Perdón Hyung >> Hwang Hyunjin

‹ャ . . . ¡12!

Mierda...

- ¿Llorando? Pff, son tan graciosos.

- ____...

- Llegaremos tarde a clases si no nos apuramos, andando -fingió su mejor sonrisa, enseñando sus hoyuelos.

- ____, Dios...

- Vamos, llegaremos tarde, ____ lo dijo -las palabras de Changbin sonaron secas, molestas-. Yo me voy, adiós.

El peli gris se dió media vuelta, entrando al instituto y perdiéndose entre el mar de estudiantes que iban a sus aulas.

- Andando ____.

Asintió, caminando a un lado de su amigo azabache en silencio. Llevaba su vista en el suelo, con sus manos en los bolsillos.

Llegaron al aula que compartían, estaba sólo, para desgracia de ____, quien pensó, que si había aunque sea un estudiante, Han no comenzaría a interrogarle.

Pero ahí estaba, a solas, con Jisung.

- ¿Me lo dirás, o debo adivinar?

- Dios, Jisung por favor...

- No ____, soy tu mejor amigo. Los amigos se apoyan entre sí -el menor quedó en silencio, observando con seriedad su banco-. Es por HyunJin, ¿no?

El pelirrojo alzó su cabeza de golpe, observando con ojos abiertos como platos al mayor, quien estaba cruzado de brazos y se encontraba casi sentado sobre la mesa del banco.

- No, no, Dios, ¿por qué debería ser por HyunJin? -habló entre balbuceos a penas entendibles.

- Siempre llegas con HyunJin, Minho y Hyesun, hoy llegaste sólo y con los ojos rojos... por lo que debe estar involucrado con alguno de ellos, ¿no?

Calló, observando con nervios la mirada seria de su amigo. Pocas eran la veces en las que se podía observar serio a Han, y la verdad es que daba miedo cuando lo estaba, le ponía nervioso verlo así.

Suspiró, desviando su vista al pizarrón.

- ¿Por qué HyunJin? -preguntó en un hilo de voz, bajando su vista a sus manos que jugaban entre sí.

- Porque te gusta... corrección; lo amas.

Paró el jugueteo de sus manos, tensándose de inmediato. Podía sentir como comenzaba a sudar de los nervios, y el como su cara se volvía blanca como una hoja de papel.

- ¿Qué...?

- Vamos, no soy tonto. Nadie en realidad lo es... a excepción de Minho, ese chico es demasiado tontito, sabes de qué hablo ¿no? -rió divertido, descruzándose de brazos y apoyándose con sus manos de el banco-. Él... ¿dijo algo que te hirió? ¿que te molestó...? O en éste caso, te hizo llorar...

- Espera, no...

De repente, los demás estudiantes aparecieron como por arte de magia, agotados, cansados.

Uno de ellos, al verlos, se acercó. Era el delegado, Choi Soobin.

- ¡Oigan!, ¿se puede saber porqué no fueron a gimnasia? Se les ha puesto inasistencia gracias a que faltaron.

Ambos amigos se compartieron una mirada de sorpresa, a la vez avergonzados por no haber recordado que a primera hora tenían gimnasia.

- Perdónanos Soobin ah, estabamos hablando de la próxima exposición y por eso se nos ha olvidado la clase de primera hora -el pelirrojo se levantó de su asiento, haciendo una leve reverencia junto al azabache.

- Hmp, como sea. Por lo menos tienen una excusa válida... hablen con la profesora de gimnasia y expliquenle la situación luego -el de cabellos rosas llevó una mano a su nuca, nervioso-. Ahora siéntense, la clase de química va a empezar.

El delegado de la clase se alejó, dando órdenes a todos, quienes de inmediato obedecieron.

Ellos no fueron la excepción. Y, después de pensarlo, se inclinó hacia su hyung azabache.

- Te contaré en receso, junto a Binnie, creo que le debo una disculpa.

- Está bien.

Se acomodó en su lugar, sacó sus cuadernos y esperó a que el profesor llegara.

Pasó sus manos por su rostro, cansado. Sintió como una mano se posaba en su hombro, por lo que se volteó, observando al delegado.

- Hyung, me preguntaba si le gustaría almorzar conmigo...

El mayor lo pensó, posando una mano en su mentón. Tal vez podría...

- Bien, pero -agregó en cuando lo vio casi gritar de la emoción- primero hablaré con unos amigos sobre un tema importante. Si me da tiempo te buscaré.

- Genial, yo estaré en el patio junto a otros amigos. Lo esperaré.

- Bien.

El pelirrojo se volvió en su lugar, acomodándose al mismo tiempo que el profesor ingresaba.

Soltó un suspiro, rascando su nuca con suavidad, para luego apoyar su mejilla en su mano y el codo en el banco, prestando atención a la explicación del mayor en la clase.

[ • • • ]

¿Cuándo llegarán...?

Se encontraba dando vueltas y vueltas en la azotea. Ésta estaba, como siempre, desolada. Por lo que se le facilitaría contarle todo a los chicos sin interrupciones.

Escuchó la puerta del lugar ser abierta de par en par. Se dió la vuelta y observó a Han y Chang entrar.

Se quedó estático en su lugar mientras que ellos se acercaban. Una vez estuvieron frente a frente se vieron entre sí.

El menor inhaló hondo, nervioso y sintiendo sus manos sudar.

- Antes que todo, te debo una disculpa Changbin hyung, usted se preocupó y yo... bueno, fingi demencia -rascó su brazo, observando al mayor a los ojos.

De repente la expresión seria del mayor se ablandó, dando paso a una sonrisa.

- Tranquilo, no nos querías preocupar, es todo. Pero somos tus amigos, ¿bien? no nos dejes de lado cuando podemos ayudarte, ¿si? -el pelirrojo asintió repetidas veces, sonriendo-. Bien, vayamos a sentarnos, me duelen las piernas de tanto subir escaleras.

Rieron, acercándose hasta una banca y dejando que el menor se sentara en el medio.

- Ok, entonces -suspiró, reunió todo el valor del mundo y empezó a hablar-, así es la cosa hyungs; como ustedes saben, creo, me gusta HyunJin...

- Algo obvio, ¿no?

- Hyuung -se quejó, golpeando suavemente el hombro del peli gris.

- Bien bien.

- Bueno, sigo... Ayer, Minho se enteró de eso... no sé cómo, ya que no le dije, se enteró por su cuenta y hoy en la mañana quiso "ayudarme" dándole celos a HyunJin -inhaló hondo, sintiendo de repente su pecho doler-. Yo... HyunJin nos vió, ni modo, y preguntó si éramos novios... pero la manera en que lo dijo, su expresión...

- Como... ¿si tuviera asco? -ante la duda de Jisung asintió, con su cabeza gacha.

- Me tiene asco -afirmó, sintiendo las primeras lágrimas salir.