había besado así antes y antes de volver a besarlo todo se torno gris y frío para ella al ver cómo Karoma había llegado y colocándose en frente de ambos se unió a los brazos de su soldado, lo estaba besando con tanto deseo en frente de sus ojos pero lo que más le dolía era ver cómo Ikeni le correspondía cada beso a Karoma con la misma intensidad, sus lágrimas ya estaban invadiendo su bello rostro

__Oh princesa no me había dado cuenta que estaba aquí, le pido una disculpa majestad__ hablo descaradamente y nuevamente junto sus labios con el para luego dejarlos solos

Ikeni se maldecía por dentro en sus pensamientos por hacerle esto a su amada princesa quién lo miraba con tristeza y decepción limpiando las lágrimas de su cara

__ Disculpe princesa pero llevamos demasiado lejos está aventura__ dijo con una pequeña risa al hablar serio

__ ¿Una aventura? eso es lo que soy para ti?__ hablo lastimada por las frías palabras de aquel soldado

__ Usted fue un reto para mí y mire que uno muy grande__ río__ seducir a la hija del rey fue muy fácil, lástima que no pude hacerla mía ahí mismo en el Nilo

Una bofetada llena de decepción y dolor sono en el rostro de Ikeni pero el dolor que más sentía era el que estaba apunto de sentir, perderla para siempre

El corazón de Ariadna se rompía en dos con cada palabra dicha por parte de Ikeni, estaba hecha un mar de lágrimas ante el pero le era inútil parar, lo que sentía era verdadero, sus palabras eran dagas atravesando su corazón así que por última vez lo miro y se limito a decirle

__ ¡Nunca jamás me vuelvas a dirigir la palabra ni te acerques a mi imbecil!! __ Ariadna lo empujó con todo su dolor y corrió de inmediato para salir de ahí, no aguantaba ni un segundo más estar cerca de el, le dolía con toda el alma verlo y sentir lo que sentía por ese oficial

Por otra parte Ikeni golpeo con toda su fuerza la pared con su puño lastimandose, corría sangre por su mano pero no le importaba, le dolía el solo hecho de haberle dicho esas palabras a Ariadna y perderla, el rostro del joven soldado fue invadido por las lágrimas al momento en que ella se marchó, se marchó para ya no regresar nunca más a el....

Continuará

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