Los días pasaron dando por finalizada las vacaciones de Navidad. Alicia, Connor mi hermano y yo estábamos en el mismo vagón del tren para volver al instituto, acompañados de un gran silencio incómodo y tenso.
-¿Seguro qué estáis bien? -Nos preguntó Connor.
-Solo estamos preocupados por vosotros. -Añadió Alicia.
Diego los miró y les sonrió sin fuerza ninguna. No os preocupéis, estamos bien.
Mi mirada estaba perdida en el paisaje a través de la ventana cuando Connor me dio con el pie para que le prestara atención y poder preguntarme. -¿Rebelde?
Lo miré sin ninguna expresión en el rostro. -Estoy bien.
-¿Segura?
-Segura. -Diego me miró triste, pasó el brazo por encima de mis hombros y yo apoyé mi cabeza en él.
Llegamos al instituto para la hora de cenar. Todos los alumnos ya estábamos sentados cuando Dante se levantó comenzando a hablar. -Antes que nada, feliz año nuevo a todos. Espero que durante estas vacaciones no halláis perdido facultades. -La mayoría se rio, otros permanecimos en pleno silencio perdidos en nuestros pensamientos. -Que aproveche.
A mitad de la cena, me acerqué a los hermanos Milán para preguntarles. -Chicos, ¿habéis visto a Axel?
-Está allí. -Respondió Elliot señalándome a la derecha. Giré la cabeza para verlo pero él estaba muy centrado en la cena supongo...
Ben estaba al lado de Axel, cuando se dio cuenta que él ni si quiera me estaba prestando atención. -¿Por qué estás aquí y no con Sara?
-No te importa. -Respondió muy serio.
-Está bien... -La curiosidad le estaba matando pero sabía que no le convenía enfrentarse a un Axel enfadado.
Tras la cena, rápidamente me levanté para acercarme a Axel. -Axel espera. -Él se fue prácticamente corriendo. No sabía si no me había escuchado o si estaba pasando de mí.
Iba andando por los pasillos para ir a mi salón cuando me topé con Marcus.
-Sara, ¿cómo estás?-
-Marcus. -No tenía ganas de hablar y menos con él así que ni me detuve para seguir hacia delante pero él me cogió del brazo parándome.
-¿Estás bien? -Me preguntó.
Lo empujé para que me soltara. -Solo estoy cansada. -Sin decir ni una sola palabra más ni dejar que él me dijera algo más me fui.
Al entrar al salón Z, vi a Axel sentado en el sofá con la mirada perdida.
-Te he estado buscando todo la tarde. -Dije mientras me acerqué a él entusiasmada.
-Ya me has encontrado. -Respondió sin ánimo ninguno y sin ni si quiera mirarme a la cara.
Lo miré confundida. -Oye, ¿estás bien?
-Sí, solo ha sido un día largo. Nos vemos mañana. -Se levantó y empezó a subir las escaleras para irse.
-Axel. -No me dio tiempo a decir nada más. -Lo que me faltaba.
La puerta se abrió dejándome como Jade entraba con una gran sonrisa dibujada en la cara. -Hola reina malvada, ¿me has echado de menos? -Sin poder aguantar más, cogí un cojín, me lo puse en la cara y grité de rabia e impotencia.
Estaba ya con el pijama puesto a punto de dormir cuando me dirigí al baño de mi habitación al lavarme la cara. Me lavé primero las manos y cuando alcé la mirada para el espejo, empecé a tener recuerdos vivientes de lo que pasó en el granero cuando el agua del grifo empezó a echar sangre en vez de agua. Lo cerré rápidamente, volví a mirarme al espejo y empecé a llorar...
ESTÁS LEYENDO
Freedom
Ficção Científica¿metanimales? ¿asesinos? ¿espías? ¿cebos? ¿dioses? ¿experimentos? ¿amor? ¿amistad? ¿familia? ¿traición? Completamente todo y más en las aventuras de los medievales...