NARRA PEDRILa tristeza te temía Pablo Martín Páez Gavira. Los momentos junto a ti siempre eran memorables. Había olvidado por completo lo duro que se me hacia mi lesión. El no poder darlo todo en el campo. Todo disipado con aquella visita donde me aclaraste de una vez por todas mis sentimientos. Pero, por desgracia en ningún punto me atrevería a decírtelo. No al menos todavía.
El tercer día llegó y con él nuestra despedida. Mi padre y mi madre aquella mañana se empeñaron en llevarnos a ambos al aeropuerto. Ahora, simplemente me encuentro absorto de nuevo mirando un punto fijo, pensando en todo lo que has hecho por mi...
- Toma... - Dijo Gavi en silencio haciéndome entrega de algo.
- ¿Qué es? Dios es muy bonito.
- Lo he hecho con las conchas que cogí ayer. Por la noche no podía dormir, no quería que llegase el día de hoy. Sinceramente lo estaba pasando en grande junto a ti. - Aclaró Pablo algo apenado dejando caer su cabeza sobre mi hombro, a lo que yo sonreía algo triste.
Pablo me hizo entrega aquel día de una pequeña pulsera hecha de pequeñas caracolas que había recogido por los alrededores. Era un encanto, sin dudas la guardaría como un gran tesoro para recordar estos días.
Llegamos. Por desgracia llegamos.Pablo miraba su billete y comenzaba a pasar por los controles de seguridad junto a todo su equipaje algo cabizbajo. Yo me limitaba a mirarlo junto a mi familia.
- Todo en orden, pase - Dijo aquel guardia mientras Gavi cogía de nuevo sus bártulos. Lo acompañamos hasta la terminal donde cogería su próximo vuelo. No queríamos que se quedase solo todo ese tiempo esperando, por lo que decidimos hacerle algo de compañía.
Mis padres al cabo de un pequeño rato tuvieron que despedirse antes de él, debían abrir el bar y trabajar. Aún así Gavi los abrazaba con gran fuerza expresando las gracias por haberlo cuidado como a uno más de la familia.
Acabaron por irse mientras que él y yo nos quedamos solitarios en aquel lugar. El silencio reinaba el ambiente, tanto él como yo sabíamos que no queríamos separarnos, se nos notaba en la mirada. Pero, no había nada más que hacer.
Tuvimos pequeñas conversaciones relacionadas con el mundial el cual estaba a la vuelta de la esquina. Fantaseábamos sobre la idea del complejo, las habitaciones y las camas. Pero, por su tono notaba como estaba aterrado ante esa idea. Había llegado la hora.
Pasajeros con destino Barcelona embarquen por la puerta número cinco. Repito. Pasajeros con destino Barcelona embarquen por la puerta número cinco - Anunciaban por megafonía.
- Bueno... toca despedirnos ¿no? - Si... - Gavi graci-
Gavi cortó mis palabras para abrazarme fuertemente mientras algunas lágrimas recorrían su rostro.
- Oye... no llores. - Perdón, perdón. Muchas gracias a ti por todo. Estos días juntos han sido geniales, espero haberte animado lo máximo posible. - Ten por seguro que lo has hecho.
Comencé a cosquillear su cuello mientras comenzaba a separarse de mi.
- Espero que nos volvamos a ver pronto.
- Tenlo por seguro.
Gavi comenzó a darse la vuelta para comenzar a embarcar. Pero, me notaba extraño, no sabía que estaba sucediendo.
¿̶̘̓Q̷̻̇ü̷͓é̴̟̓ ̸̛̹e̵͖̅s̵͠ͅt̶͚̍á̸̹̑ ̷̝͠p̸͈̚a̵̲͋s̵͉̉a̸̮͗n̴͎̽d̴̮̓ǫ̸̉?̴̤͝¿P̴̻̉ŭ̸̢e̷̞̎ḓ̷̾o̵̩͋ ̶͉̾ć̷͉o̶͖͋n̷̩͐t̵̰̾r̵͓͆ő̶̩ĺ̶̟ȧ̵̖ŕ̶̙ ̶̼̔ë̵̯́l̵̳̍ ̷͇̔ř̴̝e̶̩͒c̶̖̍u̴͚̾ë̵́ͅr̵̛͉d̵͉̓o̵̬͗?
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Me iluminaste || Gavi x Pedri
أدب الهواةGavi un adolescente con traumas pasados logra alcanzar su sueño tras innumerables baches a lo largo de su vida, llegar al primer equipo del FC Barcelona. Donde logrará encontrar su sitio de felicidad, amigos, risas, y sobre todo a su mejor amigo Ped...