Cómo debe ser

Cortando la naranja en dos

Los susurros del lago cuentan historias. Son historias corrientes, historias de terror, historias de amor, historias de caballeros y princesas, historias de príncipes azules, historias de princesas independientes, historias de amores imposibles. En definitiva, historias.

Pero todas las historias del lago comparten una característica, todas las historias del lago son trágicas, todas las historias del lago acaban mal, porque, en todas las historias del lago el villano siempre triunfa. 

El lobo tiene piel de cordero e hileras de dientes afilados preparados para perforar tu tierna carne

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Se dio la vuelta, quería seguir durmiendo a pesar de que no podía más, no podía parar de hacer la croqueta en la cama... un momento ¿La cama? 

Rim: (Cómo he llegado aquí...) ─Se levantó y estirazó mientras se frotaba los ojos. ─(Lo último que recuerdo es estar tumbado sobre Dusk, admirando el cielo estrellado mientras luciérnagas revoloteaban entre nosotros y... y...) AHHHHHHH ─Gritó en un ataque de pánico al recordar lo que pasó la noche anterior. Ahora lo recordaba claramente, recordaba los abrazos, las caricias, los besos... No se lo podía creer. La puerta se abrió de golpe.

Dusk: ¡¿Estás bien?! ─Exclamó y vio a Rim de pie, llorando y no pudo evitarlo, no pudo evitar salir corriendo a abrazarlo angustiado. ─¿Qué ha pasado? ─Volvió a preguntar en un tono reconfortante o que al menos intentaba serlo.

Rim: No... no lo sé. ─Respondió, claramente sabía por qué había gritado. Pero temía que solo fuese un sueño.

Dusk: ¿Y por qué lloras?

Rim: ¿Eh? ─Llevó una mano a sus ojos. Humedad. ─No lo sé. ─Dusk se separó del abrazo sin soltar del todo a Rim, mirándole confuso. ─¿Lo que pasó ayer fue real?

Dusk: Tan real como que los pájaros pian antes de que llueva. ─Dusk besó a Rim en la frente lo que hizo que se estremeciese.

Rim: Es solo que... no me lo creo.

Dusk: Pues créelo, porque voy a estar aquí para ti, además tenemos que prepararnos.

Rim: Sí... probablemente lleguen antes de la hora de comer. ─suspiró mientras se hundía en el pecho del incineroar.

Dusk: Vamos abajo, he hecho el desayuno.

Rim: Oww, muchas gracias ─dijo mientras lo abrazaba─, pero podrías haberme despertado.

Dusk: No quería molestarte, te veías tan lindo.

Rim: No tienes que ser tan atento, además, la verdad preferiría haberte ayudado a hacer el desayuno.

Ambos bajaron a desayunar. Dusk Había preparado el desayuno, no era algo demasiado complejo, pero a Rim se le hizo algo extraño. Los platos ya estaban colocados, un plato con dos rebanadas de pan y otro con cuatro, hasta ahí todo normal, pero lo llamativo estaba justo encima del pan.

Rim: Dusk, ¿Por qué la tostada con jamón de York tiene rodajas de pepino por encima?

Dusk: ¿A qué te refieres? ─Preguntó confuso mientras tomaba asiento y empezaba a comerse la primera tostada─. ¿No te gusta el pepino? 

Rim: No es eso... es que es raro. ─Se sentó y cogió una tostada para admirarla

Dusk: ¿Raro? ─Respondió claramente ofendido─. Pues así lo hacemos en mi tierra. Si no te gusta no te lo comas.

Rim: Perdón, solo se me hizo extraño. No pretendía atacarte (Aunque ahora mismo tengo ganas de partirte la cara en dos, pero no voy a dejar que esto nos arruine nuestras últimas horas sin vernos. Además, por las mañanas siempre está así de susceptible hasta que desayuna). Seguro que está genial ─Afirmó y lo probó, no era nada del otro mundo, pero no estaba mal─. Mmmh, está buenísimo, como supuse.

Dusk: Me alegro ─Respondió algo seco, sin embargo, ya no tenía el mismo tono agresivo de antes. Terminó con la segunda rebanada─.

Rim: ¿Sabes por qué sabía que iba a estar tan bueno? 

Dusk: ¿Por? ─Contestó levantando una ceja, incluso paró de comer para prestarle atención.

Rim: Porque lo has hecho tú. Y todo lo que haces me encanta. ─Dusk se sonrojó y engulló lo que le quedaba en su ahora impecable plato.

Dusk: Gracias, me alegra mucho que te guste. ─Se levantó y fue a llevar su plato a la cocina, para después ponerse a lavar los platos mientras que Rim terminaba de comer. Rim por su parte se limitó a disfrutar su peculiar desayuno, la verdad el pepino le aportaba un frescor vitalizador a la tostada, definitivamente combinaba muy bien con el embutido y el pan, que estaba en su justo punto. Sin embargo, Rim no pudo apreciar esto, estaba demasiado concentrado en pensar en cómo pasar las pocas horas que les quedaban. Al final se le ocurrió algo, se apresuró por terminar de comer y fue a dejar su plato y a contarle a Dusk lo que se le había ocurrido─.

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Bueno, bueno, bueno. Primero, perdón por haber muerto sin avisar; Segundo, ha sido porque he comenzado mi segundo año en bach (Sí, en bach y me hallo escribiendo fics de pokemon, así soy yo akjskaj); Tercero, no me he olvidado de ninguna de mis dos historias, simplemente no me da la vida para escribir (ni para escribir ni para nada) porque no solo estoy en bachillerato, si no que además el año pasado cursé el bachillerato de sociales y este me he cambiado a ciencias de la salud, porque sí, soy masoquista. 

La cosa es que voy a terminar estas historias (porque soy un cabezón de mierda) solo que no publicaré semanalmente cómo antes, sino que tardaré un poquito más.

Y perdón porque este capítulo sea literalmente la mitad de uno normal, es que es lo que llevaba en borradores kasakskja.

Muchas gracias a todos los que leen esto y no me denuncian por escribirlo, de verdad os aprecio y espero que os vaya genial y que no toméis decisiones tan malas como las mías.

Un beso en el poto, nos vemos mis amores <3.