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Narra Catherine:

-¿A donde crees que vas Styles?- le pregunté cuando lo vi abrir de par en par la puerta de mi habitación.

-A buscar comida. Al menos que pretendas que vivamos a los caramelos que tienes en tu mesa de luz; además en media hora empieza el partido de los Lakers- respondió

-¿Vas a quedarte solo con las ratas que están sueltas?-pregunté horrorizada por la idea de convivir con aquella clase de animal al cual le tenía fobia.

-Es un animal, chiquito e inofensivo Cath- respodio intentando quitarle importancia al tema.

Obvie su comentario ya que lo que menos buscaba era crear una discusión en base a como son las ratas y porqué les tengo fobia. Así que observé el reloj de la mesa de luz.

-Lo que se es que tengo que ir a ver a Jamie y más vale que cuando vuelva esa rata este fuera del departamento o mañana a primera hora busco una solución- le dije

-¿Me llamas cuando el juego este a la mitad o como mucho termine así puedo volver?- le pregunté pidiendo lo mismo que él cuando fue a la casa de su madre.

-Esta bien, ¿queres que te vaya a buscar?- se ofreció repentinamente y me sorprendió su gesto de amabilidad cosa que notó.

- Es que me olvidé mi billetera con el dinero del mes en la casa de mi madre y con lo que nos queda solo alcanza para tu taxi de ida- agregó

-Si tenes que salir, entonces me parece bien. Llámame cuando estes cerca, te paso la dirección por mensaje.- le dije y tomé mi bufanda roja de lana y la enrolle en mi cuello.

Busque en el cajón del mueble de la entrada las treinta libras, que quedaban para nuestra subsistencia de la semana y salí rumbo al bar donde quedamos con Jamie en encontrarnos.

Conte el cambio del viaje en taxi y supe que no sería necesario que Harry pase a buscarme. Lo cuál me ahorraría varios problemas; número uno en mi lista:
- Seguir alimentando la idea de Jamie de que salgo con alguien como o mejor dicho con Harry Styles, el joven rico y más deseado de Londres.

Aunque pensándolo bien me gusta como una pequeña medida de celos invaden los ojos de Jamie cuando menciono a Styles; creo que sobre todo es porque lo llamo de la misma forma que le decía a él, por el apellido. Jamie era Bower, cuando quería molestalo Campbell y cuando me enojaba Jamie Campbell Bower.

Más vale que Harry nunca lo sabrá pero en realidad llamo a las personas por su apellido cuando les tomo un poco de afecto, puede ser malo como bueno y Styles se encuentra en el medio de ambos.
En momentos lo quiero matar y en otros me agrada pasar tiempo con él.

Entre al bar y fuí a la barra pensando en encontrar lo ahí. Di una vista general del lugar y en una mesa en la esquina junto a la pared de ladrillo rojo revocado, distinguí sus pelos rubios y noté.
Él levantó la mirada y me divisó, hizo una seña para que me acerque. Pedí un vaso de jugo de naranja ya que no soy de tomar mucho y me acerque a donde se encontraba Jamie.

- Hey, Rosie- me saludó para mi sorpresa bastante animado.

- Jamie- lo saludé seca.

Mi celular sonó avisando que recibí un mensaje.

"Walace, pasame la dirección del bar" Harry me había pedido; seguro en algun entre tiempo del partido o algo.

Busque el mensaje de Jamie, copie el contenido y se lo reenvíe

-¿Sabes?, creí que yo era el que llegaba tarde de los dos- dijo dando un trago a su copa de vino blanco de etiqueta reconocida y seguramente cara.
Rodé los ojos al notar el nombre, fácil esa botella cubriría dos semanas de convivencia de Harry y yo como mínimo.

- ¿A cual de los Jamie te referis; al que llegó tarde a nuestra primera cita o al que llegaba tarde en su auto bastante lujoso que su novia le había pagado las mejoras como regalo de aniversario?- pregunté molesta a su actitud tan frívolamente modesta.

- Me duele que me recuerdes así Rosie- Intentó hacerse el dolido reprimiendo una risa.

