Pov Alexandra
Al salir a la puerta de la iglesia ví como una camioneta negra empezaba a alejarse rápidamente, uno de los hombres saco un arma y empezó a accionarla hacia abajo y fue cuando el peor de mis pensamientos se hizo realidad, Vincenso estaba tirado en el suelo hacia donde se dirigían los disparos.
Un grito desgarrador abandono mi garganta y fue cuando los hombres detrás de mi respondieron a los disparos y subieron a los autos para perseguirlos, corri lo más rápido que pude en ese momento, y llegué hasta tirarme en el suelo y levantar su cabeza y sostenerlo en mis brazos, aún respiraba pero algo me decía que no sería por mucho.
- Te ves hermosa Amor mío - dijo en un débil aliento.
- ¡No mi amor! ¡No puedes abandonarme por favor!- lloraba desesperada.
Cuando la familia Lombardi llegó a dónde me encontraba tirada para confirmar el estado en el que se encontraba Vincenso.
- Mi calabazita, escúchame no tengo mucho tiempo - tosió débil - Te amo y siempre quiero que recuerdes que te amare por toda la eternidad mi amor - empezaba a agonizar.
- Te amo Vincenso, no me dejes sola por favor, quédate conmigo amor, no te vayas por favor quédate conmigo - lloraba a mares por el, mientras con sus últimas fuerzas me beso para soltarme y cerrar sus ojos para toda la eternidad. - VINCENSO, VINCENSO ABRE LOS OJOS ... ABRE LOS OJOS - las manos de Bella tomaron mis brazos e intento alejarme de el - ¡NO! ¡EL SE CASARA CONMIGO! ESTAMOS EN LA IGLESIA Y EL...Y EL... y el - el lamento de mi garganta era desgarrador un dolor tan profundo que no podía describir como quemaba mi pecho y me ardia el alma de tanto dolor, no podía más, el cuerpo de Vincenso estaba lleno de sangre con la misma que el blanco de mi vestido se había convertido en rojo.
La señora Lombardi lloraba desgarradoramente y Bruno había palidecido ante la escena que tenía enfrente, Bella parecía desmayarse en cualquier momento y Santino miraba impactado la escena frente a el, esas lágrimas pronto se volvieron ira en su estado más puro, saco su arma y se dirigió a uno de los autos con lágrimas en los ojos y se alejó del lugar.
Yo seguía aferrada al cuerpo de Vincenso llorando sobre el, negandome a soltarlo, no queria dejarlo ir, las lágrimas no paraban y yo acariciaba su cabello mientras lo observaba allí tan quieto, tan apacible, parecía que nada le molestaba en ese momento, pegue su rostro a mi pecho, cuando Alexia se agacho frente a mí, fue allí cuando caí en cuenta que la mirada de todos los invitados estaba sobre mi.
- Mi niña, suéltalo - su voz se quebró - El ya no está - lloraba desconsolada.
- No, el va a casarse conmigo, no puede dejarme, estuvimos durmiendo juntos y está noche era solo para nosotros dos, Alexia no quiero que se vaya - lloraba como niña pequeña tirada en el frío pavimento.
- Alexandra- el ya no está, hay que llevar a mi hijo a otro lugar - se puso de pie.
- Levantéla - dijo Bella, envuelta en llanto. Cuando dos hombres se acercaron a mi por ambos brazos me levantaron del suelo.
- No puedo, no puedo dejarlo ir - lloraba desconsolada.
- Para nosotros tampoco es fácil - Santino me tomo por los brazos - debes ser fuerte a Vincenso no le hubiera gustado verte así - me abrazo.
Llore amargamente pegada al pecho de Santino, y no sé cómo fue que llegue a mi habitación, estaba sentada en la orilla de mi cama justo como esta madrugada,con la diferencia que está vez Vincenso no entraría por mi puerta, veía mi vestido de novia manchado de la sangre del que sería mi esposo, mis manos estaban cubiertas por su sangre, oía perfectamente como intentaban ingresar a mi habitación, no sabía cómo era que me había encerrado allí, estaba estática llorando, había perdido el sentido de todo, no sabía que más hacer más que estar allí y llorar, cuando de pronto Santino estaba parado frente a mí.
- Debes levantarte, enterraremos a Vincenso hoy, han pasado dos días y sigues en la misma posición- hablo serio, pero a mí no me afectaba nada más en este momento, seguía perdida en llanto.
- No puedo ver el ataúd de Vincenso, lo lamento- brotaban más lágrimas con cada palabra.
- Debes ir, es lo que las viudas hacen, enterrar a sus esposos, aunque se estén cayendo a pedazos - intento hacerme entrar en razón.
- Esposa - me levanté de la cama, mire mi vestido y mis manos, arranque el velo de mi cabeza y lo tire por un lado, intenté romper el vestido, era tanto el dolor que sentía que parecía que iba a ahogarme, estoy cansada no puedo más, caí de rodillas al piso, Santino se agacho y me abrazo.
- Tienes que levantarte, eres la esposa de mi hijo y sin ti no podemos seguir adelante con el entierro de Vincenso - hablo Alexia apartando a Santino de mi lado - Para Vincenso tu ya eras su esposa solamente faltaba formalizarlo, así que como la compañera de mi hijo debes de continuar con tu tarea final, es tu deber con el Alexandra - limpio mis lágrimas.
- El y yo ni si quiera nos...- solloze.
- Ni siquiera hicieron el amor, lo sé cariño, pero quién dice que el sexo formaliza un compromiso, lo que mi hijo sentía por ti era lo único que se necesitaba para que tuviera gran valor, por ese amor que el tenía por ti te pido que te levantes de ese piso y cumplas como su esposa - me ayudó a ponerme de pie.
Me ayudó a deshacerme del vestido, me limpio en la ducha mientras yo seguía llorando, está mujer es mucho más fuerte que yo, era su hijo del que estamos hablando y ella está aquí consolandome a mí, eso me hizo recapacitar y saqué fuerzas de dónde no tenía y levanté mi rostro, termine de vestirme y baje lista para enfrentar lo que venía.
Al ver el ataúd de Vincenso y todas las flores que lo rodeaban sentí un impacto horrible, sentí desmayarme, las personas al rededor dando las condolencias a la familia y a mí como la viudad de Vincenso Lombardi, tome fuerzas y seguí adelante fue solo así que se emprendió el viaje a dónde seru el último lugar de reposo del que habría sido mi compañero, cómplice y mi primer amor.
Jure sobre el frío ferretro que vengaria su muerte esto no se quedaría así, te lo prometo amor mío los miserables que te hicieron esto lo pagarán con sangre mil veces peor de lo que yo sufrí por ti amor.
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El Infierno de Alexandra
RomanceAlexandra Greco sufrirá en carne propia el dolor más insoportable en este mundo, lo que la llevará a tomar una sed de venganza insaciable, le será tendida la mano de una persona que es completamente ajena a ella, queda desprotegida con la muerte de...