/ 045 / ▫️▫️▫️▫️💭

566 66 13
                                    

JISUNG

El clima de hoy, es simplemente perfecto. Fresco y agradable.

Lamentablemente, es nuestro último aquí en Hawaii. ¿Me quiero ir?, de ninguna manera. Me quiero amarrar a una palmera.

Pero justo ahora me encuentro pescando con el padre de Heejin. Solo estamos él y yo pasando este momento juntos. Y el ambiente es cómodo. Él logra que sea así. Desde que Heejin y yo llegamos, en ningún momento me ha hecho sentir incómodo. Nadie de su familia lo ha hecho. Y estoy inmensamente agradecido por ello.

—El clima que hay hoy, me encanta — comenta relajado viendo el paisaje — Es silencioso, tanto que te permite pensar.

—No es tan agradable para personas que sus pensamientos los atormentan — suelto inconscientemente y cierro la boca al instante— Yo, eh, no quise decir eso tan explícitamente — me explico torpeza y me da una mirada llena de comprensión.

—Sé muy bien que los pensamientos pueden ser un lugar lleno de angustia y desesperanza. Es por eso que debes afrontarlos, cuestionarlos, y luego; cortarlos de raíz. No es tarea fácil, debes escuchar atentamente tus propios gritos, reclamos y dolencias. Y eso dolerá. Pero llegará el día en que tus angustias, se convertirán en silencio. Y podrás escuchar como el río fluye tranquilamente — habla pacíficamente con una ligera sonrisa.

Sus palabras me sirvieron de consuelo. Fueron como beber chocolate caliente en pleno invierno, cálidas y acogedoras.

—Aprecio mucho sus palabras, gracias — agradezco genuinamente haciendo una leve inclinación.

—No es nada, hijo — responde dejando  suavemente unas palmadas en mi espalda — ¿Te ha gustado tu viaje?. Aolani y yo estamos muy felices de haberlos tenido con nosotros estos días.

—Han sido unos grandiosos días; Hawaii es de otro mundo — afirmo recordando a gusto los momentos que he pasado aquí— Definitivamente regresaremos cuando tengamos la oportunidad.

—Siempre que vengan, serán bien recibidos en casa— indica y afirmo con mi cabeza — Han — pronuncia luego de guardar por corto tiempo silencio.

—Si.

—¿De verdad deseas pasar el resto de tu vida con mi hija? — pregunta y de inmediato siento mi corazón acelerarse.

Lo deseo con cada latido que da mi corazón, señor Kahale — confieso con seguridad y sonríe cerradamente satisfecho.

—Eso es dulce — admite — Me recuerdas a mi cuando el padre de Aolani me preguntó lo mismo— confiesa soltando una risita — La única diferencia es que yo tartamudeé por los nervios— comenta divertido y aprieto mis labios para no reírme en su cara — Ríete, sé que quieres hacerlo — y sí, me reí a carcajadas luego de escucharlo imitar su respuesta de aquel momento.

—Era un señor muy íntimamente, solo lo vi sonríer siete veces en todo el tiempo que lo conocí— expresa dramáticamente — Pensé que en ese momento me lanzaría a mar abierto. O que sacaría un machete y ¡TRAZ!, no más Kale en este mundo —relata y rio levemente por sus expresiones — Los tiempos de antes eran aterradores.

—Ya veo — digo luego de imaginar todas las escenas que relató. Gracias al cielo que él no es así. Porqué de lo contrario, en vez de mi; habría un quokka escondiéndose en el núcleo de la tierra.

/..../

—¡Ya hemos regresado!— Kale alza la voz al ingresar a la casa — ¡Jisung pescó cinco peces de gran tamaño!.

°★ Sweet Star ★° {Han Jisung y Tú} Donde viven las historias. Descúbrelo ahora