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Nuevos comienzos

19 de agosto de 2023

Hoy comienza la temporada contra el Almería. Todos estábamos deseando que llegara este momento, y los jugadores son los primeros en hacerlo.

- Si no hay dudas podéis ir saliendo a calentar - termino de escuchar las indicaciones de Ancelotti antes de salir hacia el banquillo.

- ¿Podría hablar contigo, Julieta? - me frena el paso Braim.

- Claro, ven conmigo al vestuario.

Entramos los dos y nos sentamos en el primer sitio que vemos, ya con el vestuario vacío.

- Es sobre Jude, le veo un poco disperso con el tema del idioma. Cada vez que el mister nos explica algo no lo entiende, y noto como se pone serio o entristece.

- Gracias por comentármelo, aunque somos totalmente conscientes de la situación. Pensaré algo para poder ayudarle, gracias de verdad.

- No es molestia. Espero poder ayudarle.

- Me alegra escuchar que os lleváis tan bien. Ahora a calentar que te lesionas.

***

Minuto 73 de partido cuando veo a Valverde correr por la banda, que se la pasa a Bellingham. Este ve a Vinicius en la frontal y lanza un pase que acaba en un golazo de Vini de vaselina.

Veo a Vini correr por la banda hasta el corner celebrando, y una vez enfrente de la cámara hace la celebración del chupete. Mi cara en esos momentos forma una sonrisa de oreja a oreja, que no pasa de saperivida para el banquillo merengue. Conectamos miradas y él me señala sonriendo.

Después de esto puedo asegurar que soy la mujer más feliz del mundo y que tengo a la mejor persona posible para formar una familia.

El partido acaba con tres goles del Madrid y uno del Almería. Cuando los jugadores van entrando en el túnel de vestuarios van siendo felicitados por los técnicos, incluida yo entre ellos.

- Congratulations Jude, what a begining of the season ( Felicitaciones Jude, vaya comienzo de temporada) - le digo al verle pasar.

- Thanks, Julieta. Who is your baby? (Gracias, Julieta. ¿Cómo está tu bebé?) - pregunta señalando mi barriga ya crecida.

- It's growing very fast (Está creciendo muy rápido) - comentó tocándome la barriga.

Después de unas pocas palabras más se va hacia el vestuario, y justo detrás veo entrar a mi brasileño.

Al verme se acerca y me planta un beso largo, del cual me tengo que separar para no llamar la atención de la gente.

- ¿Te ha gustado mi dedicatoria? - pregunta Vini.

- Me ha encantado, ha sido precioso.

- Que menos podría hacer por mi Julieta Jr.

- Deja de llamar así al bebé, no sabes si es niño o niña.

- Estoy convencido de que es una niña, una mini tú.

- Además, en el caso de ser niña no se va a llamar como yo.

- ¿Por qué no? A mí me parece un nombre precioso.

- Y lo es, pero no quiero que se llame igual. Ya puedes ir pensando nombres que pronto sabremos que es.

- Deja de ser tan previsora, ya tendremos tiempo de pensarlo - me intenta abrazar pero yo me separo.

- ¡Vinicius a la ducha!

- Vale, mi sargento - dice riéndose -. Te veo luego, Ju - deja un último beso en la barriga antes de irse.

***

Abro mi puerta para que puedan entrar los jugadores, y poco a poco se va llenando la pequeña sala.

Les había reunido a toda la plantilla para hacer un juego que creía que le ayudaría a Jude y a Arda a integrarse en el grupo.

- ¿Falta alguien? - pregunto a los ya presentes.

- Creo que solo falta Cama - me indica Tchuameni.

- Pues esperamos a que llegue.

- Ya estoy aquí - aparece Eduardo por la puerta -. Estaba buscando mi mochila, que no la encontraba por ningún sitio.

- Pasa y siéntate - le indico amable -. Bueno chicos, os he juntado a todos porque vamos a hacer un ejercicio para que Jude y Arda puedan sentirse más cómodos con el idioma.

Dicho esto comencé a explicar el juego en varios idiomas, y el que más me costó sin duda fue el turco. Después fue el turno de ellos intentar hablar en el idioma natal de sus compañeros.

Durante esa hora pudimos sacar momentos muy graciosos, como Valverde hablando alemán o Rudigüer hablando portugués.

Para Arda la actividad fue como una carga de energía positiva, un rato en el que no tuvo que preocuparse por el idioma o por hacerse entender, y Jude resultó ser el mejor en ello, ya que dominaba el ingles y el alemán, y entre otros podía pronunciar decentemente el español y el portugués.

- Bueno chicos esto es todo por hoy, muchas gracias por esa buena actitud, habéis conseguido algo muy chulo entre todos.

- Gracias a tí Julieta, era más que necesaria esta actividad - agradeció Luka.

- Podéis iros, nos vemos este finde en el partido.

Todos se levantaron de sus sillas para irse a su casa a descansar mientras se despedían, y vi como Vini esperaba a que hubieran salido todos.

- Me encanta verte tan animada - comenta Vini cuando estamos solos mientras me abraza por detrás pasando sus brazos hasta mi barriga.

Es cierto que durante las primeras semanas del verano me costó mucho adaptarme. La ropa que usaba antes se me quedó pequeña, y verme en biquini no era mi actividad favorita, podríamos decir. Además, pronto empezaban las clases y eso supondría más estrés, cosa que no era buena para mí ni para el bebé.

Por suerte había tenido a Vini siempre a mi lado, y me había ayudado mucho a superar mis nuevas inseguridades. Me regalaba un montón de vestidos ajustados porque decía que me quedaban genial y que podría lucir de barriga. He de admitir que me gustaba mucho usarlos.

- Es todo gracias a tí.

- No puedo hacer menos por la madre de mi hija.

- Como sea un niño le diré a tu hijo que le llamabas hija cuando estaba en la barriga.

- En caso de ser niño seré el hombre más feliz del mundo, y tú querrás arrancarte los pelos de desesperación porque voy a enseñarle a ser igual que yo.

- No creo que pueda aguantar a dos como tú - dije bromeando.

- Es que soy tan inigualable...

- Lo que tú digas, brasileño. ¿Nos vamos? - pregunté besándole.

- Espérame en la entrada que voy a por mis cosas y nos vamos - dijo y justo después se fue, no sin antes darle un beso a mi barriga.