Perdón Hyung >> Hwang Hyunjin

‹ャ . . . ¡32!

Todos pensaron que la situación entre Hyunjin y ____ tardaría en arreglarse. Después de todo, conocían lo tercos que eran y que siempre esperaban a que fuera el otro el que se disculpara, lo cual llevaba a que tardaran más de lo normal en arreglar sus cosas. Además, cabía recalcar que lo que había sucedido no era simple cosa, al menos los que estaban enterados de lo que realmente había pasado pensaban que se tomarían su tiempo para charlar u organizar sus pensamientos.

Fue por eso que tanto Minho, como Changbin y Jisung, se sorprendieron cuando aquel lunes por la mañana antes de entrar a clases, los dos chicos llegaron a la institución hablando tranquilamente, como si nada hubiese pasado días atrás. Minho no había creído a las palabras de Hyunjin cuando éste le comentó que lo arreglaría todo, para aquel punto, ya ni siquiera le tenía ni un poquito de esperanza, todo gracias a sus infantiles y descerebradas acciones; pero verles llegar juntos sin duda fue un gran alivio para él.

Porque después de todo; aquellos dos eran sus mejores amigos. Claro que tenían sus otros amigos, pero ellos tres eran hermanos, se querían que de tal forma y odiaba la idea de que eso podría cambiar algún día. Le hacía feliz ver que una vez más estaba reconciliados, y por ello no tardó ni un segundo en correr hacia ellos, rodeándolos a ambos en un fuerte abrazo que les sacó un par de quejidos a los menores.

— Ustedes dos, idiotas —se apartó para verles con una gran sonrisa, sin embargo, sus palabras estaban llenas de reproche y molestia—; que sea la última vez que me asustan de tal manera. No pueden arruinar el trío, ¿entienden? somos shrek, burro y gato, no nos podemos separar.

— Lo lamento, hyung. —Hyunjin se adelantó en disculparse, pero la delicada mano del pelirrojo menor sobre su brazo le hizo bajar la mirada hacia él.

— Está bien, basta de tantas disculpas —negó con una sonrisita, volviendo la vista a Minho—. Sé que ahora vamos a ser mejores que nunca, tengo un muy buen presentimiento.

— ¡Oigan, muevan ese trasero!

Soltaron unas risitas al escuchar el grito de Jisung, éste se encontraba junto a Seo en la cima de las escaleras, con sus manos juntas y dedos entrelazados. Ya no era para nadie sorpresa que algo estaba sucediendo entre aquellos dos, pero todos decidieron de manera silenciosa y mutua el esperar a que lo comentaran ellos mismos.

Decidieron hacer caso a los apuros del menor para así ingresar al instituto, charlando de manera muy animada como para ser un lunes (y teniendo Minho un exámen a primera hora). Los pasillos se encontraban llenos de estudiantes, algunos charlando de igual manera con sus amigos y otros en sus casilleros causando ruido al abrir las puertas metálicas. El sonido de la campana hizo que todos iniciaran su recorrido a clases, de igual manera el grupo de amigos inició su camino hasta sus aulas, pero ____ se detuvo de imprevisto llamando la atención de Changbin.

— ¿Qué? ¿Qué pasa? —preguntó, llamando la atención de los demás quienes decidieron hacerse a un lado para que los demás estudiantes siguieran caminando.

— Debo sacar un libro de mi casillero, los veré luego.

— Voy a acompañarte. —soltó una risita nerviosa ante el ofrecimiento de Hwang, aquello fue visto raro por los otros tres pero no comentaron al respecto.

— No, no, será rápido, no te preocupes. Jisung, dile al profesor Tadashi que iré en unos momentos.

— Vale, pero será mejor que te apresures. Dame tu mochila, así te guardo asiento a mi lado.

Hizo caso a las palabras del chico, pero cuando iba a darle su bolso Changbin se adelantó a tomarlo, sacando una queja del de mejillas abultadas.

— ¡Yah, puedo agarrarlo!