𝘖𝘯 𝘺𝘰𝘶𝘳 𝘬𝘯𝘦𝘦𝘴

8.4K 488 128
                                    

  

Nessa Pérez .

—Mmh No hagas eso Ness...— Tom gruño, debido a que le mordí su labio inferior, reí ante eso , dejando un corto beso en sus labios.

—Aveces eres tierna— murmuro besando mi cuello , haciendo que ladee mi cabeza con una sonrisa —Eso me gusta—.

Nos encontrábamos en la casa de Tom , para ser más específica, metidos en su gigante jacuzzi, luego de aquel buen regalo de cumpleaños , me trajo hasta acá, con la excusa de que la noche aun no terminaba , y yo de obediente me encuentro encima de el , con sus manos en mi cintura , comiéndonos a besos , hablando estupideces.

Bueno y mi mejor amigo Nick , lo llame unas quinientas veces, desesperada preguntándole por su existencia, mientras él me respondió con un miserable mensaje sobre que  iba a follar con el atractivo mesero de ojos familiares, que nos ofreció tequila.

—Debería regalarte mas bikinis de estos— murmuro dejando caer su cabeza hacia atrás, aun con sus manos en mi cintura.

Ladee mi cabeza , acomodándome un poco mas en el , viendo como comenzaba a respirar de forma pesada.

—Lo se , me quedan increíbles ¿no?— me estire cerca de él para sacar una fresa, que se encontraban en una bandeja encima del jacuzzi.

Soltó una risa , lamiendo su jodido piercing —La pregunta es... que no se te ve bien amor— Me acerco a él robando la fresa de mis labios.

La comió descaradamente y en un rapido movimiento me tomo de la nuca atrayéndome otra vez a sus exquisitos labios , los cuales me estaban volviendo adicta.

—Quiero repetir mi regalo Kaulitz— murmure en su boca , haciendo que su agarre se vaya a mi trasero.

—¿A si?— gruñó acercándose a mi oído —Entonces demuéstrame que mereces tu regalo—mordiendo mi lóbulo—.

Comencé a mover mis caderas hacia adelante y atrás, lo que era un poco mas difícil debido al agua, comencé en círculos sobre su cuerpo , su bulto no tardó en aparecer comenzando a crecer de a poco sobre mi centro,haciendo que excitara cada vez más.

Colocó sus manos en mis caderas , tratando de guiar mis movimientos,pero esta vez no lo dejaría.

Me acerqué a sus labios —Ahora mando yo kaulitz— susurre.

No dude en estampar mis labios con los suyos ,el cual me correspondió sin dudarlo, su lengua se abrió paso hacia mi boca, llevándome al nivel que solo él puede ponerme,comenzamos una lucha de lenguas debido a la excitación que teníamos los dos.

Mordió mi labio inferior con fuerza , haciendo que soltara un gemido en sus labios , volviendo a mover mis caderas, al sentir su dura erección.

Me tomo de la nuca , con su mirada que me quemaba por dentro —Te lo mereces Ness— corrió la tela de mi bikini , acariciando con su dedo pulgar mi clitoris.

Comenzó a aumentar la velocidad de sus movimientos haciendo que me aferre a su hombro, hasta que su teléfono comenzó sonar, gruño apagándolo sin dejar sus movimientos en mi clitoris.

HOTEL ROOMDonde viven las historias. Descúbrelo ahora