Mi champions favorita

La propuesta

24 de Abril del 2023

Llamaron a mi puerta mientras terminaba de vestirme. Hice saber que podía pasar quién quiera que fuese cuando terminé de ponerme la sudadera.

- Me voy a entrenar hermanita, ¿te llevo a algún sitio? - preguntó mi hermano al verme arreglándome para salir.

- En realidad si pudiese acompañarte sería perfecto.

- Estupendo. ¿Para que quieres venir conmigo? Es raro que vengas a verme entrenar.

- Vamos al coche y te lo cuento de camino. Y no voy a verte entrenar, no te sientas especial.

- Que graciosa eres, vamos al coche anda.

Nos montamos en el cohe mientras yo me aseguraba de que llevaba conmigo mi teléfono movil y cartera, además de mi portátil para seguir trabajando en el proyecto.

- Entonces explícame eso de que me acompañas.

- La noche de la semifinal bajé a tranquilizar a Vini durante el descanso - asiente, por lo que continuo con mi relato -. Cuando acabó el partido Ancelotti mandó a Lucas a darme las gracias, y de paso me dijo que si podría pasarme algún día por las oficinas para hablar con él.

- Hace mucho ya de la semifinal. ¿Por qué no te has pasado antes?

- Llamé para preguntar que día era conveniente ir, y en que horario.Me dijeron que como quería estar Florentino presente tendrían que fijar la fecha, y esa fecha es hoy.

- Si quiere estar Floren es porque es importante, Eta.

- Ya lo se. Estoy de los nervios.

- Tranquila que todo saldrá bien.

- Eso espero, que yo sepa no he hecho nada malo.

- Seguro que es algo bueno.

Después de un rato más de conducción llegamos a la ciudad deportiva, yo hecha un manojo de nervios y mi hermano riéndose de mi.

En el coche había dejado mi portatil con intención de quedarme hasta que teminara el entrenamiento en las gradas mientras avanzaba con mi trabajo, por lo que me quedé con las llaves, para poder acceder a él cuando lo necesitara.

- Yo me voy ya que he quedado con ellos antes de que empiece el entrenamiento - dije intentado tranquilizarme.

- Suerte, Eta. Seguro que es algo bueno, no estés nerviosa.

- Lo intentaré - dije mientras me despedía.

Caminé hasta la recepción, donde una amable secretaria de Florentino me indicó hacía donde debía ir.

Llamé a la puerta que la señora tan amablemente me había indicado,  y a los pocos segundos recibí la orden de pasar.

Abrí la puerta con la mano temblorosa, y cuando entré me sorprendió ver únicamente a Florentino y Ancelotti sentados en una gran mesa. Yo esperaba una mesa rodeada de gente importante que estaría todo el rato observándome sin yo poder hacer nada. Saber que nadie estaría mirando descaradamente a mi lado me tranquilizó. Yo no me sentía tan juzgable.

- Buenos días - saludé amable.

- Buenos días, señorita. Puede sentarse donde quiera - me indica Florentino.

Yo me senté en una silla enfrente de ellos. Se me quedaron mirando un rato hasta que Florentino habló.

- Lo primero que queríamos hacer de antemano es agradecerle los servicios prestados al club, y sobretodo al equipo.

- No fue ninguna molestia para mí. Al contrario, pueden contar conmigo para lo que necesiten.

- Se lo agradecemos, y de eso especialmente queríamos hablar con usted.