-No me llames Rosie, desde el momento en el que terminaste conmigo por ese misero cheque, para vos soy Catherine a secas ni siquiera Cat o algún otro apodo- reproche

-De acuerdo Catherine- dijo haciendo énfasis a mi nombre completo.

- ¿Me devolves la pulsera Jamie?- le pedí amablemente.

- Claro, aún recuerdo tu sonrisa cuando te la regale. - dijo mientras buscaba una caja en el bolsillo de su campera

Estiró la caja hasta mi alcance sobre la mesa, la abrí y me coloque la pulsera. Jamie la engancho quedando así mi muñeca derecha nuevamente adornada. Sonreí levemente al recordar que ese fue el mejor regalo de cumpleaños que podrían haberme dado y él me devolvió la sonrisa.

-¿Sabes Cath? Varias veces cuando terminé con vos, me lamente mucho la manera en la que lo hice- me dijo por lo que creí que me estaba mintiendo.

-jajajaja- reí por su mentira pero la mirada de Jamie me dio a entender que podría ser serio.

-Me vas a decir de verdad que te arrepientes de haberme dejado por un misero cheque de 12.000 libras, perdóname pero por experiencia propia ya no te creo. Solo me preguntó cuanto vale tu nueva presa- le dije

-Cassie es diferente Cath, veras ella al principio me rechazó y me hizo esforzarme para salir con ella. Con Cassie puedo ser quien realmente soy- defendió a su nueva pareja

-Como sea, supongo entonces que conmigo nunca hubo algo real entonces después de escucharte- le dije y me levante para irme; llamaría a Harry para que vaya a buscarme a la plaza.

-¿12.000 libras?- preguntó sorprendido

-Pues si, ese era el valor que tenía el cheque que encontré en el tacho de basura. Hasta Mark me dijo que tuvo que hacer un cheque mas grande para que lo aceptes- le respondí

Aunque ahora pensando lo bien, Mark tampoco era alguien de fiar. Después de todo él estaba de tras de todo eso, aunque Jamie fue complice.

-¿Acaso crees que acepte todo ese dinero por terminar contigo Rosie? Quedándome contigo en estos años sin duda hubiéramos superado esa cifra- dijo captando mi atención por sus palabras; tenía sentido lo que decía así que me acerque nuevamente a la mesa para escuchar lo que tenía que decir.

-¿No aceptaste el cheque?- pregunté sorprendida

-No, tu padre Mark me citó a su oficina para ofrecerme dinero por terminar contigo y no dañar más su imagen y por ende el nombre de su empresa pero no lo acepté si bien me gustaban los regalos caros que me dabas cuando salíamos. Los momentos lindos que pasamos juntos, jugaron en contra cuando tuve aquel pedazo de papel con la gran cifra escrita dirigido a mi nombre y no se sintió bien hacer eso así que deje el cheque en su escritorio; Mark se sintió ofendido por el rechazo y de mala gana escribió uno nuevo que debe de ser el que encontraste en el tacho de basura- respondió contando su parte en esta historia en discordia.

- ¿Entonces por qué terminaste conmigo?- le pregunté

- Yo, te engañe Cath. Fue en la fiesta de Joe, había tomado bastante; vos no me habías acompañado y en la pista de baile esa chica me seducio con sus movimientos.- respondió

- Un fotógrafo le mando las fotos a tu padre; él me extorsiono y por eso también terminé con vos Cath- confesó el motivo verdadero.

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Bueno corte ahí el capítulo para poder subir el capítulo.
No puedo creer que el capítulo anterior tiene 33 votos; es algo realmente asombroso.
Como también lo es el hecho de haber llegado a los 17.000 leídos.
Gracias, gracias y gracias a ustedes que leen, votan y comentan.
Sepan que leo cada comentario como se habrán dado cuenta.
Y última cosa antes de terminar:
- Me cree una cuenta en Twitter (@NamlessAnne) y twiteare cada vez que suba un capítulo. Si quieren seguirme por si no tienen añadida la novela a su biblioteca puedan saber que la seguí.

- Las amo

《Feeling Called Love》h.s  #TerminadaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora